La falta de incentivo fiscal, principal obst¨¢culo al patrocinio en Espa?a
Las II Jornadas sobre Patrocinio y Mecenazgo, que se desarrollaron el mi¨¦rcoles y el jueves de esta semana en el C¨ªrculo de Bellas Artes de Madrid, se han planteado como principales necesidades leyes y desgravaciones fiscales que favorezcan e incentiven esta actividad en el sector privado. Estas jornadas, organizadas por Atrium Sponsoring, tuvieron como invitados a representantes de diversos pa¨ªses, que compartieron sus experiencias sobre el patrocinio como instrumento de comunicaci¨®n de la empresa.
Las jornadas convocadas este a?o en Madrid son la continuaci¨®n de la primera reuni¨®n internacional realizada en Barcelona el a?o pasado y que en esta ocasi¨®n se centraron en aspectos t¨¦cnicos sobre el patrocinio y el mecenazgo. Los principales aspectos tratados en las diversas intervenciones fueron las caracter¨ªsticas de! patrocinio en los campos de la cultura y el deporte.El escultor Mart¨ªn Chirino, presidente del C¨ªrculo de Bellas Artes de Madrid, pidi¨®, en la ponencia inaugural, que se busquen medios por los que la cultura se aleje de la ¨®rbita exclusiva del Estado. "Estamos, evidentemente, un paso atr¨¢s de los pa¨ªses que nos han precedido en el camino del patrocinio", dijo. "A consecuencia de ello, los centros culturales, en su gran mayor¨ªa, no han sabido a¨²n encontrar las v¨ªas de comunicaci¨®n con la empresa privada; las empresas, en muchos casos, no consiguen discriminar con claridad los objetivos de la publicidad y los del mecenazgo, y, finalmente, el Estado no arbitra una serie de medidas que lo posibiliten y lo impulsen".
"Creo que tenemos el derecho y la obligaci¨®n moral de reivindicar que nuestra legislaci¨®n fiscal propicie las donaciones y el patrocinio, m¨¢s all¨¢ de las leyes de la publicidad, y, en definitiva, que adecuemos nuestro ordenamiento jur¨ªdico a lo que parece ser una aspiraci¨®n com¨²n de ciertos pol¨ªticos interesados en el tema, de los centros culturales y de las empresas que han mostrado inter¨¦s en el desarrollo cultural del pa¨ªs", afirm¨® Chirino.
Juan Miguel Hern¨¢ndez de Le¨®n, director general de Bellas Artes, se?al¨® tambi¨¦n la complejidad de las relaciones entre el patrocinio privado y las actividades culturales. "En la actualidad, la cultura comunica, es un espect¨¢culo y un objeto de consumo masivo", afirm¨®.
Pero hizo hincapi¨¦ en que hace falta una estrategia espec¨ªfica por parte de las empresas para abordar el patrocinio en el ¨¢rea cultural. "El ¨²nico matiz negativo que encuentro en el patrocinio de las empresas privadas es cierta dimensi¨®n de apropiaci¨®n de la actividad que patrocinan, que se vuelve contra los patrocinadores. Esto ha sucedido, por ejemplo, con algunos conciertos en los que la empresa patrocinadora se reserva una gran cantidad de entradas para sus clientes, lo que repercute negativamente entre los habituales a este tipo de actividad".
"En el per¨ªodo 1987-1988, el 90% de las exposiciones del Ministerio de Cultura ha contado con patrocinios de empresas privadas", continu¨®. "Pero lo m¨¢s com¨²n es que las empresas s¨®lo cubran los gastos del cat¨¢logo, que es quiz¨¢ lo menos ef¨ªmero de la exposici¨®n, aunque es s¨®lo el 10% de los gastos generales de la misma. ?sa es la estrategia f¨¢cil", dijo, "y no siempre la m¨¢s provechosa".
Hern¨¢ndez de Le¨®n habl¨® tambi¨¦n de la falta de patrocinio en las ¨¢reas de patrimonio hist¨®rico, documental y art¨ªstico. "Una excepci¨®n es la colaboraci¨®n de IBM para la informatizaci¨®n del Archivo de Indias", dijo. "Muchos ignoran que s¨ª existen algunas formas de desgravaci¨®n fiscal contempladas en la reglamentaci¨®n de la ley del Patrimonio de 1985. Hay exenciones tributarias para las donaciones al Estado y para quienes adquieran obras de arte registradas en el inventarlo del patrimonio art¨ªstico de un 20% sobre el impuesto a la renta".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.