Mitterrand y Thatcher acercan su posici¨®n sobre Mosc¨²

Las relaciones Este-Oeste y las discrepancias sobre la cumbre comunitaria que ma?ana comienza en Rodas dominaron la entrevista que mantuvieron ayer en Mont Saint-Michel, en la Breta?a francesa, el presidente de la Rep¨²blica Francesa, Fran?ois Mitterrand, y la primera ministra brit¨¢nica, Margaret Thatcher. Los dos dirigentes parecen haber acercado sus alejadas posiciones sobre la celebraci¨®n en Mosc¨², en 1991, de una conferencia de derechos humanos.

Margaret Thatcher se ha opuesto, junto a Estados Unidos, a que Mosc¨², albergue en 1991 una reuni¨®n sobre derechos humanos, en el marco de la Conferencia de Seguridad y Cooperaci¨®n en Europa (CSCE), que desde hace dos a?os se celebra en Viena.Durante la visita a Par¨ªs, a mediados de octubre, del ministro sovi¨¦tico de Asuntos Exteriores, Edvard Shevardnadze, Francia apoy¨® la conferencia de Mosc¨², que el Kremlin pone como condici¨®n para clausurar la CSCE y abrir las conversaciones sobre desarme convencional.

Sin embargo, la postura francesa es ahora m¨¢s matizada. En su reciente visita a la Uni¨®n Sovi¨¦tica, Mitterrand se mostr¨® favorable a la realizaci¨®n de la conferencia si los dem¨¢s pa¨ªses de la CE estaban de acuerdo.

Mitterrand dijo, tras la entrevista con Thatcher, que ambos hab¨ªan decidido "proseguir las consultas con los aliados" sobre este asunto. Tanto el presidente franc¨¦s como la primera ministra brit¨¢nica negaron que las negociaciones sobre armas convencionales estuvieran ligadas a la celebraci¨®n de la conferencia de derechos humanos en Mosc¨², exigencia que el Kremlin ha mantenido hasta ahora.

El entendimiento franco-brit¨¢nico, de todas formas, dista mucho de ser total. Thatcher reiter¨® ayer que "antes de ir a Mosc¨²" deben producirse en la Uni¨®n Sovi¨¦tica "enormes mejoras en los derechos humanos", mientras que estos avances fueron ya reconocidos por Mitterrand en una entrevista concedida en el Kremlin.

El El¨ªseo, empe?ado en la ostpolitik a la francesa -Mitterrand viajar¨¢ pr¨®ximamente a Checoslovaquia y Bulgaria-, no ve con buenos ojos el trato de favor otorgado por Mijail Gorbachov a la dama de hierro, a quien visitar¨¢ en Londres dentro de 10 d¨ªas, mientras el presidente franc¨¦s ha tenido que desplazarse personalmente a Mosc¨² para reunirse con el dirigente sovi¨¦tico.

El mercado ¨²nico

En los temas comunitarios, Francia y el Reino Unido mantienen divergencias. Thatcher es la jefe de Gobierno de los doce m¨¢s reticente a la puesta en marcha del mercado ¨²nico europeo en 1993, especialmente en sus aspectos sociales, mientras que Mitterrand sit¨²a el espacio social europeo entre las prioridades de las pr¨®ximas presidencias comunitarias, que ser¨¢n ocupadas, sucesivamente, en 1989 por Espa?a y Francia. Las divergencias alcanzan, asimismo, a la armonizaci¨®n fiscal comunitaria y, en el fondo, a la construcci¨®n de la Europa pol¨ªtica, cuesti¨®n, esta ¨²ltima, que ha sido puesta en tela de juicio por Margaret Thatcher en numerosas declaraciones durante los ¨²ltimos meses.

La entrevista entre Mitterrand y Thatcher se celebr¨® en el c¨¦lebre restaurante La Mere Poulard, famoso por sus tortillas flambeadas. El restaurante, que celebra este a?o su centenario, fue frecuentado a principios del presente siglo por el rey de Inglaterra Eduardo VII, como se encarg¨® de recordarle a su hu¨¦sped el presidente franc¨¦s. El encuentro de ayer, sin embargo, no puede considerarse una cumbre franco-brit¨¢nica, que estaba prevista para este oto?o, pero fue aplazada hasta febrero por razones de calendario.