William Hurt

William Hurt jur¨® decir la verdad, toda la verdad y nada m¨¢s que la verdad, y su foto, con la mano alzada, ha aparecido en la primera p¨¢gina de todos los peri¨®dicos neoyorquinos. El actor no consigui¨® que los periodistas no acudieran a la primera vista del juicio oral, celebrada el lunes en Manhattan (Nueva York), en el que se va a decidir si el actor deber¨¢ pagar cinco millones de d¨®lares (630 millones de pesetas) a una bailarina del New City Ballet, Sandra Jennings, que asegura haber cohabitado con ¨¦l durante tres a?os y que, por tanto, se considera su mujer. Aunque la pareja tiene un hijo, Alexander, de seis a?os, Hurt testific¨® que jam¨¢s hab¨ªa considerado a esa mujer su esposa. Hurt, que consigui¨® un oscar por El beso de la mujer ara?a, fue muy claro ante la juez Silberman: "Sandra no es mi mujer ni jam¨¢s lo ha sido".

El actor, muy contrariado por la presencia de periodistas, se mostr¨® tranquilo al principio de la vista, pero muy nervioso y confuso al final. Los nervios le vencieron cuando explic¨® que no se cas¨® con la bailarina porque estaba "quemado y abrasado" por su primera experiencia marital con la actriz Mary Beth. El acusador le pregunt¨® entonces si estaba quemado y abrasado como le ocurri¨® en Fuego en el cuerpo, donde el actor interpret¨® a un detective privado que manten¨ªa una ardiente relaci¨®n con la actriz Kathleen Turner.

Hurt no pudo ocultar su malestar ante esa pregunta, que provoc¨® las risas de los asistentes y el enfado de la juez. El actor reconoci¨® haber vivido con Jennings, de 32 a?os de edad, desde octubre de 1981 hasta julio de 1984, a la que ya est¨¢ pagando 65.000 d¨®lares anuales para que cuide y eduque a su hijo.

El Estado de Nueva York no reconoce la cohabitaci¨®n como forma de matrimonio legal. Sin embargo, Jennings present¨® la querella por las cuatro semanas que ambos vivieron en Carolina del Sur, donde s¨ª se reconoce la condici¨®n de esposa a la mujer que habita con un hombre de forma prolongada.