Una ley garantizar¨¢ a los ciudadanos de la RDA el derecho de viajar libremente al exterior

Egon Krenz, elegido ayer jefe de Estado de la Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana, pese a la rebeli¨®n de 52 miembros de la C¨¢mara del Pueblo, otorg¨® ayer el primero y m¨¢s ansiado de los muchos derechos que la sociedad le reclama, el de viajar libremente. El Politbur¨® del Partido Socialista Unificado (SED, comunista) prometi¨® que antes de final de a?o se habr¨¢ promulgado una ley que conceder¨¢ a todos los ciudadanos el derecho a tener un pasaporte y viajar al extranjero. Antes de que la televisi¨®n anunciara el comunicado, varios miles de personas se hab¨ªan manifestado en Berl¨ªn Oriental frente al Palacio de la Rep¨²blica para mostrar su descontento con la elecci¨®n de Krenz.

Los 18 miembros restantes del Politbur¨® decidieron, adern¨¢s de permitir viajar "sin que se exija tener relaciones familiares y otros requisitos antes necesarios", adelantar casi un mes la reuni¨®n del Comit¨¦ Central del SED, fij¨¢ndola para los pr¨®ximos 8 a 10 de noviembre. En esta reuni¨®n se espera que -aparte de nombrar a los sustitutos de los ca¨ªdos del Politbur¨® Honecker, Hermann y Mielke- se produzcan otras destituciones e importantes nombramientos que dibujen el proyecto de futuro de Krenz.La decisi¨®n de abrir el cerco que se hab¨ªa ido creando sobre los ciudadanos de la RDA, que desde el cierre de la frontera con Checoslovaquia, a principios de mes, ya no pod¨ªan ir a ning¨²n lado, es una de las medidadas m¨¢s urgentes que hace tiempo deb¨ªa haber tomado el r¨¦gimen que se sigue desangrando por la hu¨ªda masiva de sus ciudadanos hacia la RFA. En lo que va de a?o, legal o ilegalmente, cerca de 150.000 alemanes del Este han abandonado el pa¨ªs y el ritmo de salida es cada vez mayor, con un promedio de 500 personas cruzando diariamente la frontera h¨²ngara con Austria.

Espect¨¢culo en directo

Pero la jornada de ayer, que acab¨® con la primera concesi¨®n del r¨¦gimen, hab¨ªa empezado de una manera singular. Cuando a¨²n se o¨ªa el rumor de los cientos de miles de personas que se manifestaron la noche del lunes en Leipzig y otras ciudades pidiendo elecciones libres y criticando al sucesor de Erich Honecker, los ciudadanos de la RDA asistieron a un inesperado espect¨¢culo transmitido en directo por televisi¨®n. La C¨¢mara del Pueblo deb¨ªa votar la propuesta de nombrar a Egon Krenz -desde el mi¨¦rcoles pasado nuevo secretario general del SED- como jefe del Estado y presidente del Consejo de Defensa Nacional.Hecha la propuesta, el presidente de la C¨¢mara, Horst Sindermann, se vio sorprendido al comprobar que no todas las manos se hab¨ªan levantado en favor de la misma. En una r¨¢pida reconversi¨®n democr¨¢tica, anunci¨® que los rebeldes eran 22. Sin embargo, tras consultar con una de las secretarias de la C¨¢mara reconoci¨® que eran 26. "No quisiera falsear el resultado", a?adi¨® con una forzada sonrisa. Otros 26 diputados se abstuvieron, llevando el n¨²mero de insumisos a 52 de los 500 que componen la C¨¢mara del Pueblo.

La segunda votaci¨®n, la relativa a la jefatura del Consejo de defensa Nacional, solo cont¨® con ocho votos negativos y 17 abstenciones. Pese a que se desconoce el nombre de los diputados rebeldes, testigos presenciales indicaron que se trataba de diputados de dos de los partidos domesticados por el SED, la Uni¨®n Democristiana (CDU) y los liberales (LDPD). Estos dos partidos, junto con el Partido Nacional y el de los campesinos, tienen asignados 52 esca?os cada uno.

Los liberales (LDPD), que son los que m¨¢s claramente han significado en los ¨²ltimos d¨ªas su distanciamiento del r¨¦gimen ofreciendo incluso sus esca?os parlamentarios al grupo opositor Nuevo Foro, anunciaron ya antes del pleno, que hab¨ªan dado libertad de voto a los miembros del grupo. "No va a da?ar a la credibilidad del Parlamento", se limit¨® a decir su portavoz parlamentario Rudolf Agsten.

Cuando finalmente consigui¨® acumular el mismo poder que su predecesor, Honecker -el ¨²nico miembro de la C¨¢mara del Pueblo que se ausent¨® de la sesi¨®n alegando motivos de salud-, Krenz tom¨® la palabra primero para ridiculizar a la Prensa occidental que ha asegurado que padece diabetes (y tambi¨¦n alcoholismo) y para advertir a la poblaci¨®n sobre las manifestaciones en la calle, que "incluso si son bienintencionadas", dijo, "siempre conllevan en estos complicados tiempos el peligro de que no acaben tan pac¨ªficamente como comenzaron".

Krenz se refer¨ªa, en parte, al tema de la brutalidad policial, denunciada por la oposici¨®n, en la represi¨®n de las manifestaciones del pasado d¨ªa 7, coincidiendo con la celebraci¨®n del 40? aniversario de la RDA. Wolfgang Herger, presidente de la comisi¨®n de Seguridad de la C¨¢mara del Pueblo, admiti¨® que "la polic¨ªa hab¨ªa usado excesiva fuerza" para dispersar a los manifestantes y que hab¨ªa causado da?os "a inocentes transeuntes". Herger indic¨® que se estan estudiando 83 denuncias por malos tratos.

Sin embargo, pese a la advertencia de Krenz, ayer mismo miles de personas se volvieron a lanzar a la calle en Berl¨ªn Oriental dirigi¨¦ndose al Palacio de la Rep¨²blica e increpando a los diputados que eligieron a Krenz. "Egon, tu elecci¨®n no cuenta porque el pueblo no te ha elegido"; "Fuera Krenz, elecciones libres", cantaban.