El futuro presidente surafricano inicia una visita a Europa

Frederik de Klerk, dirigente del gubernamental Partido Nacional de Sur¨¢frica y el hombre que, con casi total seguridad, se convertir¨¢ en nuevo presidente surafricano el pr¨®ximo mes de septiembre, inicia hoy en Londres una gira europea durante la que se entrevistar¨¢ con diversas autoridades.Desde que ha tomado el tim¨®n del Partido Nacional, a ra¨ªz de la enfermedad del anciano presidente Pieter Botha el pasado mes de febrero, De Klerk ha dado claras indicaciones sobre su deseo de introducir reformas pol¨ªticas a las que se neg¨® Botha.

En Europa, los dirigentes del Reino Unido, Rep¨²blica Federal de Alemania, Italia y Portugal, con los cuales se encontrar¨¢ De Klerk, le pedir¨¢n garant¨ªas sobre la liberaci¨®n del l¨ªder nacionalista negro Nelson Mandela, que haya alg¨²n tipo de contactos entre su futuro Gobierno y el Congreso Nacional Africano (ANC ), que se levante el estado de emergencia y que se lleve cabo un desmantelamiento real de las estructuras del r¨¦gimen de segregaci¨®n racial (apartheid).

Existe un peligro de desilusi¨®n ante las esperanzas, en algunos casos exageradas, que los europeos han depositado en el reformismo de De Klerk. Esto ocurre con Margaret Thatcher, que tiene depositadas sus esperanzas en la pol¨ªtica De Klerk para justificar la ranudaci¨®n de su apoyo al r¨¦gimen surafricano. Sin embargo, sobre los cambios anunciados nada hay seguro. Puede ser que todo sea palabrer¨ªa o bien que De Klerk sea incapaz de implantar las reformas.

De Klerk es el actual ministro de Educaci¨®n surafricano y est¨¢ inmerso en una fren¨¦tica lucha por el poder desde el momento en el que Botha rehus¨® entregar las riendas de la presidencia y dar paso a un hombre m¨¢s joven.

El malhumor de Botha

Se espera que Botha presente su dimisi¨®n despu¨¦s de las elecciones generales del pr¨®ximo 6 de septiembre, y de acuerdo con c¨ªrculos pol¨ªticos surafricanos est¨¢ "de un humor de perros" desde que De Klerk recibi¨® la invitaci¨®n para visitar Londres, Bonn, Roma y Lisboa. Botha jam¨¢s ha gozado de popularidad internacional. Por el momento tan s¨®lo se habla de un probable, pero no confirmado, encuentro en Washington el mes pr¨®ximo entre el todav¨ªa presidente surafricano y su hom¨®logo estadounidense, George Bush.

Por su parte, el presidente de Zambia, Kenneth Kaunda, la eminencia gris de los denominados pa¨ªses de la L¨ªnea del Frente (vecinos a Sur¨¢frica), tiene previsto un pr¨®ximo encuentro con De Klerk. En sus encuentros en Europa, el probable nuevo presidente surafricano deber¨ªa clarificar qu¨¦ es lo que entiende por su anunciada protecci¨®n a la minor¨ªa, lo que en t¨¦rminos surafricanos significa derechos de los blancos, y si est¨¢ dispuesto a extender sus reformas al resto de la poblaci¨®n, lo que le granjear¨ªa el aplauso del mundo. Su problema es que llega a Europa antes de unas elecciones en las que los conservadores blancos surafricanos intentar¨¢n sacar partido a sus posibles concesiones.