"Europa necesita un Plan Marshall de emigraci¨®n", dice Massimo Livi-Bacci

Massimo Livi-Bacci, presidente de la Uni¨®n Internacional para el Estudio Cient¨ªfico de la Poblaci¨®n, ha dicho en Madrid que Europa necesita poner en pr¨¢ctica otro Plan Marshall, pero esta vez para la emigraci¨®n. "Es decir, que se permita a los pa¨ªses del Sur en v¨ªas de desarrollo introducir poblaci¨®n en el Viejo Continente durante los 20 pr¨®ximo a?os, que van a ser cruciales para el desarrollo econ¨®mico, social y cultural, sobre todo de los pa¨ªses subdesarrollados".

El dem¨®grafo italiano, profesor de la universidad de Florencia, uno de los m¨¢ximos especialistas en temas de fecundidad y en poblaci¨®n de los pa¨ªses mediterr¨¢neos, particip¨® ayer junto con otros expertos espa?oles y extranjeros en el Encuentro internacional sobre cambios demogr¨¢ficos, con el que se ha inaugurado el Instituto de Demograf¨ªa del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC)."S¨¦ que mantener esta posici¨®n no es popular e incluso a algunos puede parecer es una teor¨ªa peregrina, pero creo que la Comunidad Europea no debe cerrar las puertas a la inmigraci¨®n como est¨¢ previsto en 1992 cuando sea una realidad el mercado ¨²nico", dice Livi-Bacci. "Parece que Europa tiene miedo a una invasi¨®n hidr¨¢ulica, sobre todo de inmigrantes de ?frica, Asia e incluso de Suram¨¦rica, pero las circunstancias que aconsejaron adaptar las medidas restrictivas -crisis econ¨®mica, alta tasa de desempleo y pleno desarrollo del terrorismo- est¨¢n remitiendo claramente", a?ade, "y un plan Marshall de emigraci¨®n ser¨ªa m¨¢s positivo que cualquier ayuda financiera".

Apertura controlada

Para el especialista italiano en demograf¨ªa, una apertura controlada de las fronteras a los trabajadores de los pa¨ªses del sur aportar¨ªa fundamentalmente ventajas econ¨®micas tanto para Europa como para los pa¨ªses que env¨ªan su poblaci¨®n."Naturalmente no se puede olvidar que la emigraci¨®n tiene aspectos negativos mirada desde el punto de vista individual, ya que supone el alejamiento de unas ra¨ªces y enfrentarse a un clima hostil la mayor parte de las veces, pero habr¨ªa que paliar estos efectos con medidas sociales y culturales. Espa?a puede significar un caso particular en este terreno por sus vinculaciones con Am¨¦rica Latina", se?ala el profesor de la universidad de Florencia.

Por lo dem¨¢s "el fen¨®meno de la unidad europea no va a provocar importantes cambios demogr¨¢ficos" seg¨²n Livi-Bacci. "Eso s¨ª, se va a mantener la paradoja de que por una parte cada vez son m¨¢s estrechos los v¨ªnculos econ¨®micos entre los pa¨ªses del norte y del centro de Europa con los del Mediterr¨¢neo pero los v¨ªnculos humanos apenas son significativos". "Estas dos realidades distintas van a permanecer as¨ª a pesar de que cada vez hay m¨¢s puentes (tecnolog¨ªas medios de comunicaci¨®n) que las ponen en contacto", dice.