Una nevada de m¨¢s de seis horas dej¨® aisIados por carretera varios pueblos y urbanizaciones de la regi¨®n
Traici¨®n. Lo ¨²ltimo que pod¨ªan esperar los madrile?os, despu¨¦s de rozar los 22 grados en pleno mes de febrero, era una nevada de m¨¢s de seis horas que aisl¨® varios pueblos por carretera, bloque¨® seis puertos de monta?a, hizo imprescindible el uso de cadenas a lo largo de 50 kil¨®metros en la carretera de Burgos y regal¨® unas vacaciones fuera de calendario a muchos vecinos que no pudieron sacar el coche en varias urbanizaciones de la sierra. Unas 4.000 toneladas de sal aguardan en los almacenes del Ayuntamiento de Madrid por si arrecia el temporal. Lo que s¨ª habr¨¢ hoy son vientos racheados. Al caos meteorol¨®gico de estos d¨ªas s¨®lo le falta el granizo.
Marta Men¨¦ndez mir¨® ayer el manto blanco que cubr¨ªa la pronunciada rampa de su garaje y se lo pens¨® dos veces. "Si intento subir por aqu¨ª en coche me puede pasar cualquier cosa", debi¨® pensar para sus adentros.El caso es que Marta, presidenta de la Asociaci¨®n de Vecinos de Tres Cantos, decidi¨® renunciar a la aventura. Ten¨ªa una buena excusa para no venir a la gran ciudad: contemplar la gran nevada con una sensaci¨®n de feliz impotencia.
Nada que ver con la frustraci¨®n con que recibieron la nieve los ancianos de Tres Cantos. Ayer, a las 17.30, estaba previsto poner la primera piedra al centro de la tercera edad.
Todo estaba listo para la singular ceremonia, pero los copos aguaron la fiesta.
A unos 70 kil¨®metros de Tres Cantos se encuentra La Puebla de la Sierra, la localidad m¨¢s aislada de Madrid en plena sierra norte. Y en La Puebla de la Sierra vive medio centenar de vecinos como Filomena Fern¨¢ndez, de 42 a?os.
"Esto es lo que llamamos un invierno tard¨ªo, pero seguro". Sorprendentemente, la voz de Filomena sonaba ayer tan limpia como la nieve a trav¨¦s del tel¨¦fono. "La l¨ªnea telef¨®nica est¨¢ muy bien porque la arreglaron hace un par de a?os, lo que no acaban de arreglar es la carretera con Robledillo de la Jara, la ¨²nica que nos queda abierta cuando le da por nevar".
"A base de matanza"
Filomena recuerda pocas nevadas como la de ayer, aunque hubo una que qued¨® bien marcada en su memoria. "Fue hace 17 a?os, justo cuando naci¨® mi hija Mar¨ªa ?ngeles. La nieve lleg¨® a los tres metros en algunos sitios y estuvimos tres meses aislados del mundo. Alimento no falt¨®, pues com¨ªamos a base de matanza".
Hasta hace unos d¨ªas los lugare?os de la sierra norte no hablaban de otra cosa que del invierno seco que se estaba comiendo los pastos. Despu¨¦s de la nevada, el tema de conversaci¨®n era bien distinto. Pocos se atrevieron ayer a hacer uso de las fr¨¢giles carreteras de la zona, que se desmenuzan puntualmente cada a?o coincidiendo con las primeras heladas.
Varios pueblos cercanos a La Puebla, en la zona lim¨ªtrofe con la provincia de Guadalajara, quedaron pr¨¢cticamente incomunicados por carretera durante todo el d¨ªa. Por los puertos de monta?a de La Puebla, El Cardoso y La Hiruela fue imposible circular incluso con cadenas a lo largo de la ma?ana.
Al otro lado de la carretera de Burgos, los puertos de monta?a de La Morcuera, Canencia y Navafr¨ªa corrierron igual suerte. Fue preciso el uso de cadenas para atravesar Navacerrada, Somosierra, la Cruz Verde y el alto de Los Leones.
Las carreteras comarcales que unen los municipios de Colmenar Viejo, Soto del Real, Guadalix y San Agust¨ªn de Guadalix quedaron tambi¨¦n interrumpidas en varios puntos.
Pero la carretera de Burgos fue sin duda la m¨¢s afectada por el temporal. La Direcci¨®n General de Tr¨¢fico recomend¨® durante la ma?ana el uso de cadenas a lo largo de los 50 kil¨®metros que separan la poblaci¨®n de San Agust¨ªn de Guadalix y el puerto de Somosierra, en la l¨ªnea divisoria con Segovia.
Los sufridos conductores que se lanzaron a la aventura por la carretera de la Coru?a se encontraron tambi¨¦n con un panorama sombr¨ªo: retenciones de hasta 14 kil¨®metros en la entrada a Madrid.
Un accidente de tr¨¢fico a la altura la urbanizaci¨®n Parquelagos, en el kil¨®metro 34, oblig¨® a desviar provisionalmente la circulaci¨®n y provoc¨® retrasos de hasta dos horas para llegar a Madrid desde las poblaciones de la sierra. Algunas urbanizaciones quedaron pr¨¢cticamente aisladas por carretera hasta bien entrado el d¨ªa.
La nieve sembr¨® tambi¨¦n el asfalto de las carreteras de Barcelona y de Extremadura, que sufrieron por segundo d¨ªa consecutivo atascos hist¨®ricos.
Vor¨¢gine de autom¨®viles
La carretera de Andaluc¨ªa tampoco se libr¨® de los incidentes. A primera hora de la ma?ana volc¨® un cami¨®n en el kil¨®metro 43 y fue preciso desviar provisionalmente el tr¨¢fico.
La vor¨¢gine de autom¨®viles devor¨® la nieve ca¨ªda sobre la ciudad. Los conductores aprendieron la lecci¨®n el pasado jueves y eligieron ayer v¨ªas alternativas al paseo de Recoletos, que est¨¢ en obras a la altura de Cibeles. ?Resultado? Los atascos fueron mayores que lo habitual en la M-30, la avenida del Mediterr¨¢neo y las rondas.
El Ayuntamiento de Madrid, por si acaso, ten¨ªa preparado un ej¨¦rcito antinieve: 4.000 tonelada; de sal, 48 m¨¢quinas, 78 camiones, 14 cargadores de nieve, 91 baldeadoras... Falsa alarma. A eso del mediod¨ªa de ayer, el asfalto era tan negro como cualquier otro d¨ªa.
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