Un juez descubre una residencia de ancianos en la que se internaba ilegalmente a enfermos mentales
Un juez orden¨® el lunes el traslado de 16 enfermos mentales de la residencia geri¨¢trica Vallvidrera, en Barcelona, donde conviv¨ªan con ancianos a los que en ocasiones atacaban. El juez Josep Maria Pijoan dict¨® un h¨¢beas corpus por considerar que se hab¨ªa producido una detenci¨®n ilegal de los enfermos mentales, ya que fueron internados sin autorizaci¨®n judicial. La irregularidad fue descubierta el domingo, cuando el juez fue a levantar el cad¨¢ver de una mujer que se suicid¨®. Cuando el juez estaba en la residencia, un anciano se le acerc¨® y le dijo: "Aqu¨ª pegan; nos pegan".
El domingo, tanto el juez como la fiscal, Teresa Compte, se dirigieron al personal del centro para preguntar sobre el comentario que progresivamente les iban haciendo m¨¢s ancianos, que insist¨ªan en que les pegaban. As¨ª descubrieron que el centro ten¨ªa una planta baja a la que se acced¨ªa por una puerta cerrada con llave. Cuando fue abierta, vieron que hab¨ªa dos pabellones, uno de mujeres y otro de hombres y que ambos se caracterizaban por la suciedad y la dejadez, situaci¨®n que fue calificada ayer por el juez como "s¨®rdida". La residencia Vallvidrera es privada y su cuota mensual oscila entre las 75.000 y las 250.000 pesetas.Este espacio estaba ocupado por una veintena de personas que, en principio, se supon¨ªa que todos eran ancianos, pero entre ellos el juez vio un grupo de cinco o seis cuyas edades oscilaban entre los 30 y los 40 a?os.
Algunos de los internados hablaron con el juez y la fiscal y les contaron que fueron ingresados por sus familias y que, con anterioridad, hab¨ªan permanecido en centros psiqui¨¢tricos. El juez reclam¨® su historial m¨¦dico. En ellos se recogen diagn¨®sticos como "esquizofr¨¦nico", "paranoide o psic¨®tico".
En total, 16 personas estaban ingresadas como ancianas siendo, en realidad, enfermas mentales. En ning¨²n expediente se hall¨® la autorizaci¨®n judicial del internamiento, requisito obligatorio por ley.
El director de la residencia, Francisco Jodar, manifest¨® a las preguntas que le hizo el juez que ignoraba la obligatoriedad de comunicar un internamiento psiqui¨¢trico a la autoridad judicial. Tambi¨¦n dijo que no comunic¨® al juzgado las lesiones sufridas por algunos de los ancianos agredidos, porque tampoco sab¨ªa que estaba obligado a ello. Jodar no pudo ser localizado ayer por este peri¨®dico para conocer su versi¨®n.
"Ese, ¨¦se me pegaba"
Por todo ello, el juzgado dict¨® un auto de habeas corpus -detenci¨®n ilegal- y orden¨® la salida de los enfermos mentales para que fueran internados en centros adecuados. Finalmente, ingresaron en el instituto Frenop¨¢tico de Barcelona. El juez ha abierto tambi¨¦n una investigaci¨®n por la v¨ªa penal contra el responsable del centro, Francisco Jodar, por los presuntos delitos de detenci¨®n ilegal y de omisi¨®n del deber de denuncia.Mientras el juez y la fiscal hablaban con los internados, algunos de los ancianos insist¨ªan en que eran agredidos y se?alaban a los autores de las lesiones. "?se, ¨¦se me pega", dijo uno de los ancianos, se?alando a un hombre de nombre Francisco y afectado por un transtorno mental. Y Francisco lo admiti¨®, a la vez que explicaba al juez que no lo pod¨ªa evitar. Otro abuelo intervino: "A m¨ª tambi¨¦n me has pegado". "?A t¨ª tambi¨¦n? Pues no me acuerdo", contest¨® Francisco.
Varios de los ancianos insis t¨ªan en repetir un nombre, el de un hombre apellidado Pallar¨¦s. Ante tanta insistencia, el juez requiri¨® que le indicaran qui¨¦n era. A Pallar¨¦s lo encontraron con la cara con m¨²ltiples hema tomas en una habitaci¨®n sucia y con malos olores.
La residencia est¨¢ situada en el n¨²mero 23 de la calle Algarbe de Vallvidrera y sobre la verja hay un r¨®tulo que dice Hotel Vallvidrera. En total, cerca de 70 personas estaban internadas hasta el pasado lunes Durante la intervenci¨®n judicial se descubri¨® que el centro solicit¨® una licencia de apertura para dedicarse a la cura de alcoh¨®licos y que, m¨¢s tarde, solicit¨® una ampliaci¨®n para convertirse en un geri¨¢trico. En cualquier caso, la residencia no estaba autorizada como centro psiqui¨¢trico.
El inmueble tiene tres plantas y un s¨®tano con salida al exterior. Esta ¨²ltima parte era la destinada a los enfermos mentales aunque, seg¨²n el centro, a esa sala iban los internos m¨¢s problem¨¢ticos". Las plantas superiores estaban cuidadas, a diferencia de lo que ocurr¨ªa en la del s¨®tano en las que predominaba la suciedad y el olor a orina, seg¨²n el juzgado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.