El guardia civil que mat¨® a un joven en Villaverde durante una discusi¨®n, procesado por asesinato

El juez Jos¨¦ Mar¨ªa V¨¢zquez Honrubia ha dictado auto de procesamiento por asesinato contra el guardia civil Alonso Salazar Rom¨¢n, que el pasado 2 de julio mat¨® de un disparo al joven Miguel ?ngel Rodr¨ªguez ?lvarez en un incidente ocurrido en el callej¨®n de G¨®mez Acebo. El mismo agente hiri¨® gravemente al joven Antonio Felipe Mart¨ªnez, que a¨²n no se ha recuperado de las lesiones. El juez, que ha ratificado la situaci¨®n de prisi¨®n provisional en que se hallaba el procesado, le ha exigido una fianza de 15 millones de pesetas para hacer frente a las responsabilidades pecuniarias.

El guardia civil Alonso Salazar, destinado en Madrid en tareas burocr¨¢ticas, lleg¨® a las diez de la noche del d¨ªa 2 de julio al callej¨®n de G¨®mez Acebo. Vest¨ªa ropas de paisano y conduc¨ªa su autom¨®vil, de la marca Renault 12. El agente se dispon¨ªa a guardar el coche en el garaje situado en la finca n¨²mero 6 del callej¨®n, junto a una bodega donde los fines de semana se suelen reunir numerosos j¨®venes, que ocupan parte de la calle.Seg¨²n el relato de hechos recogido en el auto de procesamiento, el guardia observ¨® que un Renault 5 obstaculizaba parcialmente la entrada al garaje, y se dirigi¨® hac¨ªa Miguel Angel Rodr¨ªguez, de 20 a?os, al que, "por estar apoyado en el veh¨ªculo, consider¨® que era de su propiedad".

Miguel ?ngel comunic¨® a Alonso Salazar que el turismo no era suyo, pero se ofreci¨® para ir a buscar a su due?o. Sin embargo, el guardia "comenz¨® a increparle con frases como que estaba harto de drogadictos y similares", por lo que el joven aludido y su amigo Antonio Felipe Mart¨ªnez respondieron a tales acusaciones.

Cadena antirrobo

El ahora procesado sali¨® de su coche con una cadena antirrobo y, "sin mediar m¨¢s palabras, asest¨® con ella un golpe a Miguel ?ngel en la cabeza, produci¨¦ndole un hematoma sanguinolento en la sien izquierda". Los dos j¨®venes implicados en el incidente y el guardia civil cayeron al suelo. Cuando este ¨²ltimo se incorpor¨® extrajo de entre sus ropas una pistola del calibre 6,35.

Miguel ?ngel ech¨® a correr al ver c¨®mo Alonso Salazar montaba el arma. Poco despu¨¦s, el agente se detuvo, apuntando y sujetando la pistola con ambas manos. El joven se encontraba de espaldas, seg¨²n el auto judicial, "a una distancia que se fija prudencialmente entre los cinco y los siete metros". El guardia efectu¨® un disparo que alcanz¨® a la v¨ªctima en la parte posterior del hemit¨®rax.

Antonio Felipe Mart¨ªnez ech¨® a correr tras el agente, el cual le sujet¨® fuertemente con el brazo izquierdo, "colocando la pistola junto a su cara y efectuando inmediatamente un segundo disparo a bocajarro". El proyectil le entr¨® al joven por la mand¨ªbula y se le qued¨® alojado entre la segunda y tercera v¨¦rtebras cervicales, caus¨¢ndole grav¨ªsimas lesiones, "de las que hasta la fecha no ha obtenido el informe definitivo de curaci¨®n".

Alonso Salazar traslad¨® en su coche a Antonio Felipe hasta un centro hospitalario y posteriormente se entreg¨® en la comisar¨ªa de polic¨ªa del distrito de Usera, donde dio su versi¨®n de los hechos.

Dos m¨¦dicos psiquiatras han examinado a Alonso Salazar y han determinado que ¨¦ste no padece alteraciones psicopatol¨®gicas, "si bien apuntan una reacci¨®n excesiva y violenta, condicionada por su preparaci¨®n, y el peso de su historia, con una personalidad de rasgos paranoides, pero sin padecer ninguna patolog¨ªa mental", seg¨²n el auto de procesamiento.

Recurso de reforma

El juez V¨¢zquez Honrubia ha encontrado suficientes indicios para determinar que los hechos revisten los caracteres de un delito de asesinato consumado, otro de homicidio frustrado y un tercero de tenencia il¨ªcita de armas, ya que el agente no ten¨ªa licencia para la pistola empleada en el incidente.

El abogado Fernando Salas V¨¢zquez, personado en el sumario, ha presentado recurso de reforma contra el auto de procesamiento ¨²nicamente en relaci¨®n con el delito de homicidio frustrado. El letrado entiende que "hay dos delitos de asesinato: uno consumado y otro frustrado". Pero se muestra conforme con el resto de las apreciaciones del juez.

El magistrado V¨¢zquez Honrubia ha requerido al procesado para que preste una fianza de 15 millones de pesetas para asegurar las responsabilidades pecuniarias. De no cumplir tal disposici¨®n, se proceder¨¢ al embargo de los bienes de Alonso Salazar en cantidad suficiente para reunir dicha suma, siempre que no acredite su insolvencia total o parcial.

La muerte del joven Miguel ?ngel Rodr¨ªguez, soltero, que trabajaba en la empresa Iberduero, produjo una gran conmoci¨®n entre los vecinos del barrio de Villaverde, donde meses atr¨¢s se produjeron diversas movilizaciones para exigir justicia contra el presunto homicida.