La guerrilla afgana, incapaz de formar Gobierno

Las esperanzas de presentar una alternativa pol¨ªtica s¨®lida al Gobierno prosovi¨¦tico de Kabul volvieron a truncarse ayer. Despu¨¦s de meses de preparaci¨®n del primer shura o consejo consultivo, del que debieran haber salido los nombramientos del jefe del Estado y del Gobierno de transici¨®n de Afganist¨¢n, el fracaso se materializ¨® en menos de una hora. El shura ha sido pospuesto indefinidamente.

A cuatro d¨ªas del fin de la retirada sovi¨¦tica, los muyahidin han perdido una oportunidad de oro de brindarle al resto de los afganos un nuevo modelo de Gobierno tras los 10 a?os de r¨¦gimen comunista. Los gritos de "Al¨¢ akbar" ("Dios es grande") con que se inici¨® la reuni¨®n no sirvieron para unir a una Alianza que se desintegra conforme ve acercarse la hora de entrar en Kabul.Fuentes muyahidin dijeron a este peri¨®dico que el enfrentamiento entre moderados y radicales por la representaci¨®n de los afganos refugiados en Ir¨¢n y el nombramiento del primer ministro fueron "los detonantes de la cancelaci¨®n" del encuentro.

Madinatul Hujaj, el enorme centro religioso de Islamabad en el que se re¨²nen los musulmanes antes de viajar a La Meca, estaba lleno de amplios turbantes y barbas de nieve venidas de las monta?as afganas, en donde se baten por la liberaci¨®n del pa¨ªs los 210 comandantes (30 por cada partido de la Alianza) que hab¨ªan sido invitados a participar en el shura. Los siete l¨ªderes de la Alianza sun¨ª presid¨ªan el encuentro. Las sonrisas dedicadas a los cientos de periodistas llegados de todo el mundo ocultaban la proximidad del fracaso.

Sebgatula Mojadedi, actual presidente de la Alianza y l¨ªder de uno de los tres partidos moderados que, con los cuatro extremistas, conforman ¨¦sta, lleg¨® la semana pasada a un acuerdo con los ocho partidos afganos shi¨ªes para que ¨¦stos tuvieran 100 esca?os en el shura.

El acuerdo fue denunciado p¨²blicamente por dos de los l¨ªderes radicales de la Alianza, y el jueves por la noche, en la reuni¨®n del consejo supremo de ¨¦sta, Mojadedi fue destituido de la presidencia del shura.

La importancia de la celebraci¨®n de esta asamblea de sabios y el hecho de que Mojadedi contaba con cuatro meses por delante como presidente de la Alianza presagiaban que ser¨ªa nombrado jefe del Estado. El per¨ªodo de mando es de tres meses por partido, pero Mohamed Nabi Mohamadi, l¨ªder del Harkati Inqalabi Islami, hab¨ªa cedido su presidencia a Mojadedi.

El inesperado cese ha cambiado las cartas de la baraja. Ahmed Shah, protegido y candidato de los extremistas a primer ministro, perdi¨® en la jugada su condici¨®n de hombre de compromiso y jefe de un Gobierno de consenso.

Los shi¨ªes, con los moderados

Cada uno de los siete partidos sun¨ªes contaba con 60 esca?os, de un total de 526. Los shi¨ªes quer¨ªan 120 para ellos, la Alianza les ofreci¨® 60 y Mojadedi firm¨® un acuerdo concedi¨¦ndoles 90. Fuentes diplom¨¢ticas indican que los afganos shi¨ªes son "potenciales votantes" de las resoluciones de los moderados. De ah¨ª la oposici¨®n extremista al acuerdo, ya que, al tener 90 esca?os, inclinar¨ªan en 30 la balanza a favor de los moderados.Tras el cese de Mojadedi en la presidencia del shura, los shi¨ªes que ayer deb¨ªan haber venido de Teher¨¢n no lo hicieron, y los cerca de 20, incluido el m¨¢ximo l¨ªder de ¨¦stos, Karim Jalili, que ya estaban en Islamabad emprendieron el vuelo de regreso.

Fuentes de la Alianza se?alan que Mojadedi pronunci¨® un discurso en el que hizo hincapi¨¦ en que un shura sin la participaci¨®n de los shi¨ªes "no era representativo". M¨¢s de un 10% de los afganos es shi¨ª; el resto, sun¨ª.

El jueves hubo una manifestaci¨®n de muyahidin en Peshawar (noroeste de Pakist¨¢n) que acab¨® en enfrentamiento entre grupos opuestos de comandantes y guerrilleros venidos del interior de Afganist¨¢n. Moderados y extremistas terminaron a palos la manifestaci¨®n, convocada por los primeros, a favor del ex rey Zahir Shah y de un shura m¨¢s representativo.

Un equipo de la cadena de televisi¨®n norteamericana CBS, atacado por los grupos que iniciaron la violencia, asegura que eran extremistas de Gulbudin Heckmatir, quien realiza una aut¨¦ntica cruzada contra Zahir Shah. El ex monarca, de 72 a?os, exiliado en Roma, se ha ofrecido a volver al pa¨ªs "para lo que el pueblo le encomiende". Los j¨®venes extremistas de Heckmatir, empe?ados en realizar la revoluci¨®n isl¨¢mica, se oponen tajantemente a Zahir Shah.

El consejo supremo de la Alianza se re¨²ne hoy para buscar una soluci¨®n y convocar en un "futuro pr¨®ximo" un nuevo shura en el que todos tengan cabida.