Decretado secreto el sumario de la querella contra el alcalde de San Fernando

Pedro Cano-Ma¨ªllo, magistrado titular del Juzgado n¨²mero 2 de Alcal¨¢ de Henares, decidi¨® ayer declarar secretas las diligencias que su juzgado y los miembros de la Brigada de Polic¨ªa Judicial de la localidad llevan a cabo en relaci¨®n con una querella criminal interpuesta en 1987 por ?ngel Gull¨®n, propietario de un terreno de 1.000 metros cuadrados, que el Ayuntamiento de San Fernando de Henares embargo y posteriormente adjudic¨® mediante subasta a una empresa constructora. El Ayuntamiento, dicen los querellantes, no devolvi¨® despu¨¦s el importe de la subasta al propietario original de la finca. ?ngel Gull¨®n, ya fallecido, present¨® una querella ante el Juzgado n¨²mero 2 de Alcal¨¢ en la que afirmaba que el Ayuntamiento de San Fernando de Henares, con su alcalde, el comunista Enrique Guerra, al frente, embarg¨® un solar de su propiedad ubicado junto a las instalaciones del centro comercial Pryca, y contiguo a la carretera nacional II por el impago de las plusval¨ªas de un ejercicio econ¨®mico siete a?os anterior a la decisi¨®n municipal de embargar la finca.

Seg¨²n la querella de Gull¨®n, el Ayuntamiento le dio un plazo de 24 horas para satisfacer los siete millones adeudados antes de proceder al embargo de los terrenos, y no acept¨® el aval presentado por Gull¨®n como garant¨ªa de su intenci¨®n de saldar la deuda. El propio Ayuntamiento se adjudic¨® el solar en la subasta convocada, por un valor igual a la deuda de Guil¨®n. Posteriormente, fue el Ayuntamiento el que sac¨® el solar a subasta, que se adjudic¨® la empresa constructora propiedad de Arturo Cabrero Hern¨¢n , por 39 millones de pesetas. [La empresa s¨®lo pag¨® ocho millones, dado que el Ayuntamiento de San Fernando le deb¨ªa 60 millones, de los cuales, adem¨¢s, s¨®lo estaban reconocidos 31 millones, y el constructor hizo uso del derecho de compensaci¨®n, circunstancia calificada de "irregular" por el magistrado Cano-Ma¨ªllo.]

Pocos d¨ªas despu¨¦s el constructor Arturo Cabrero volvi¨® a vender la finca a otra empresa constructora, en la que figura su hija como accionista, por s¨®lo nueve millones.

Seg¨²n Cano-Ma¨ªllo, el Ayuntamiento de San Fernando no devolvi¨® a ?ngel Gull¨®n, propietario original de la finca, los 32 millones de pesetas resultantes de la diferencia entre el dinero recaudado por el municipio y los siete millones a que ascend¨ªan las plusval¨ªas adeudas por Gull¨®n, cantidad que no aparece en los libros de cuentas del Ayuntamiento, como ingreso por subasta p¨²blica.

El magistrado asegura tambi¨¦n que Gull¨®n denunci¨® el embargo y posterior venta de su solar ante el tribunal Econ¨®mico Administrativo, que fall¨® dando la raz¨®n al demandante y anul¨® las acciones emprendidas por el Ayuntamiento con el terreno. El municipio, seg¨²n Cano-Ma¨ªllo, no anul¨® el embargo y la venta, y decidi¨® recurrir la sentencia ante el Tribunal de lo Contencioso-administrativo, que todav¨ªa no ha dictado resoluci¨®n.