El refugio mortal de Beirut
20 muertos y 70 heridos, en un duelo de artiller¨ªa entre tropas sirias y fuerzas cristianas en L¨ªbano
El refugio subterr¨¢neo se convirti¨® en una trampa mortal. Los 80 vecinos de Fayadiye, a nueve kil¨®metros al este de Beirut, que buscaron refugio, como en otras muchas ocasiones, en el cuartel que la VIII Brigada del Ej¨¦rcito Liban¨¦s tiene en esa localidad de las afueras de la capital, vivieron en la madrugada de ayer una de las peores pesadillas de su vida. Los 15 muertos causados por los dos proyectiles sirios que estallaron en el abrigo eran trozos de carne irreconocibles cuando los equipos de salvamento llegaron al lugar.
El bombardeo de la noche del jueves al viernes, que caus¨® adem¨¢s 50 heridos, ha sido uno de los m¨¢s violentos de los ¨²ltimos meses en L¨ªbano y el que mas v¨ªctimas ha causado desde el pasado 26 de julio. En total 20 personas resultaron muertas y otras 75 heridas. Adem¨¢s de los 15 fallecidos de Fayadiye, otras cinco personas perdieron la vida, cuatro tambi¨¦n en el sector Este y una en el Oeste.Se eleva as¨ª a 576 el n¨²mero de muertos desde que el pasado marzo se desencadenara esta nueva oleada de violencia entre las dos comunidades mayoritarias del pa¨ªs, cristianos de un lado y musulmanes, con el apoyo sirio, de otro. Cerca de 2.500 ciudadanos han sido heridos por los combates en ese mismo per¨ªodo. La mayor¨ªa de las v¨ªctimas contin¨²an siendo civiles.
Los enfrentamientos de ayer fueron iniciados por las tropas de Siria poco despu¨¦s de las diez de la noche (las nueve, hora peninsular espa?ola), seg¨²n versiones coincidentes de varios habitantes de la capital libanesa. Al parecer, los radares sirios detectaron la llegada de seis nav¨ªos mercantes cargados con v¨ªveres que se dirig¨ªan a los puertos de Yunie y Biblos, en la zona de costa controlada por las fuerzas cristianas.
La medida, que viene siendo habitual desde que se iniciaran las hostilidades hace cinco meses, responde a la voluntad siria de mantener un bloqueo total de las v¨ªas de entrada al llamado pa¨ªs cristiano, cuyo dirigente, el general Michel Aoun, declar¨® el pasado 14 de marzo la guerra de liberaci¨®n contra su vecino. El r¨¦gimen de Damasco mantiene en territorio liban¨¦s unos 35.000 hombres gracias a la alianza con las fuerzas musulmanas.
R¨¢pidamente, los ca?ones de las fuerzas cristianas respondieron al ataque y el fuego cruzado se extendi¨® a todas las regiones del peque?o pa¨ªs mediterr¨¢neo. Los habitantes de Beirut, centro de todas las luchas, corrieron a los refugios, aunque tal como ha probado la desgracia ocurrida en Fayadiye, ya ni siquiera all¨ª pueden sentirse seguros. El aerodeslizador que une los puertos de Larnaca, en Chipre, y Yunie, a 20 kil¨®metros al norte de Beirut, se vio obligado a dar media vuelta cuando se encontraba a punto de alcanzar la costa libanesa. El intenso bombardeo imped¨ªa cualquier intento de acercamiento y, ante el peligro de resultar alcanzado por los proyectiles sirios, el capit¨¢n opt¨® por dar un giro de 180? y emprender la huida de la l¨ªnea de fuego a toda m¨¢quina.
Una vez fuera del alcance de los ca?ones, el Santamar¨ªa, que garantiza la ¨²nica conexi¨®n del sector cristiano con el mundo exterior, apag¨® motores y esper¨® instrucciones de las autoridades portuarias para volver a intentar la maniobra. Una hora m¨¢s tarde, emprend¨ªa de nuevo rumbo a Yunie y lograba amarrar, en medio de la tensi¨®n creada por el bombardeo.
En medio del bombardeo
En menos de media hora, el barco volv¨ªa a partir con los angustiados pasajeros que hab¨ªan esperado en medio de las bombas durante m¨¢s de tres horas. De camino hacia la capital, por calles desiertas y oscuras, s¨®lo iluminadas por los restos ardientes de unos coches alcanzados por los obuses, las emisoras de radio daban ya la noticia de los muertos de Fayadiye y advert¨ªan de un intenso bombardeo en Hadath, el barrio donde est¨¢ situada la embajada de Espa?a. Los disparos se prolongaron hasta el amanecer, especialmente en la l¨ªnea verde que divide los dos sectores de la capital.
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