El recuerdo del 'Challenger' origina temor ante el lanzamiento de una sonda con plutonio

Con siete a?os de retraso y 125.000 millones de pesetas por encima del presupuesto, la sonda espacial Galileo transportar¨¢ la carga m¨¢s mort¨ªfera jam¨¢s enviada al espacio -un reactor nuclear de plutonio-, que ser¨¢ lanzada hacia J¨²piter el pr¨®ximo octubre en la misi¨®n m¨¢s compleja de la NASA a los planetas exteriores.

La Galileo, que ser¨¢ puesta en ¨®rbita por un transbordador espacial, necesitar¨¢ transportar 22 kilos de plutonio, sustancia de alta radiactividad, como combustible nuclear para conseguir la suficiente energ¨ªa el¨¦ctrica en su largo recorrido hasta J¨²piter, han confirmado portavoces de la NASA en Cabo Ca?averal.La cat¨¢strofe que supondr¨ªa un accidente si se desparramara una m¨ªnima cantidad de plutonio durante el lanzamiento ha generado numerosos interrogantes en el mundo cient¨ªfico sobre la idoneidad de llevar la Galileo a bordo de un transbordador espacial, tal como est¨¢ previsto.

La NASA asegura que el plutonio va protegido por unas cajas met¨¢licas que resistir¨ªan un accidente similar a la explosi¨®n del Challenger, pero admiti¨® en el borrador de un informe sobre seguridad -al que tuvo acceso el diario Miami Herald- que lanzar la Galileo en un transbordador casi duplica los riesgos de accidente. Numerosos cient¨ªficos coinciden con la NASA en que el lanzamiento ser¨ªa m¨¢s seguro con un cohete desechable del tipo Tit¨¢n 4, adem¨¢s de m¨¢s barato y m¨¢s r¨¢pido (la Galileo no llegar¨¢ a J¨²piter hasta 1995).

Seg¨²n los c¨¢lculos de la NASA, presentados en este informe, la mayor probabilidad de derrame de plutonio ocurrir¨ªa en caso de explosi¨®n durante el lanzamiento del transbordador, pero las posibilidades de que esto se produjera es de una entre 1.460, frente a una entre 2.500 para un cohete no tripulado.

Aunque el informe admite que la explosi¨®n durante el lanzamiento causar¨ªa unas 400 muertes por c¨¢ncer, cient¨ªficos independientes consideran que la NASA est¨¢ subestimando tanto las posibilidades de dispersi¨®n de plutonio como el da?o que esto producir¨ªa.

El peligro no acaba, por otra parte, con el exitoso lanzamiento del transbordador. Una vez en ¨®rbita, los astronautas tendr¨¢n que disparar el cohete que impulsar¨¢ a la Galileo hacia J¨²piter. Si la misi¨®n falla en ese momento, la sonda podr¨ªa quedar atascada en una ¨®rbita menor y caer posteriormente a la Tierra. Seg¨²n la NASA, los contenedores del plutonio est¨¢n dise?ados para aguantar esta ca¨ªda.

Dos vueltas a la Tierra

La Galileo conlleva otro riesgo adicional. Por razones de seguridad, el transbordador no dispondr¨¢ de un cohete con la potencia suficiente para lanzar la sonda directamente hasta J¨²piter. La Galileo habr¨¢ de dar una vuelta alrededor de Venus y dos alrededor de la Tierra antes de almacenar fuerzas para lanzarse hacia J¨²piter. En su segunda vuelta alrededor de la Tierra estar¨¢ a tan s¨®lo 321 kil¨®metros de nuestro planeta, pero seg¨²n la NASA en ese momento la probabilidad de fallo es de s¨®lo una entre dos millones.Steven Aftergood, experto en energ¨ªa nuclear espacial y miembro de la Federaci¨®n de Cient¨ªficos Americanos, coincidi¨® con otros colegas en que utilizar un transbordador es una decisi¨®n desgraciada. El portavoz de la NASA, Charles Redmon, reconoci¨® que esa decisi¨®n no fue cient¨ªfica sino pol¨ªtica.

Los cient¨ªficos prestan un decidido apoyo a la misi¨®n de la Galileo, pues afirman que dar¨¢ importantes y fundamentales claves sobre la naturaleza del sistema solar. La Galileo aportar¨¢ informaci¨®n detallada sobre los or¨ªgenes, la atm¨®sfera y el campo magn¨¦tico del mayor planeta de nuestro sistema solar y de cuatro de sus lunas.