Brigitte Bardot
La 'sex-symbol' deja la 'viciosa' Saint Tropez
Los carnosos labios de Brigitte Bardot atacan de nuevo. El tel¨®n de fondo, el mismo, los animales. Aunque en esta ocasi¨®n, el blanco de las iras de la c¨¦lebre estrella cinematogr¨¢fica sean el alcalde y la ciudad de Saint Tropez, la segunda casa de la que fuera el m¨¢s importante sex-symbol de los sesenta.
En una carta abierta a Alain Spadu, edil de la citada localidad, B.B. ha denunciado que "el vicio, el exhibicionismo, el dinero y la homosexualidad se han convertido en los s¨ªmbolos de la degradaci¨®n de la ciudad".
Pero la pataleta de B.B. no termina ah¨ª. La actriz francesa ha amenazado con abandonar una ciudad perseguida, a su juicio, por la inmoralidad y los nuevos b¨¢rbaros (turistas). De momento, ya tiene un refugio en Bazoches, una propiedad situada en la regi¨®n parisiense.
Alain Spadu permanece impasible. No oculta la sorpresa y el mal trago que est¨¢ pasando, aunque no ha dudado en desenterrar el hacha de guerra: "No entiendo c¨®mo una persona que lleva una vida de monja de clausura pueda conocer con tanta exactitud lo que pasa en la ciudad. Es cierto que Saint Tropez se muere, pero ?qui¨¦n es el primer responsable de haber tra¨ªdo el vicio y la inmodestia a la ciudad?".
Los m¨¢s avispados, sin embargo, se encargan de buscar otras explicaciones que justifiquen el comportamiento de B.B. La clave parece estar en una colonia de perros abandonados que ha reunido en La Mandrague, su refugio en Saint Tropez.
Las autoridades de la ciudad parecen no aceptar de buen grado la obsesiva defensa de los animales por parte de la actriz y han decidido prohibir la entrada de los chuchos en las playas. Ha sido la gota que ha colmado el vaso. "Esto es un insulto a mi lucha por defender a los animales. Los condones y los desechos humanos cubren la arena de las playas como si de una marea negra se tratara, y ellos preocupados por las cagadillas caninas".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.