La soledad de Deng Xiaoping

BOSCO ESTERUELAS, El m¨¢ximo dirigente chino, Deng Xiaoping, debe de sentir estos d¨ªas la soledad del poder por doble motivo: la muerte de su disc¨ªpulo Hu Yaobang y la creciente protesta estudiantil que lanza desde el pasado domingo en la plaza de Tiananmen, de Pek¨ªn, gritos contra "el tirano".

El viejo l¨ªder no tuvo reparos hace dos a?os en deshacerse de su escudero, a quien destituy¨® como secretario general del partido en enero de 1987 por su "liberalismo burgu¨¦s" y por no contener a tiempo la marea de manifestaciones de universitarios que ped¨ªan democracia. ?Qu¨¦ har¨¢ ahora Deng? El actual clima pol¨ªtico no es propicio para dar rienda suelta a veleidades reformistas, y los gobernantes chinos no quieren ni de lejos que la tensi¨®n social ponga en peligro la importante cumbre chino-sovi¨¦tica del pr¨®ximo mes en Pek¨ªn.

Conforme pasan los d¨ªas y se extiende la protesta, toma cuerpo cada vez m¨¢s la idea de que no se va a permitir que los des¨®rdenes contin¨²en m¨¢s all¨¢ de ma?ana, despu¨¦s del homenaje p¨®stumo que el partido rendir¨¢ al fallecido Hu Yaobang en el Gran Palacio del Pueblo.

Lo que al principio comenz¨® como un homenaje a la figura de un pol¨ªtico que cont¨® con el respaldo de los intelectuales ha tomado un giro de resentimiento social por la aguda crisis econ¨®mica, la corrupci¨®n del funcionariado, los privilegios de los dirigentes y el hast¨ªo hacia el l¨ªder.

Los sin¨®logos sostienen que la desaparici¨®n de Hu Yaobang altera el equilibrio de poder y que su muerte supone un retroceso del ala liberal en un momento que la pol¨ªtica reformista emprendida por Deng hace 10 a?os ha sufrido una ralentizaci¨®n por la dif¨ªcil situaci¨®n econ¨®mica. Pero opinan tambi¨¦n que, por muy parad¨®jico que suene, el nuevo estado de cosas puede dar un respiro al actual secretario general del partido, Zhao Zlyang, y frenar los intentos cada vez m¨¢s serios del ala conservadora para sustituirlo por una persona m¨¢s adecuada a las circunstancias, el primer ministro, H Peng, o el viceprimer ministro, Yao Yilin.