Cada lonja, una trinchera

Muchos patrones mayores, cuando hablan de sus cofrad¨ªas, suelen presumir de que son como una gran familia, donde los problemas se resuelven entre compa?eros; de una estructura donde no ha entrado la pol¨ªtica ni los sindicatos. Nadie hasta la fecha se hab¨ªa atrevido a tocarlas. Nadie hasta que se decidi¨® a su reforma el consejero de Agricultura de la Junta de Andaluc¨ªa, Miguel Manaute, en l¨ªnea y con la misma filosof¨ªa que la utilizada por el ministro de Agricultura, Carlos Romero, cuando justificaba en el Parlamento su ley de C¨¢maras Agrarias para sentar las bases de futuro en unas corporaciones de derecho p¨²blico.

Se dice que, cuando Carlos Romero se hizo cargo del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n, adem¨¢s de las C¨¢maras Agrarias, otro de los objetivos a vaciar de contenido eran las Cofrad¨ªas de Pescadores. Sin embargo, parece tambi¨¦n que vari¨® de estrategia y los acontecimientos de los a?os siguientes han seguido un camino muy diferente al planteamiento inicial. Para las m¨¢s de 7.000 C¨¢maras Agrarias se aprob¨® una Ley a finales de 1986, a pesar de las manifestaciones de una parte del campo en contra del desmantelamiento real de estas corporaciones.En el caso de las cofrad¨ªas, no s¨®lo no se atrevi¨® nadie desde la Administraci¨®n central a modificar su estructura y funciones tal como solicitaban los sectores m¨¢s progresistas del sector, sino que el propio Carlos Romero nombraba al presidente de la Federaci¨®n Nacional de Cofrad¨ªas de Pescadores, Clemente Jes¨²s Mu?iz Guardado, como representante espa?ol en el Comit¨¦ Econ¨®mico y Social de la CE.

Carlos Romero hab¨ªa apostado por mantener las cofrad¨ªas controladas con un presidente con cierto carisma reelegido por el sector y del que el ministro ha recibido siempre alabanzas por los ¨¦xitos y cr¨ªticas moderadas ante los problemas de la pesca.

Pesca de bajura

Las cofrad¨ªas de pescadores agrupan pr¨¢cticamente a toda la pesca de bajura del pa¨ªs. En ellas domina la remuneraci¨®n por el llamado sistema a la parte (ganancias en funci¨®n de las capturas) y las relaciones familiares, en muchos casos paternalistas, frente a la estructura laboral que existe en los grandes pesqueros. Representan te¨®ricamente a unos 80.000 pescadores.Actualmente, por un decreto de 1978, las cofrad¨ªas recibieron el espaldarazo del BOE y se configuraron como "corporaciones de derecho p¨²blico, ¨®rganos de consulta y colaboraci¨®n con la administraci¨®n" con posibilidad de realizar tambi¨¦n actividades econ¨®micas, que se han centrado principalmente en la administraci¨®n de las lonjas.

A pesar del respeto de Carlos Romero a la estructura de las cofrad¨ªas, los primeros nubarrones y dudas sobre el papel futuro de las cofrad¨ªas se plantearon tras el ingreso de Espa?a en la CE.

Las OPES europeas

Con nombres diferentes, las cofrad¨ªas de pescadores funcionan en Espa?a desde hace varios siglos, cumpliendo pr¨¢cticamente las mismas funciones. Sus fines han sido muy amplios y han ido tradicionalmente desde la prestaci¨®n de servicios sociales para sus miembros hasta las actividades econ¨®micas, comenzando por la administraci¨®n de las lonjas de contrataci¨®n de la pesca hasta otros servicios, como la fabricaci¨®n de hielo. Resulta innegable que han constituido un n¨²cleo clave en cada uno de los puertos pesqueros.La cofrad¨ªa es una figura t¨ªpicamente espa?ola. La organizaci¨®n del sector de la pesca en la CE, en el aspecto econ¨®mico, se realiza a trav¨¦s de las organizaciones de productores, llamadas OPES. En Espa?a se pens¨® en una adaptaci¨®n de las cofrad¨ªas a las OPES simplemente con un cambio de nombre. No fue posible por la necesidad de que fueran organizaciones privadas, mientra las cofrad¨ªas son corporaciones de derecho p¨²blico. La salida arbitrada consisti¨® en que las propias cofrad¨ªas, con organizaci¨®n jur¨ªdica diferente, constituyesen OPES para ejercer las actividades de retirada y almacenamiento de productos pesqueros.

Durante los ¨²ltimos a?os, las OPES han tenido en Espa?a un desarrollo espectacular. Hoy est¨¢n constituidas m¨¢s de 30 y representan pract¨ªcamente el 80% de las capturas. Hay cofrad¨ªas que se han constitu¨ªdo en OPES. Pero resulta curioso que las OPES se hayan desarrollado en todo el pa¨ªs menos en Andaluc¨ªa, donde solamente funciona una OPE en C¨¢diz, mientras las de Almer¨ªa y Huelva no han dado se?ales de vida.

En el marco de la Comunidad, la actividad pesquera espa?ola pasa de forma irremisible por el funcionamiento generalizado de las OPES.