P¨¢rrocos italianos roc¨ªan con agua bendita las playas del Adri¨¢tico

Varios p¨¢rrocos italianos se han presentado en las playas del Adri¨¢tico afectadas por la marea de algas con roquete e hisopo para rociar con a "bendita" la "maldita" agua de las algas."Si muere el Adri¨¢tico, morimos todos", les ha confesado Nilde lotti -predidenta del Parlamento, comunista, viuda de Togliatti e hija de la zona maldita de las "diab¨®licas"- a los ocho alcaldes de los lugares m¨¢s golpeados por la peste. Los ocho alcaldes, provistos con su faj¨ªn, se han trasladado a Roma acompa?ados por miles de personas del Adri¨¢tico al Parlamento. Han acampado en la plaza de Montecitorio, convirti¨¦ndola en una playa artificial, con sombrillas, tumbonas, barcas de goma, toallas de mar y, sobre todo, cubos de aigas "que parecen v¨®mitos", dice la gente.

Vigilan para que el Parlarnento apruebe, antes de irse de vacaciones, el proyecto del Gobierno, que ha dedicado 120.000 millones de pesetas para "la plaga del Adri¨¢tico" y que d¨ªas atr¨¢s, a la hora de la votaci¨®n, no se pudo consumar por falta de qu¨®rum.

Mientras tanto, se moviliza la fantas¨ªa italiana de las cinco regiones para afrontar el problema por s¨ª mismas sin la ayuda del Estado. Han convocado al brit¨¢nico Peter Morris, director de la expedici¨®n para limpiar Alaska, tras el desastre de Exxon. Se ha acudido tambi¨¦n al chino Jou Lao, que desde hace a?os cultiva peces milagrosos que limpian los mares al devorar las algas. El ministro de Sanidad orden¨® que se le escuchase. El chino hizo un experimento en un acuario de sesenta litros de agua. Los peces se dieron una panzada de algas que casi revientan y dejaron el agua limpia corro un cristal. L¨¢stima que, s¨®lo al final, los expertos se dieron cuenta de que aquellas al gas eran de agua dulce.

La ¨²ltima interitoria para limpiar el Adri¨¢tico de las algas fat¨ªdicas la ha hecho el catedr¨¢tico Pier Robitto, quien, al parecer, ha inventado una especie de turmix gigante con dos aspas enormes capaz de crear un movimiento especial debajo del mar que producir¨ªa la oxigenaci¨®n mec¨¢nica de agua. Desde Venecia hasta el puerto de Ancona, centenares de barcos de recreo, de pesca y de la Armada usaron ayer propulsores, bombas o arrastraron neum¨¢ticos y lastre para dispersar las algas y oxigenar las aguas, informa Reuter. Miles de veraneantes han cancelado ya sus reservas debido a la plaga.