La Generalitat s¨®lo admite el uso del catal¨¢n en la nueva norma sobre subvenci¨®n al cine
El Gobierno aut¨®nomo estima necesaria una ley propia
El Departamento de Cultura de la Generalitat ha fijado una nueva orden para la subvenci¨®n de pel¨ªculas que se produzcan durante el a?o 1989 en la que se establece la obligatoriedad de que los filmes se exhiban exclusivamente en catal¨¢n. Dicha norma anula la posibilidad de "excepciones" contemplada en la anterior normativa. Por otra parte, la Generalitat estima "necesaria y conveniente" la redacci¨®n de una ley de ayuda a la industria cinematogr¨¢fica para Catalu?a y conf¨ªa en poder tramitarla al Parlamento en breve, una vez conseguidos unos acuerdos m¨ªnimos con el Ministerio de Cultura en lo que respecta al traspaso de una parte del Fondo de Protecci¨®n Cinematogr¨¢fica (FPC).
La Generalitat, que condiciona la redacci¨®n de la ley a la transferencia del FPC, ha dictado, mientras, la citada nueva orden (10 de marzo de 1989) de concurso p¨²blico para la concesi¨®n de subvenciones a largometrajes que se lleven a t¨¦rmino a partir del 1 de enero de 1989. A diferencia de la orden similar anterior (de 8 de febrero de 1988), la actual normativa no admite la subvenci¨®n a "aquellos casos excepcionales en los que una pel¨ªcula, aun presentando signos indiscutibles de identidad, cultural catalana, pero que por razones justificadas e inevitables inmanentes a la propia esencia del filme, utilice mayoritaria o parcialmente un idioma distinto del catal¨¢n". La limitaci¨®n idiom¨¢tica responde, seg¨²n Bru de Sala, "a la conciencia plena de que estamos en inferioridad de condiciones por lo que a finanzas se refiere, y que s¨®lo nos podemos ocupar de ayudar a una mayor difusi¨®n del cine hablado en catal¨¢n".En opini¨®n de diversos profesionales del cine, la nueva norma resuelve en gran parte ciertas medidas de financiaci¨®n, mal o parcialmente contempladas en la medida anterior. Con todo, las mejoras de financiaci¨®n siguen siendo "absurdas" y no responden, seg¨²n los; mismos profesionales, a la realidad de la producci¨®n que se mueve con un a?o, como m¨ªnimo, de antelaci¨®n.
Cambio "sustancial"
Las negociaciones mantenidas entre Xavier Bru de Sala, director general de Promoci¨®n Cultural, y el Ministerio de Cultura en materia cinematogr¨¢fica se centran en la conveniencia. de traspasar una parte del FPC que controla dicho ministerio desde que el impuesto ITE fue sustituido por el IVA. Hasta aquel momento, en palabras de Bru de Sala, "la negociaci¨®n del traspaso era inviable porque el FPC depend¨ªa de Econom¨ªa y Hacienda y el tema quedaba al margen de nuestra competencia".La situaci¨®n ha cambiado sustancialmente", en opini¨®n del director general y, ahora, la materializaci¨®n de la transferencia s¨®lo depende "de un s¨ª o de un no que quiera emitir el Ministro". Con todo, el Departamento se muestra optimista y considera muy avanzada la primera fase de la negociaci¨®n. En principio exige unos 750 millones, "cifra resultante de una simple regla de tres, partiendo de la idea de que en Catalu?a se produce un tercio de las pel¨ªculas que se realizan en el Estado en un a?o". La Generalitat ha propuesto tambi¨¦n, caso de que el Ministerio acceda a la cesi¨®n de dicha cifra, el establecimiento de una ¨²nica comisi¨®n en Catalu?a, "pactada" entre ambas Administraciones, integrada por quienes deber¨¢n establecer qui¨¦nes merecen o no subvenciones oficiales para desarrollar sus proyectos. "No pueden existir dos pol¨ªticas distintas ni dos tipos de ayuda diversos para el cine y el Ministerio es sensible a dicho argumento".
A los 750 millones, la Generalitat sumar¨¢ los 250 que actualmente destina a la subvenci¨®n, mediante concurso p¨²blico, de pel¨ªculas realizadas en Catalu?a. Adem¨¢s otros 400 o 500 millones (procedentes de la partida -de 900 en total- que el conseller Joan Guitart decidi¨® destinar a la producci¨®n de cine televisivo o para la coproducci¨®n televisiva) conformar¨ªan una partida global de alrededor de los 1.500 millones que la Generalitat piensa dedicar a la promoci¨®n "ya no de las pel¨ªculas, sino de la industria del cine en general, incluidos los aspectos de distribuci¨®n y exhibici¨®n, a partir de un marco legal id¨®neo, una ley de cine o, acaso m¨¢s amplio, sobre el audiovisual", seg¨²n Bru de Sala.
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