Madrid, Capital Cultural 1992, carece de direcci¨®n y proyectos 16 meses despu¨¦s de la designaci¨®n

A poco m¨¢s de dos a?os del comienzo del llamado a?o de Espa?a, el consorcio Madrid. Capital Europea de la Cultura 1992, no se ha constituido como tal y no tiene proyectos, ni presupuesto, ni direcci¨®n, ni sede. El Ayuntamiento, la Comunidad aut¨®noma y el Ministerio de Cultura, los tres organismos responsables, se re¨²nen hoy por primera vez desde que en mayo de 1988 -hace 16 meses- la Comunidad Europea eligiera Madrid como capital culturaL Por las declaraciones previas, no existe definici¨®n pol¨ªtica ni cultural del acontecimiento. Cada parte aporta sus propios proyectos. Adem¨¢s, la disoluci¨®n de las Cortes ha dejado pendiente la ley por la que se ofrecen ventajas fiscales a las empresas privadas que colaboren.

Cada uno de los tres implicados en el consorcio tiene sus propias ideas sobre lo que debe ser Madrid como capital cultural de Europa en 1992. Para Ram¨®n Espinar, consejero de Cultura de la Comunidad, se trata de datar a Madrid de la infraestructura de la que carece: "Faltan bibliotecas, tenemos que poner en marcha un plan que recoja el patrimonio hist¨®rico y queremos terminar una red regional de museos".Joaqu¨ªn ?lvarez de Toledo, concejal de Cultura del Ayuntamiento de centro-derecha, precisa que la capital cultural es una ciudad "y no una regi¨®n o unacomunidad aut¨®noma". La capital cultural de Europa, vista desde el Ayuntamiento, debe servir para acelerar los "proyectos en perspectiva". Que son: la Orquesta de la Villa de Madrid, un corral de comedias donde se representar¨¢ -"no se recrear¨¢"- a los cl¨¢sicos con una compa?¨ªa estable, un museo de escultura -"nos gustar¨ªa hacerlo en la estaci¨®n de Atocha"- y una sala permanente de arte de vanguardia. Estos proyectos se har¨¢n "dentro del consorcio o fuera de ¨¦l", matiza el concejal.

El consejero socialista Espinar advierte que no est¨¢ dispuesto a financiar "el sue?o de una noche de verano" y califica de "barbaridad" la creaci¨®n de una nueva agrupaci¨®n musical: "Est¨¢, comprobado que una orquesta de funcionarios no resulta". A?ade que la apuesta art¨ªst¨ªca de Madrid ya est¨¢ hecha en el Centro de Arte Reina Sof¨ªa, "proyecto que debemos culm¨ªnar para 1992".

El Ayuntamiento de Madrid piensa que el retraso del proyecto es una "herencia" del equipo anterior: "Nosotros hemos convocado esta reuni¨®n en cuanto hemos podido", dice ?lvarez de Toledo. "Es evidente que deb¨ªa haberse convocado antes, pero el equipo anterior no lo hizo". Luis Larroque, del equipo anterior, afirma que no se puso en marcha el proyecto por culpa del centro-derecha, que par¨® los tr¨¢mites en dos ocasiones.

Juan Manuel Garrido, subsecretario del Ministerio de Cultura, opina que no es demasiado tarde: "Los problemas del Ayuntamiento de Madrid han retrasado la puesta en marcha del consorcio". Desde el ministerio, la capital cultural de Madrid debe servir para "fortalecer las infraestucturas existentes". "Tenemos en marcha la ampliaci¨®n del Museo del Prado, la Fundaci¨®n Thyssen, el Teatro de la ¨®pera y la modernizaci¨®n de la Biblioteca Nacional. Son proyectos que dotar¨¢n a Madrid de una gran infraestructura cultural y aqu¨ª tenemos que concentrar los esfuerzos para 1992. No queremos que el consorcio se dedique a inventar cosas, sino a culminar lo que hay", declara.

Tampoco hay coincidencia en cuanto a la financiaci¨®n. El concejal de Cultura cree que Madrid-92 no debe tener una partida asignada sino financiar proyectos concretos. El conse jero de Cultura y el subsecretario creen que el consorcio s¨ª debe contar con un presupuesto propio, aunque peque?o, y canalizar, sobre todo, la colaboraci¨®n de empresas privadas cuando se apruebe la ley de desgravaci¨®n fiscal.

Esta ley, que el anterior Ayuntamiento remiti¨® al ministerio, ha quedado colgada por la disoluci¨®n de las Cortes. Leyes similares ya han sido aprobadas en Barcelona y Sev¨ªlla. Espinar a?ade que para la sede se cuenta con un palacete en Zurbano, 7, que ceder¨¢ el MOPU, aunque la operaci¨®n est¨¢ por realizar.

En la reuni¨®n de hoy, el consorcio deber¨¢ elegir una comisi¨®n directiva -cinco miembros del Ayuntamiento, dos de la Comunidad y dos del ministerio- que empiece a trabajar y, lo que parece m¨¢s dif¨ªcil, deber¨¢ ponerse de actierdo para nombrar a un director ejecutivo, cargo que recaer¨¢ en un profesional de la cultura o en un intelectual de prestigio dispuesto a aceptar el reto.

Jorge Sempr¨²n, ministro de Cultura, Joaqu¨ªn Leguina, presidente de la Comunidad, y el alcalde Agust¨ªn Rodr¨ªguez Sahag¨²n cenaron en privado la semana pasada para intentar acelerar una iniciativa que por diferentes circunstancias pol¨ªticas y por falta de definici¨®n lleva coleando a?o y medio, ha podido saber EL PA?S.

Florencia, capital cultural en 1986, organiz¨® 20 exposiciones de pintura y diez grandes congresos; Amsterdam, en 1987, puso en marcha 60 programas culturales bajo el lema Un futuro para las ideas; Berl¨ªn, en 1988, tambi¨¦n eligi¨® organizar manifestaciones en torno a dos lemas: Berl¨ªn en el coraz¨®n de Europa y Berl¨ªn, taller de lo nuevo, y Par¨ªs, este a?o, ha centrado sus esfuerzos en conmemorar la Revoluci¨®n francesa.