El Madrid pudo hacerle mas goles al Zaragoza
Con la excepci¨®n de alg¨²n agobio en la segunda parte el Madrid tuvo ayer f¨¢cil su victoria en la Romareda gracias a un gol de Hugo S¨¢nchez en el ni. 15, con fallo del portero Chilabert, y otro, excelente, del mismo autor en el 2-5. Dos goles en contra en menos de media hora era lastre excesivo para un Zaragoza que adem¨¢s sali¨® con muchos defensas A¨²n pudo machacar el Madrid en la mitad inicial. En el m. 23, Michel, bien colocado dispar¨¦ al cuerpo de Chilabert, en el m. 39, Hugo S¨¢nchez chut¨® fuera tras un despiste del portero local que le dej¨® via libre para su disparo. A¨²n hubo un penalti que esta vez detuvo el irregular portero del Zaragoza y se anul¨® otro gol, al mexicano, aut¨¦ntico protagonista del juego de ataque. Por el simple repaso de jugadas se ve que Hugo S¨¢nchez pudo marcar hasta cinco en 45 minutos. Y el mexicano, como su equipo, no pareci¨® esforzarse.
Simplemente el Madrid impon¨ªa antes del descanso su calidad sin ning¨²n problema pero con alguna sorpresa. Dej¨® en la caseta a Gordillo, se supone que para descansar ante el pr¨®ximo encuentro del mi¨¦rcoles contra el PSV, coloca Tendillo m¨¢s adelantado que a Gallego y Michel cedi¨® su habitual pasillo por su banda derecha a un Schuster fenomenal. En teor¨ªa deb¨ªa presionarle Se?or, que trabajaba por aquella zona, pero el zaragocista parec¨ªa m¨¢s preocupado de intentar hacer su juego ofensivo. As¨ª el alem¨¢n pudo recrearse en f¨²tbol de lanzamiento y result¨® el due?o del centro de! campo.
De la eficacia de un Schuster libre de marcaje se beneficiaba sobre todo Hugo S¨¢nchez. La jugada entre los dos que dio lugar al segundo gol fue tan r¨¢pida, precisa y brillante, que hasta la aplaudi¨® el p¨²blico local.
Y es que el aficionado parec¨ªa aturdido desde el principio. Mientras los adictos del fondo norte lanzaban bengalas a Buyo y le increpaban con los insultos que parecen hacer escasa mella al meta gallego, en otro lugar del camino hab¨ªa una pancarta con un mensaje ins¨®lito: "Buyo, Arag¨®n te quiere". El mismo despiste pudo llevarse el aficionado al ver que la fiesta ofensiva y espect¨¢culo que hab¨ªa anunciado el entrenador, Antic, se aguaba y, en todo caso, s¨®lo era posible en la segunda parte. Antes de que el Zaragoza hubiera podido crear alg¨²n peligro serio, ya ten¨ªa dos goles en contra. como un certificado claro de la realidad.
Entre el Zaragoza inical de ayer y el Madrid hab¨ªa mucha diferencia. Se?or y Vizca¨ªno trabajaban con sentido ofensivo, pero sin ¨¦xito por la derecha, y Cresp¨ªn e Iskrenov buscaban la penetraci¨®n por la izquierda. El equipo not¨® mucho la ausencia de cuatro de sus jugadores m¨¢s cotizados, el sancionado Juanito y los lesionados Sirakuv, Higuera y Pardeza por cuyos traspasos se deben m¨¢s de 250 millones de pesetas. Demasiado dinero sin utilizar ahora como para que no lo note un club modesto.
Pese a o agitado de la primera parte, con goles, penaltis y un tanto anulado, la segun.da tambi¨¦r, mantuvo muy alto el tono de espect¨¢culo. Un Zaragoza muy diferente, bien movido por pases largos de Se?or y carreras de alta velocidad de Villarroya, redujo distancias y dispuso de oportunidades incluso para empatar. Sin duda fue la reaci¨®n del coraje pues; el Zargoza se movi¨® a impulsos de voluntad m¨¢s que con f¨²tbol de calidad. Dispuso de un penalti que pudo haberle dado el empate, pero Buyo detuvo el lanzamiento de Se?or y tras ello se acabaron los impulsos zaragocistas.
En los ¨²ltimos minutos el Madrid volvi¨® a demostrar el alto grado de eficacia de sus grandes jugadores y, una vez pasados los apuros, volvi¨® a mandar y a golear. Lo injusto fue que lograra los goles en la segunda parte y no ea la primera.
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