Los militares chinos condenan a muerte a ocho manifestantes de Tiananmen
Ocho j¨®venes fueron condenados ayer a muerte por haber "incendiado autobuses y dado muerte a soldados" durante los incidentes de Tiananmen que pusieron fin al movimiento estudiantil a favor de la democratizaci¨®n de China. Los ocho fueron juzgados por un tribunal militar especial, ya que gran parte de la capital contin¨²a regida por la ley marcial declarada el 20 de mayo pasado.
ENVIADA ESPECIALLa televisi¨®n estatal no hizo referencia alguna a la concesi¨®n de un plazo para apelar la sentencia. Hoy expiran los tres d¨ªas concedidos a los tres condenados a muerte en Shanghai para que apelasen. En China, donde pr¨¢cticamente se desconoce la figura del abogado defensor, se concede normalmente un plazo de diez d¨ªas a los reos para que, junto con una confesi¨®n y el arrepentimiento por los cr¨ªmenes cometidos, apelen a la condonaci¨®n de la pena capital por la de cadena perpetua. Sin embargo, en circunstancias especiales para la seguridad del Estado, ese plazo puede reducirse a tres d¨ªas o simplemente no concederse.Se teme que, como ejemplo y aviso para todo el pa¨ªs, los ocho reos hayan perdido ya la vida de un tiro en la nuca, m¨¦todo tradicional de ejecuci¨®n en la Republica Popular. La televisi¨®n nacional hizo hincapi¨¦ en que ninguno de los ocho hombres, de edades comprendidas entre los 20 y los 30 a?os, son estudiantes, ni residentes en Pek¨ªn. Afirm¨® que se trata de vagabundos sin trabajo, venidos a la capital con el ¨²nico fin de subvertir el orden p¨²blico y perjudicar al Gobierno.
Las autoridades chinas tratan de justificar el asalto a Tiananmen como una acci¨®n contra un grupo de contrarrevolucionarios que pretend¨ªan derrocar al Gobierno. La plaza fue escenario ayer de una grandiosa celebraci¨®n en honor de los soldados muertos en acci¨®n, en la que participaron adem¨¢s de efectivos del Ej¨¦rcito un gran n¨²mero de ni?os pioneros, ataviados con el distintivo pa?uelo rojo al cuello.
Mientras el Gobierno cifra oficialmente los muertos en 300, asegura que gran parte de ellos fueron soldados y se olvida en los funerales oficiales de los civiles ca¨ªdos, fuentes occidentales insisten en que son cerca de 2.000 las v¨ªctimas de la entrada de los tanques en Pek¨ªn.
La televisi¨®n nacional inform¨® tambi¨¦n de la detenci¨®n de Yan Tao, de 19 a?os, estudiante de la Universidad de Pek¨ªn y miembro del sindicato Aut¨®nomo de Estudiantes, formado semanas antes de la declaraci¨®n de la ley marcial. Con Yan son ya cinco los l¨ªderes estudiantiles apresados, de los 21 sobre los que pesa la orden de b¨²squeda y captura.
Yan fue, al parecer, reconocido y denunciado en Lanzhou (centro de China). Los estudiantes que participaron en casi dos meses de protestas en la calle desaparecieron de la capital y buscaron refugio en casas de amigos mientras dura la caza de brujas decretada por el Gobierno chino. Sin embargo, la campa?a desatada para convencer a la poblaci¨®n de que denuncie a los agitadores est¨¢ surtiendo efecto y a diario se capturan a cientos de posibles "contrarrevolucionarios", cuya pena ¨²ltima puede ser la muerte.
Tras el anuncio de las ocho nuevas penas capitales, la televisi¨®n hizo p¨²blico un nuevo decreto de la municipalidad de Pek¨ªn en el que se recuerda a la poblaci¨®n la obligaci¨®n de devolver "cualquier cosa que se haya encontrado" durante los disturbios y de denunciar a quienes los "provocaron".
Fuentes chinas cifran en "varios miles" el n¨²mero de detenidos por todo el pa¨ªs. La ola de terror que se cierne, especialmente, sobre los grandes n¨²cleos urbanos es aprovechada por los servicios de seguridad para limpiar las ciudades de campesinos sin empleo, delincuentes y violadores.
Situaci¨®n de Zhao Ziyang
Por otra parte, la retransmisi¨®n ayer por la televisi¨®n china de la entrevista concedida el viernes, por el portavoz del Gobierno, Yuan Mu, a la cadena de televisi¨®n norteamericana NBC, podr¨ªa significar que la reuni¨®n del Comit¨¦ Central del Partido Comunista de China (PCCh), en la que se destituir¨¢ oficialmente al secretario general, Zhao Ziyang, es inminente. Yuan, en respuesta a la pregunta de si ser¨ªa juzgado Zhao por haber apoyado la revuelta estudiantil, dijo, sin mencionar su nombre, que se trata de "una cuesti¨®n interna que ser¨¢ tratada de acuerdo con el reglamento del partido".Por su parte, los dos periodistas norteamericanos expulsados hace una semana abandonaron ayer China. Otro periodista brit¨¢nico de la British Broadcasting Corporation (BBC) se encuentra actualmente bajo investigaci¨®n policial y podr¨ªa ser expulsado en los pr¨®ximos d¨ªas.
[En Washington se inform¨® que varios diplom¨¢ticos chinos han pedido asilo en Estados Unidos, un¨ªendose a los dos que lo solicitaron d¨ªas atr¨¢s en San Francisco, informa Reuter].
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