Un agente avis¨® de un probable atentado contra la c¨¢rcel de Alcal¨¢-Meco meses antes de que lo realizara ETA
Un delegado local del comit¨¦ provincial de Madrid del Sindicato Nacional de Polic¨ªa (SNP), destinado de forma temporal en la c¨¢rcel de m¨¢xima seguridad de Alcal¨¢-Meco, present¨® en septiembre de 1988, ocho meses antes del atentado etarra a esta prisi¨®n, dos escritos internos, con ocho d¨ªas de diferencia, en los que se denunciaba la falta de las "imprescindibles" y "m¨ªnimas" medidas de seguridad dentro y fuera de la c¨¢rcel. En una de estas comunicaciones calificaba de "muy probable" que ocurriese un atentado en la prisi¨®n o en sus inmediaciones.
El agente, que solicit¨® el anonimato a este peri¨®dico por haber recibido amenazas, envi¨® los dos informes al inspector jefe de la compa?¨ªa policial de la prisi¨®n de Alcal¨¢-Meco y a la direcci¨®n del centro penitenciario. En ambos escritos, que se formularon meses antes del atentado en las cercan¨ªas de la c¨¢rcel ocurrido el pasado 8 de mayo en el que dos polic¨ªas murieron y otras tres personas resultaron heridas, se denunciaban, primero, la falta de medidas de seguridad en el traslado de los funcionarios a la c¨¢rcel, y las deficientes condiciones de habitabilidad en el interior de la instituci¨®n penitenciaria, as¨ª como la infrautilizaci¨®n de los sistemas de alarma y seguridad.En el primer escrito se hac¨ªa referencia a la posibilidad de un atentado, tal y como sucedi¨® m¨¢s tarde, como consecuencia de la ausencia de las medidas de protecci¨®n que se deben tomar en el traslado de los funcionarios a una c¨¢rcel de m¨¢xima seguridad como es la prisi¨®n de Alcal¨¢-Meco, advirtiendo asimismo que la falta de estas medidas podr¨ªa generar "muertes".
El miembro del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa y componente del servicio de seguridad de la c¨¢rcel afirmaba en el escrito que "diariamente dicho Cuerpo establece un servicio de trasporte desde la compa?¨ªa ubicada en [el barrio del Moratalaz (Madrid) hasta la prisi¨®n y recorre otros puntos intermedios" y que "las medidas de seguridad, encaminadas a salvaguardar y proteger en su grado m¨¢ximo la vida de los polic¨ªas no son observadas, utilizando un veh¨ªculo que airea la condici¨®n de la totalidad del personal que transporta" [se refiere a que los veh¨ªculos que utilizan no est¨¢n camuflados]. "En el muy probable caso de ser v¨ªctimas en un atentado, se derivar¨ªan diversas responsabilidades dificilmente asumibles por quienes tuvieran que responder de ellas", a?ade.
Otras denuncias
El polic¨ªa pide en el documento que se inicien las gestiones para utilizar veh¨ªculos camufiados en estos traslados, sin descartar el blindaje, y que se aumenten las medidas de seguridad introduciendo varios cambios ya que a diario "el recorrido es id¨¦ntico, a las mismas horas, con el mismo n¨²mero de funcionarios..."
Posteriormente, al menos otros ocho funcionarios del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa secundaron la protesta en un escrito similar. Ante el silencio administrativo, el agente present¨® un segundo documento, aproximadamente ocho d¨ªas despu¨¦s, en el que denunciaba ante el titular de la direcci¨®n de la c¨¢rcel -por aquel entonces, Antonio Lozano, que fue destituido el 11 de abril de este a?o tras las insistentes peticiones en este sentido de los sindicatos de prisiones- las .graves" anomal¨ªas observadas en el interior de la prisi¨®n.
Seg¨²n la denuncia, estas anomal¨ªas se centran en las condiciones "infrahumanas" en las que permanec¨ªan los funcionarios, el mal estado de habitabilidad de las garitas y la pasarela de acceso a las mismas, adem¨¢s de lala suciedad en el interior del recinto penitenciario y el mal funcionamiento de los sistemas de control.
El polic¨ªa hace menci¨®n a que el objetivo perseguido con el escrito "no es otro que el de intentar aunar esfuerzos capaces de combatir y erradicar cualquier circunstancia que no contribuya a la dignidad, seguridad, reconocimiento, profesionalidad o est¨ªmulo del polic¨ªa".
Seis meses desp¨²es se produjo la fuga de dos internos por la garita n¨²mero 6, pr¨®xima a la cocina, y dos funcionarios fueron retenidos por 15 presos dur¨¢nte 12 horas.
A ra¨ªz de ambas denuncias, un mes m¨¢s tarde el jefe superior de Polic¨ªa de Madrid, Lorenzo Calatayud de la Hoz, firm¨® una sanci¨®n de apercibimiento al polic¨ªa, "por una falta leve ( ... ) al prescindir del conducto reglamentario para formular cualquier solicitud o reclamaci¨®n" en la presentaci¨®n de los escritos.
El comisario Calatayud advierte al polic¨ªa que puede interponer un recurso de alzada ante el director general de la Polic¨ªa, Jos¨¦ Mar¨ªa Rodr¨ªguez Colorado.
El actual director de la prisi¨®n de Alcal¨¢-Meco, Fernando Crespo, manifest¨® a este peri¨®dico que desconoc¨ªa la existencia de los escritos y que en cualquier caso se hab¨ªan presentado ante una anterior direcci¨®n del centro penitenciario.
No obstante, al requerirle para que localizara los escritos, Fernando Crespo afirm¨® que no pod¨ªa destinar a tres funcionarios durante dos o tres d¨ªas a la b¨²squeda de los mismos.
Del marr¨®n al negro
Uno de los etarras internos en la prisi¨®n de Alcal¨¢-Meco sentenci¨® "a gritos" a un grupo de polic¨ªas: "Ma?ana va¨ªs a cambiar el marr¨®n por el negro", horas antes de producirse el atentado, el 8 de mayo, que cost¨® la vida a dos polic¨ªas, seg¨²n dijeron agentes destinados en la c¨¢rcel.Esto demuestra que la direcci¨®n de ETA hab¨ªa comunicado a los miembros de la organizaci¨®n, presos en Alcal¨¢-Meco que ocurrir¨ªa un atentado, extremo que finalmente sucedi¨® a las escasas horas. Los presos de ETA reciben periodicamente visitas de sus familiares y abogados. Fuentes policiales se?alaron tras el atentado que el comando que coloc¨® 15 kilos de amonal carec¨ªa de informaci¨®n previa sobre el objetivo. El explosivo fue colocado en el coche de un funcionario de prisiones, que previamente fue tiroteado con la intenci¨®n infructuosa de asesinarle.
Diversos medios policiales y penitenciarios criticaron en aquella fecha las medidas de seguridad de la prisi¨®n. Preguntado ahora el director de la c¨¢rcel, Fernando Crespo, sobre si se hab¨ªan reforzado las citadas medidas dentro y fuera de la prisi¨®n, remiti¨® la respuesta a Instituciones Penitenciarias. El gabinete de Prensa de este organismo pospuso cualquier aclaraci¨®n al respecto hasta ma?ana.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.