Caputo: "Argentina tiene la democracia del pobre"
El ministro de Exteriores de Alfons¨ªn afirma que ultraderecha y ultraizquierda hacen tenaza sobre el pa¨ªs
La democracia argentina, columpiada en el insistente sobresalto de asonadas diversas, ha enviado a su ministro de Exteriores, Dante Caputo, para que explique a las naciones amigas de Europa los recientes sucesos de La Tablada. En esa acci¨®n terrorista, un grupo de ultraizquierda fue exterminado por el Ej¨¦rcito, tras encerrarse en el cuartel de ese nombre cerca de Buenos Aires. El prop¨®sito de la escala espa?ola, que concluy¨® el s¨¢bado, inclu¨ªa adem¨¢s la ag¨ªlizaci¨®n de los acuerdos de ayuda econ¨®mica firmados en febrero de 1988 por Felipe Gonz¨¢lez y Ra¨²l Alfons¨ªn en Madrid, que no han sido todav¨ªa ratificados por los Parlamentos respectivos. Caputo, terso y denso en el discurso, ha explicado, ha requerido y, sobre todo, ha agradecido la existencia de una cierta Europa razonablemente solidaria.
"Una tenaza se cierra sobre Argentina, una tenaza de la ultraizquierda y la ultraderecha" Esa tenaza, afirma el canciller Caputo, tiene "vinculaciones exteriores, pero no extranjeras", no es un asunto de Estados enemigos, sino de "una internacional terrorista" de distintos signos que act¨²a como un doble reflejo de s¨ª misma: "la ultraderecha y la ultraizquierda se necesitan mutuamente en su tarea desestabilizadora". Pero pese a ello, el asalto al cuartel de La Tablada, reprimido por el Ej¨¦rcito con la p¨¦rdida de 36 vidas, casi todas de los guerrilleros, no significa el regreso de la guerra subversiva, seg¨²n Caputo, porque "la situaci¨®n actual no es la de los setenta. Entonces hab¨ªa un terreno abonado en la coyuntura nacional e internacional para esas acciones. Ahora la sociedad argentina no da pie a ello". De igual forma, "en los setenta, las superpotencias buscaban constantemente el terreno para hacer retroceder al rival, mientras que ahora sucede lo contrario con la distensi¨®n entre el Este y el Oeste".Esa consolidaci¨®n de la democracia argentina, de la que Caputo habla con confianza, pero tambi¨¦n prudencia, avanz¨® con la ley de la obediencia debida, por la que los militares de rangos medios e inferiores escapan a las consecuencias de sus actos criminales durante la llamada guerra sucia. "Esa ley que usted dice fue un paso m¨¢s en un proceso de institucionalizaci¨®n, pero no hay que olvidar que nunca pueden existir soluciones m¨¢gicas".
Caputo considera crucial la obra de Alfons¨ªn porque "deja un Partido Radical cohesionado", s¨ªntesis de tendencias un tanto dispares, opina el entrelvistador, desde la socialdemocrac¨ªa a la europea al fondo olig¨¢rquico mejor destilado. Sin embargo, esa liga de tendencias se congrega "en la defensa de la democracia y en la construcci¨®n de la sociedad civil", en tanto que por comparaci¨®n "en otros partidos argentinos aparecen disparidades mucho mayores que van del fascismo a la ultraizquierda".
"Argentina en ocasiones ha estado lejos del mundo, pero el mundo ha estado siempre cerca de Argentina". Eso lo demuestra, dice el canciller, el sobresalto de solidaridad latinoamericano que se produjo con la guerra de las Malvinas en 1982. Una solidaridad que "ahora hay que transformar en hechos, en la creaci¨®n de un espacio social com¨²n", como se est¨¢ haciendo "con Uruguay y Brasil", en el "apoyo a los acuerdos de San Salvador" para dar "una soluci¨®n centroamericana a Centroam¨¦rica". Con todo, el problema de Nicaragua "s¨®lo se resolver¨¢ cuando acabe la guerra salvadore?a".
El gran problema latinoamericano es, para Dante Caputo, el de que "la nuestra es la democracia del pobre. Mire usted, en los pr¨®ximos meses se producen 11 relevos presidenciales o legislativos en Am¨¦rica Latina totalmente democr¨¢ticos, y al mismo tiempo, nuestro continente nunca hab¨ªa sido tan pobre. Los ¨ªndices de bienestar se hallan en los niveles de 1970. Ah¨ª tenemos dos d¨¦cadas perdidas. Y no es lo mismo construir la democracia en el desarrollo que la democracia y el desarrollo al mismo tiempo". Sin embargo, la deuda, que supera ya los 400.000 millones de d¨®lares para toda la Am¨¦rica Latina, con Argentina muy arriba en el hit parade de la pauperizaci¨®n, no lo es todo. "La soluci¨®n del problema de la deuda y de la inestabilidad de los precios internacionales para nuestras exportaciones es necesaria, pero no suficiente. Si no hay una sociedad dispuesta a la reconstrucci¨®n del pa¨ªs, eso no sirve para nada. El legado de Alfons¨ªn va a ser el de una sociedad civil reconstituida que habr¨¢ de acometer la fase del crecuniento y desarrollo".
"Lentitudes burocr¨¢ticas"
Hasta ahora, "las lentitudes burocr¨¢ticas, sobre todo de un pa¨ªs en desarrollo como el nuestro, han demorado la ratificaci¨®n parlamentaria de los acuerdos con Espa?a". Los mismos prev¨¦n la concesi¨®n de ayuda, en cr¨¦ditos blandos y reconversi¨®n de la deuda en inversi¨®n productiva, por valor de 3.000 millones de d¨®lares hasta 1992. Caputo ha pedido que se agilice la aprobaci¨®n, pero, esquivando el detalle, asegura que la cooperaci¨®n ya ha comenzado, y que la respuesta espa?ola, "ahora como hace seis a?os, cuando conocimos a Felipe Gonz¨¢lez, es emocionante. Hay que entender el prestigio que hoy tiene Espa?a en mi pa¨ªs. Yo soy hijo de emigrantes italianos que llegaron a Argentina hacia 1920, y me he criado pensando muy especialmente en dos pa¨ªses, Italia y Espa?a, que eran naciones casi pobres a las que ten¨ªamos que ayudar. Y a la vuelta de unos a?os nos hemos dado cuenta de que Italia es la cuarta o quinta potencia econ¨®mica mundial, y que Espa?a, en muy poco tiempo, se ha convertido en un pa¨ªs desarrollado".Dante Caputo comprende que en muchos momentos "las prioridades espa?olas no pod¨ªan estar en Suram¨¦rica", pese a lo que "se ha hecho todo lo que se ha podido, y ser¨ªa imposible esperar m¨¢s".
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