Los esteroides, a debate

Hasta ahora, el testimonio m¨¢s dram¨¢tico del proceso de Toronto ha sido el de un hombre: el entrenador de Ben Johnson, Charlie Francis. Ha admitido que suministr¨® esteroides a Johnson y a otros atletas canadienses (con su propio conocimiento), pero afirma que no haberlo hecho habr¨ªa significado un "desarme unilateral", ya que pr¨¢cticamente todos los otros velocistas de elite en el mundo utilizan drogas para desarrollar la musculatura.Francis declar¨® que los entrenadores brit¨¢nicos le contaron que ellos eligen a los atletas que han de pasar el control antidoping extrayendo sus nombres de un sombrero, pero dejan fuera los nombres de aquellos de los que se sospecha que emplean esteroides. Afirm¨® que las autoridades deportivas de otros pa¨ªses le hablaron de sistemas de control que parec¨ªan concebidos fundamentalmente para evitar detectar a los que se drogan. Los holandeses, seg¨²n Francis, se limitan a veces a enviar una botella a la habitaci¨®n del hotel de un atleta pidi¨¦ndole que remita una muestra de orina.

Est¨¢n saliendo nombres a la luz en estas sesiones y se reciben en¨¦rgicos ment¨ªs de deportistas de Europa y Canad¨¢. Pero es una buena cosa que se hable abiertamente de este desagradable asunto, oficialmente y bajo juramento. Es la ¨²nica manera de hacer que m¨¦dicos, atletas, entrenadores y otras personas relacionadas con estos deportes, que antes eran amateurs, traten el problema.

21 de marzo