El estadio que aguant¨®
M¨¢s de 60.000 personas se encontraban sentadas en las gradas del estadio Candlestick Park cantando, bebiendo y gritando en medio del ambiente festivo que precede siempre el comienzo de un partido de b¨¦isbol entre los eternos rivales de la bah¨ªa, los Gigantes, de San Francisco, y los Athletics, de Oakland, una confrontaci¨®n parecida a la de un Real Madrid-Atl¨¦tico o un Espa?ol-Barcelona. Media hora antes de que se iniciara el partido, exactamente a las 5.04 hora local, algo extra?o sucedi¨®. Minutos despu¨¦s, los gritos se tornaron en lamentos y la alegr¨ªa en tragedia.El mayor terremoto de la historia de California desde el devastador se¨ªsmo que asol¨® la ciudad en 1906 sacudi¨® el Candlestick Park. Al principio se comenz¨® a o¨ªr un ruido sordo que pronto se convirti¨® en fragor. Lo que al principio se crey¨® que era el eco de miles de patadas de aliento a los equipos que esperaban sentados el comienzo del partido era el indescriptible sonido del terremoto debajo de la tierra.
El c¨¦sped comenz¨® a ondularse, las tribunas de cemento a tambalearse y los postes de la luz a balancearse como si se tratara de las velas de un bergat¨ªn. La luz se cort¨® y durante 15 segundos la multitud aguant¨® aterrorizada sin atreverse a abandonar sus asientos. "Fueron 15 segundos interminables", declar¨® un aficionado. "He vivido 40 a?os en esta zona y no recuerdo nada igual", a?adi¨®.
La multitud prorrumpi¨® en un gigantesco grito de alegr¨ªa cuando la sacudida ces¨® y pudo comprobar que el estadio hab¨ªa aguantado la embestida y no se hab¨ªan producido v¨ªctimas de consideraci¨®n.
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