"Un hombre modesto y sencillo"

"Un gran hombre", "una personalidad profunda con gran capacidad de negociaci¨®n y cultura", "un hombre modesto y sencillo". ?sta es la nueva imagen que el Rey supo transmitir a los representantes del Frente Polisario durante sus contactos en Marraquech. "Me caus¨® una gran impresi¨®n; yo esperaba al hombre que ha cultivado la imagen de sult¨¢n medieval, deseoso de hacer gala de pompa y aires grandilocuentes con los hombres de las jaimas del desierto", explica Bechir Mustaf¨¢ Sayed al referirse al monarca alauita respetuosamente como "Su Majestad". "En cambio", a?ade, "nos impresion¨® al desbaratar nuestras expectativas y mostrarse, ante todo, como un monarca moderno, profundo conocedor de las realidades de este mundo y vinculado a la b¨²squeda de la paz"."Otra cosa que nos demostr¨® es su alto sentimiento humano, al manifestarnos el dolor que le causa la tragedia de inuertes y orfandad que la guerra produce a diario", a?ade Sayed. Seg¨²n el dirigente saharaui, el Rey renunci¨® a ceremoniales protocolarios al recibir "de forma muy cordial y simp¨¢tica", junto a su s¨¦quito, a los dirigentes saharauis. Durante su estancia en Marraquech, los independentistas tambi¨¦n tuvieron un encuentro fugaz con el pr¨ªncipe heredero, Sidi Mohamed. "De ¨¦l nos sorprendi¨® especialmente su juventud; creo que va a ser de gran ayuda para ¨¦l, de cara al futuro, el ejemplo de su padre con su capacidad para crear una atm¨®sfera de cordialidad incluso con sus principales adversarios sin dar nada a cambio".

El monarca casi logr¨® borrar ante los independentistas la otra faceta que preocupa a sus contrincantes, la de "rnaniobrero" y amante del juego a dos bandas, al no respetar el pacto de caballeros que sell¨® su despedida con S ayed de "tener cuidado con la Prensa". "Sin embargo, no creo que sea una mala persona, sino que le cuesta despegarse de lo que es ya una man¨ªa en ¨¦l. Por eso espero que ese gran hombre, al que he tenido el honor de conocer, no nos decepcione".

En estas charlas, en las que el rey vest¨ªa con atuendo europeo, Hassan coincidi¨® en que la paz negociada es la ¨²nica salida posible "ante la imposibilidad por ambas partes de dar jaque mate militarmente". El monarca tambi¨¦n sorprendi¨® a los saharauis al admitir que, si bien hab¨ªa logrado anexionar y mantener bajo su control las principales ciudades saharauis, no consigui¨® "conquistar el esp¨ªritu y el alma" de este pueblo, o al se?alar lo lamentable que es para ¨¦l que la guerra se nutra a costa de energ¨ªas que podr¨ªan liberarse para invertir en viviendas o escuelas.

"Estuvimos alojados en un palacio muy bello, digno de Las mil y una noche", relata Sayed. "Siempre me imagin¨¦ estas moradas como edificios fr¨ªos, aislados del mundo por puertas grises como si de murallas se tratara. El mundo que tuve ocasi¨®n de conocer en su interior es muy distinto. Sobre todo me gust¨® comprobar lo distinto que son los Reyes en sus palacios de la imagen que tenemos de ellos desde lejos".