Aires nuevos

El concierto de la ONE de la presente semana ha permitido respirar aires nuevos. Los ha tra¨ªdo un muchacho de Brighton con apariencia de punky por su aspecto y vestimenta. Nijel Kennedy se est¨¢ situando como uno de los m¨¢ximos valores de su generaci¨®n hasta el punto de haber obtenido en 1985 un disco de oro por su grabaci¨®n del Concierto para viol¨ªn de Elgar y sucesivamente el nombramiento de Disco del A?o por Gramophone y la Asociaci¨®n de la Industria Discogr¨¢fica Inglesa Su versi¨®n del Concierto de Brahms - super¨®- todas las dificultades para hacer m¨²sica con aires nuevos y una gran facilidad como demostr¨® al atacar el tercer tiempo con una velocidad y desenvoltura inusitadas. Adem¨¢s, en el adaggio hubo el necesario reposo y fraseo y en el tiempo inicial nos sorprendi¨® con una extensa cadencia ajena a las habituales de Joachim o Kreisler. Mucho y bueno cabe esperar de este joven, en su d¨ªa alumno de Menuhim, que tambi¨¦n cultiva la m¨²sica ligera e incluso ha colaborado con el ex beatle Paul McCartney en la canci¨®n Once upon a long ago. Despu¨¦s de Brahms, y ante el arrollador ¨¦xito obtenido, se qued¨® con p¨²blico y orquesta concediendo dos propinas -algo excesivo por otro lado- de eminente virtuosismo y aires jazz¨ªsticos. No en vano el d¨ªa anterior asisti¨® al concierto de su amigo Chick Corea. Todav¨ªa tocando la segunda de ellas, por ¨¦l firmada, abandon¨® el escenario para acercarse al Rastro a comprar una cazadora de cuero llena de chapas y colgantes.