El Madrid se ahog¨® 59 veces en la zona presionante del Mil¨¢n

La organizaci¨®n t¨¢ctica del Mil¨¢n de Arrigo Sacchi tiene sus puntos neur¨¢lgicos en dos facetas decisivas del juego: la fuerte zona presionante que despliega en una franja de terreno central de 40 metros, y la espl¨¦ndida puesta en pr¨¢ctica del fuera de juego. El Madrid nunca supo moverse frente a ambos conceptos estrat¨¦gicos y se ahog¨® 59 veces en ese pozo de Arrigo Sacchi. Nada menos que 48 balones perdieron los madridistas ante la presi¨®n de sus rivales, y otras 11 veces cayeron en la trampa del fuera de juego.La impotencia madridista se exhibi¨® con mayor claridad en el, primer tiempo, a la luz de los datos estad¨ªsticos del partido. Comandados por los 13 cortes de Ancelotti -el eje sobre el que gira todo el estudiado entramado t¨¢ctico de Sacchi-, muchos milanistas tuvieron ¨¦xito en su presi¨®n para cortar el bal¨®n: Gullit y Rijkaard lograron una recuperaci¨®n de bal¨®n, seis Maldini, tres Colombo y Donadoni, y hasta el rudo Tassotti se apunt¨® cuatro. En el segundo tiempo, el reparto fue m¨¢s espaciado: un corte de bal¨®n consiguieron Maldini, Donadoni y Colombo, dos Rijkaard, Evani y Gullit, tres Tassotti, y otros cinco m¨¢s Ancelotti.

S¨ª mostraron un mayor nivel de concentraci¨®n los madridistas en los fueras de juego, en los que cayeron tres veces Butrague?o y una Hugo en el primer tiempo, y cuatro Michel, una Hugo y Gordillo y otra m¨¢s Tendillo, esta ¨²ltima en un error del ¨¢rbitro como el del gol anulado a Gullit. S¨®lo Sanchis y Schuster lograron romper con inteligencia el sistema de Sacchi. El defensa lo hizo en una acci¨®n en la que intent¨® la penetraci¨®n individual regateando contrarios -acab¨® rodando por el suelo por una falta del experimentado Baresi-, y el alem¨¢n en un magn¨ªfico lanzamiento hacia Chendo, en paralelo a la l¨ªnea defensiva del Mil¨¢n.

Quede para la estad¨ªstica positiva del madridismo que el Mil¨¢n cay¨® tambi¨¦n ocho veces en fuera de juego: dos Van Basten, Gullit y Rijkaard, y una Evani y Colombo. Y que dos acciones presionantes copiadas al Mil¨¢n forzaron dos errores, uno de Tassotti y otro del mism¨ªsimo Baresi.