Unos ni?os que practicaban el tiro fueron confundidos con un comando etarra
Un grupo de ni?os que realizaba pr¨¢cticas de tiro con una carabina de aire comprimido en la terraza de su vivienda fue confundido con un comando etarra, lo que origin¨® que la polic¨ªa organizase durante -10 d¨ªas una operaci¨®n especial de b¨²squeda. La alarma surgi¨® despu¨¦s de que un misterioso proyectil destrozase el cristal de una ventana del domicilio de Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz-Jarabo Ferr¨¢n, magistrado de la Sala Tercera del Tribunal Supremo.
El magistrado se encontraba a principios del presente mes en una habitaci¨®n de su domicilio de la calle del General Yag¨¹e, cuando advirti¨® que los cristales de una ventana hab¨ªan sufrido destrozos como consecuencia del impacto de un proyectil de origen desconocido, seg¨²n comentarios de c¨ªrculos judiciales.Ruiz-Jarabo, cuyo nombre ha aparecido varias veces en listas intervenidas a activistas de la organizaci¨®n terrorista ETA, puso inmediatamente el hecho en conocimiento del Ministerio del Interior. Un grupo de inspectores de la comisar¨ªa del distrito de Tetu¨¢n fue movilizado para aclarar el oscuro incidente.
Las primeras investigaciones apuntaron hacia la hip¨®tesis de que el disparo contra la vivienda del magistrado pudiera corresponder a un proyectil del calibre 22 o de un arma de peque?o calibre. Debido a que tal munici¨®n no es usada por ETA, todos los datos parec¨ªan indicar que el atentado era obra de un gamberro y no de un terrorista. No obstante, la polic¨ªa, decidi¨® investigar a todos los inquilinos de las viviendas pr¨®ximas a la de Ruiz-Jarabo.
Hace unos d¨ªas se produjo otro hecho similar en una finca cercana a la del magistrado: un proyectil atraves¨® limpiamente, el vidrio de una ventana del domicilio de otro ciudadano. El propietario de esta vivienda no tiene ninguna vinculaci¨®n con la pol¨ªtica ni la justicia, por lo que apareci¨® un nuevo indicio de que el misterioso francotirador no era un terrorista.
'Comando' misterioso
Tras sucesivas investigaciones, la comisar¨ªa de Tetu¨¢n -distrito en el que est¨¢ enclavada la vivienda del magistrado- ha logrado aclarar que el misterioso comando era en realidad un grupo de tres ni?os de unos 12 a?os, que viven en un piso pr¨®ximo al del magistrado.Los menores, seg¨²n los comentarios recogidos entre el vecindario, hab¨ªan instalado una diana en la terraza de su domicilio y, en ocasiones, hac¨ªan pr¨¢cticas de punter¨ªa con una carabina de aire comprimido. Parece que los chiquillos erraron algunos de los disparos, por lo que los balines perdidos fueron a estrellarse en la finca de Ruiz-Jarabo y otras colindantes.
Los j¨®venes francotiradores son muy apreciados entre sus vecinos, quienes aseguran que "los ni?os est¨¢n muy arrepentidos y asustados" al verse implicados en una investigaci¨®n que inicialmente estaba orientada a la localizaci¨®n y detenci¨®n de un grupo etarra.
Hijo de un ex ministro de Justicia durante el r¨¦gimen de Franco, el magistrado Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz Jarabo, de 53 a?os, obtuvo tal categor¨ªa hace seis a?os. Despu¨¦s de 30 a?os de haber ingresado en la carrera judicial, actualmente es uno de los nueve integrantes de la Sala Tercera (de lo Contencioso) del Tribunal Supremo, que est¨¢ presidida por Rafael de Mendiz¨¢bal Allende.
La polic¨ªa ha puesto los hechos en conocimiento de la autoridad judicial, pero la impresi¨®n m¨¢s generalizada es que el caso puede darse por totalmente concluido.
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