Dos dimensiones para 'Amityville 3'

A principios de esta d¨¦cada nos lleg¨® una pel¨ªcula de terror al uso que beb¨ªa en las fuentes y en los buenos dividendos de recientes ¨¦xitos como El exorcista o La profec¨ªa. Sin asomo de originalidad alguna en su planteamiento, Terror en Amitpille nos presentaba una casa con pasados varios -adoraci¨®n a Sat¨¢n un siglo atr¨¢s, salvajes asesinatos un par de a?os antes- y la tenaz lucha contra las fuerzas del mal que deb¨ªa sostener un joven matrimonio en aquel espacio pose¨ªdo.Como quiera que la cosa funcion¨®, hubo -como las habr¨ªa de El exorcista y La profec¨ªa- secuelas. La primera, dirigida por el italiano Damiano Damiani -es decir, muy mal dirigida-, no lleg¨® a estrenarse en nuestras pantallas; s¨ª, en cambio, lo hizo la tercera Amityville, bautizada para la ocasi¨®n El pozo del infierno y realizada por un veterano y muy respetable cineasta norteamericano, Richard Fleischer, que, por supuesto, no mantiene el inter¨¦s en sus t¨ªtulos recientes de sus mejores obras de los a?os cincuenta y sesenta.

No hay sustancia tem¨¢tica novedosa en El pozo del infierno con respecto a sus precedentes; siguen los sustos, las tormentas desatadas y los apabullantes colores del infierno amenazando al respetable. Y la ¨²nica variaci¨®n est¨¦tica de esta tercera entrega, las tres dimensiones en que se rod¨® y proyect¨®, desaparecer¨¢n esta noche en su pase televisivo, pese a que Fleischer -que ya en los cincuenta usara el procedimiento en Arena, una epopeya de rodeos en Tucson- lo utiliza con sensibilidad, esto es, creando m¨¢s efecto que efectismo, considerando que el centro de gravedad de la pel¨ªcula es la dimensi¨®n no ya la tercera, sino la cuarta.

El pozo del infierno se emite a las 0.45 por TVE-1.