La vigencia de la monarqu¨ªa

El concepto de monarqu¨ªa puede que no se tome en serio desde una perspectiva intelectual, pero es indudable que la monarqu¨ªa constitucional goza de una gran popularidad actualmente. Los incontables personajes europeos m¨¢s o menos cercanos a la realeza son comidilla habitual en la prensa del coraz¨®n. Cuando no son fr¨ªvolos hacen cosas bastante est¨²pidas. Pero en Europa hay bastantes monarcas de verdad y son en general muy bien considerados en sus respectivos pa¨ªses.Los espa?oles no ten¨ªan gran respeto por la instituci¨®n mon¨¢rquica. La forma en que el rey Juan Carlos ha desarrollado su reinado ha conseguido la adhesi¨®n de la mayor¨ªa de espa?oles, que, sin embargo, al comienzo, tem¨ªan que la monarqu¨ªa fuese una mera continuaci¨®n de la dictadura franquista. De Franco recibi¨® un poder omn¨ªmodo y prefiri¨® cambiarlo por un poder constitucional. Su posterior actuaci¨®n en momentos decisivos de la pol¨ªtica espa?ola hicieron que creciera el apoyo popular a su persona y a la instituci¨®n mon¨¢rquica.

Elucubrar sobre la monarqu¨ªa y su asentamiento dentro de la l¨®gica pol¨ªtica carece de sentido. La monarqu¨ªa tiene mucho que ver con el instinto y nada con la raz¨®n. Pero la popularidad de la monarqu¨ªa no necesita de una teor¨ªa. El historiador brit¨¢nico Hugh Thomas considera que est¨¢ basada en una costumbre ancestral que se acepta sin m¨¢s por la gente en muchos pa¨ªses

22 de julio