Melina Mercuri

Mentar Mikis Theodorakis a Melina Mercuri es casi una provocaci¨®n. El rey de la m¨²sica popular griega y la inolvidable protagonista de Los ni?os del Pireo son ahora enemigos pol¨ªticos irreconciliables.El uno, candidato por el partido conservador Nueva Democracia; la otra, por el socialista PASOK. Ni siquiera se respetan. Melina, toda pasi¨®n, ministra de Cultura durante los ocho a?os de Gobierno de Andreas Papandreu, casi pierde los papeles: "Bah, bah, su actitud es horrible, irresponsable, rid¨ªcula, aventurera. Si usted se lo toma en serio, yo no puedo. Le quer¨ªa mucho, y le seguir¨¦ queriendo cuando sea desgraciado. Por eso me parece tan triste lo que hace".

Con 64 a?os reci¨¦n cumplidos, conserva el dinamismo que le ha hecho famosa. Pero su rostro refleja las huellas de una grave enfermedad, aunque parece sensiblemente recuperada tras haberse sometido a una operaci¨®n quir¨²rgica en Nueva York. Melina sonr¨ªe, con esa boca enorme que conquist¨® a millones de espectadores, con esos ojos que pueden fulminar, pero que se moderan con ternura. Y arrolla con una pasi¨®n que es m¨¢s de actriz que de pol¨ªtica.

Recuerda con nostalgia el "magn¨ªfico equipo" de ministros que formaba con Jorge Sempr¨²n (Espa?a) y Jack Lang (Francia), asegura que Fran?ois Mitterrand pasar¨¢ a la historia por tomarse en serio la cultura y expresa su admiraci¨®n y agradecimiento por Andreas Papandreu, porque "sin ¨¦l no habr¨ªa un gran partido socialista en Grecia".

Dice que su casa, situada en las estribaciones de la colina atenlense de Licabetus, frente a un bosque de pinos, es la primera que ha tenido en muchos a?os. Es amplia, de dos plantas, mediterr¨¢nea, se?orial, con muebles elegantes y muchos libros de arte. Se ven tambi¨¦n numerosos v¨ªdeos de ¨®peras -"a Jules le entusiasman"- Su marido, el director de cine Jules Dassin, hu¨¦sped involuntario de las listas negras de Hollywood en los tiempos del siniestro senador McCarthy, est¨¢ ahora en Par¨ªs, tal vez para alejarse del tremendo barullo de la campa?a electoral griega. Y Melina tiene todo su tiempo para hablar de pol¨ªtica y de cultura.

Primero de pol¨ªtica: "El PASOK gobernar¨¢ si obtiene el 42% de los votos, y este objetivo est¨¢ a su alcance". "No ha habido catharsis [depuraci¨®n], sino tan s¨®lo un juego pol ¨ªtico que finalmente ha actuado como un bumer¨¢n para los comunistas y la derecha. Se han vuelto locos, incluso han llegado a decir que hemos matado a Bakoyanis". [PavIos Bakoyanis, diputado y portavoz del partido conservador Nueva Democracia, fue asesinado a tiros en Atenas por un comando terrorista, el 26 de septiembre, cuando se dirig¨ªa a su oficina].

Despu¨¦s habla de cultura y de la pol¨ªtica de la cultura: "He trabajado mucho por la descentralizaci¨®n, se han creado 11 teatros municipales, hay 30 exposiciones it¨ªnerantes que muestran la Grecia de ayer y de hoy por todo el mundo, hemos promovido el cine y la pintura para embellecer las ciudades, convertimos Atenas en la capital cultural de Europa en 1985, luchamos por traer a esta ciudad los Juegos Ol¨ªmpicos de 1996...".

?Y los m¨¢rmoles, las famosas esculturas del friso de Fidias que lord Elgin se llev¨® del Parten¨®n al Museo Brit¨¢nico de Londres? Melina no renuncia a recuperarlos y promete seguir luchando con este objetivo sea cual sea el pr¨®ximo Gobierno. "Comenc¨¦ el Museo de la Acr¨®polis", recuerda, "que ser¨¢ el m¨¢s hermoso del mundo. Y en ¨¦l habr¨¢ una gran sala vac¨ªa, esperando el gran d¨ªa". En Topkapi, ella intentaba robar un maravilloso pu?al de esmeraldas del antiguo palacio de los sultanes en Estambul. Y fallaba. Todo el mundo le desea ahora a Melina mejor suerte que en la famosa pel¨ªcula.