Gorbachov pide a Rafsanyani que Ir¨¢n no agite los ¨¢nimos de los musulmanes sovi¨¦ticos

La visita a Mosc¨² del dirigente iran¨ª Ali Akbar Hachemi Rafsanyani, presidente del Parlamento y jefe de las fuerzas armadas en funciones abre, a la muerte del imam Jomeini, una etapa de mayor calidez y acercamiento entre la URSS e Ir¨¢n, distanciados por la revoluci¨®n isl¨¢mica de 1979. Rafsanyani ha sido invitado por Mijail Gorbachov, que, en opini¨®n de observadores pol¨ªticos, advirti¨® diplom¨¢ticamente al dirigente iran¨ª sobre la inconveniencia y el riesgo de agitar los ¨¢nimos de la comunidad musulmana sovi¨¦tica, calculada en varias decenas de millones de personas.

Ayer, por primera vez, un funcionario sovi¨¦tico, el viceministro del Interior de Uzbekist¨¢n, Eduard Didorenko, utiliz¨® la expresi¨®n guerra santa, aunque "de confecci¨®n casera", para calificar los sucesos de Uzbekist¨¢n, y declar¨® p¨²blicamente que los disturbios ¨¦tnicos en aquella rep¨²blica son la consecuencia del intento de poner en marcha un frente panisl¨¢mico entre diferentes nacionalidades de esta cultura en Asia central.Rafsanyani, recibido el d¨ªa 20 en Mosc¨² con los honores de un jefe de Estado, es el dirigente de mayor rango que visita la URSS desde la revoluci¨®n isl¨¢mica de 1979, y lo hace precisamente cuando el islam se materializa como fuente de conflictos -sobre el tel¨®n de fondo de graves problemas sociales y econ¨®micos- en el Asia central sovi¨¦tica. Tanto en Azerbaiy¨¢n el a?o pasado como en Uzbekist¨¢n este a?o, retratos del imam Jomeini y banderas isl¨¢micas han aparecido en m¨ªtines o manifestaciones. Azerbaiy¨¢n se encuentra en la frontera con Ir¨¢n, cuyas emisiones de car¨¢cter propagand¨ªstico religioso se escuchan con inter¨¦s en Turkinenist¨¢n, otra rep¨²blica sovi¨¦tica fronteriza.

La delegaci¨®n iran¨ª ha presentado la visita a Mosc¨² -la primera que hace Rafsanyani al extranjero tras la muerte del imam- como una voluntad del finado. Mosc¨² ha recibido a los iran¨ªes con los brazos abiertos como si nunca hubiera dejado de esperarles. "Nunca hubo tales oportunidades para ampliar las relaciones entre nuestros dos Estados vecinos", recalc¨® Gorbachov en su encuentro con Rafsanyani en el Kremlin el d¨ªa 20. "Estamos dispuestos a ir hasta donde Ir¨¢n est¨¦ dispuesto a salir al encuentro", dijo Gorbachov, seg¨²n el cual esto debe hacerse manteniendo los ideales de la revoluci¨®n iran¨ª y los de la perestroika sovi¨¦tica.

El l¨ªder sovi¨¦tico reconoci¨® que hab¨ªa habido "tiempos dif¨ªciles" en las relaciones entre ambos pa¨ªses, y se?al¨® que en la pol¨ªtica actual sovi¨¦tica no puede haber ni habr¨¢ nada que perjudique los intereses de Ir¨¢n. Gorbachov hac¨ªa una clara alusi¨®n a la presencia sovi¨¦tica en Afganist¨¢n, que da?¨® las relaciones entre Mosc¨² y los pa¨ªses isl¨¢micos.

La URSS e Ir¨¢n firmar¨¢n varios documentos sobre la cooperaci¨®n hasta el a?o 2000. Gorbachov se?al¨® que estos documentos son importantes tanto por su "contenido inhabitual" como porque presentan a ambos pa¨ªses como "dos grandes Estados vecinos con planes serios y de largo alcance". Ayer, el ministro de Exteriores iran¨ª, Akbar Belayati, se entrevist¨® con su colega sovi¨¦tico, Edvard Shevardnadze.