Faranduri: "La sensibilidad cultural de la derecha es nula"
La hija espiritual y art¨ªstica de Theodorakis defiende el compromiso pol¨ªtico del artista
"La sensibilidad cultural de la derecha es nula", asegura Mar¨ªa Faranduri, de 41 a?os, sagitario, hija, espiritual y art¨ªstica del genial Mikis Theodorakis, pese a lo cual ambos concurrieron, como independientes, en frentes opuestos a las elecciones legislativas del pasado domingo: ella, en las listas del socialista PASOK; ¨¦l, en las del partido conservador Nueva Democracia. Mar¨ªa, en una amplia entrevista mantenida en su casa de Ekali, en las afueras de Atenas, dialoga sobre las siempre complejas relaciones entre el arte y la pol¨ªtica.
ENVIADO ESPECIALMar¨ªa, casada con Telemakos Jitiris, jefe de prensa del l¨ªder socialista griego, Andreas Papandreu, y madre de un ni?o de cuatro a?os, Stefanos, reconoce que siempre pens¨® que el arte est¨¢ en conflicto con el poder, y que s¨®lo se decidi¨® a entrar en la pol¨ªtica activa al contemplar el penoso espect¨¢culo de la divisi¨®n de la izquierda en su pa¨ªs. Se ir¨¢, asegura, en cuanto pueda; apenas vea una luz de esperanza. Hasta entonces, compatibilizar¨¢ su barrera art¨ªstica con sus obligaciones como diputada y luchar¨¢, junto a los otros artistas presentes en el Parlamento, para que el Estado convierta la cultura, especialmente la popular, en una de las m¨¢ximas prioridades.Pregunta. ?Se siente como una embajadora cultural de Grecia?
Respuesta. No me gustan las etiquetas, pero es cierto que llevo 20 a?os cantando fuera de Grecia, en ¨¦pocas incluso dif¨ªciles, como durante la dictadura. Con mi esfuerzo y el de otros m¨²sicos se ha difundido lo mejor de la canci¨®n culta de Grecia, tanto de Theodorakis como de Hachidakis y otros. Ha sido una difusi¨®n que no ha pasado, fundamentalmente, a trav¨¦s de las grandes casas discogr¨¢ficas, sino por los conciertos.
P. El nombre de Theodorakis est¨¢ indisolublemente unido al suyo, aunque ahora ambos est¨¦n enfrentados por militar en campos pol¨ªticos distintos. Pero ?cu¨¢l es ahora mismo su opini¨®n de ¨¦l?
R. Mikis, como m¨²sico, me ha marcado todo mi camino art¨ªstico. He trabajado con ¨¦l desde los 16 a?os, coincidiendo con uno de sus per¨ªodos m¨¢s creativos, al que sigui¨® el m¨¢s combativo. Viv¨ª muy cerca de ¨¦l, como int¨¦rprete de sus canciones y casi como miembro de su familia. Es cierto lo que dice: que fue mi padre espiritual. Eso, no significa que no tuvi¨¦ramos controversias. Era su hija y siento que lo soy todav¨ªa, porque la relaci¨®n fue muy profunda, cal¨® hasta lo m¨¢s hondo.
P. ?Y en el terreno pol¨ªtico?
R. Como persona libre que es, Mikis ha tomado sus decisiones. Yo nunca he estado relacionada con ning¨²n partido, mientras que ¨¦l fue diputado comunista. Tambi¨¦n yo estaba integrada ideol¨®gicamente en la izquierda, sin afiliaci¨®n concreta. Y ah¨ª sigo.
P. ?Qu¨¦ opina de una eventual uni¨®n de la izquierda?
R. S¨®lo la unidad de todas las fuerzas de izquierdas y democr¨¢ticas puede abrir nuevos horizontes para Grecia. Estas fuerzas, en mi pa¨ªs, son el PASOK, la Alianza Democr¨¢tica, los partidos comunistas y el resto de la izquierda; y se relacionar¨¢n con las fuerzas progresistas, democr¨¢ticas, renovadoras y de izquierdas de toda Europa, es decir, la llamada euroizquierda.
P. ?No es una pena que Theodorakis se quede al margen de este proceso?
R. Mikis ha sido un gran combatiente, un s¨ªmbolo. Ha hecho su elecci¨®n, y la historia y la gente le juzgar¨¢n
P. ?No ser¨ªa mejor que los artistas hicieran pol¨ªtica s¨®lo desde el arte, y no desde la pol¨ªtica activa?
R. Siempre pens¨¦ as¨ª, por creer que el arte est¨¢ en conflicto agudo con el poder y, por s¨ª mismo, tiene su propia ideolog¨ªa, que choca con la del poder. Pero yo siempre fui una artista comprometida, mis canciones acompa?aron y ayudaron al movimiento democr¨¢tico en Grecia. Mi m¨²sica simboliz¨® la protesta, el combate.
Canci¨®n de altura
P. ?Por qu¨¦? ?Por su contenido o por su utilizaci¨®n?R. La paradoja fue que la nueva canci¨®n griega, en s¨ª misma, no era panfletaria, partidista en sentido estricto, sino que se apoyaba en la obra de los grandes poetas nacionales, que recog¨ªan, como en el caso de Rizo, los grandes combates populares desde una, perspectiva art¨ªstica. Lo panfletario trascend¨ªa a lo est¨¦tico. Otro caso es Seferis, que no fue un hombre de izquierdas, sino que ten¨ªa un profundo pensamiento existencial. O Elytis, autor de lo que se considera como la biblia de Grecia, que expresaba en su poes¨ªa una filosof¨ªa de la vida propia del espacio del mar Egeo, con la luz como elemento primordial. De todos ellos, y de otros, se nutri¨® la nueva canci¨®n, y por eso tuvo muchos quilates.
P. ?Y c¨®mo se produce el tr¨¢nsito desde esta concepci¨®n a la participaci¨®n en la pol¨ªtica activa, como candidata de un partido?
R. Cuando cay¨® la dictadura, mi figura se proyect¨® como la cantante de la victoria. En los a?os negros, cant¨¦ por todo el mundo y el dinero que reun¨ª se destin¨® a la resistencia. As¨ª se entiende que el PASOK y la Alianza Democr¨¢tica me propusieran ser candidata al Parlamento, como lo hab¨ªan hecho ya en 1985. He aceptado ahora al ver la crisis y la ruptura en el movimiento democr¨¢tico.
P. ?Tambi¨¦n porque ahora el PASOK ya no est¨¢ en ese poder con el que el arte suele estar en conflicto?
R. Tal vez por eso, pero sobre todo porque creo en el valor de la unidad de todas las fuerzas democr¨¢ticas contra las conservadoras.
P. ?Es que Nueva Democracia no es democr¨¢tica?
R. Claro que s¨ª, pero creo que hay dos caminos para Grecia y para Europa: el conservador y el de la izquierda progresista y socialista, que es el m¨ªo, pese a que se hayan cometido grandes errores.
P. ?Se puede hablar de una orientaci¨®n ideol¨®gica de la cultura popular? Porque se tiende a asociarla con la izquierda.
R. La cultura popular necesita ser protegida, y este tipo de sensibilidad es m¨¢s privilegio de una pol¨ªtica de izquierdas. No es que la derecha persiga al arte, sino que es m¨¢s sensible a lo que entra por los circuitos comerciales.
P. ?Se olvida el poder pol¨ªtico de la cultura?
R. La cultura debe ser una de las m¨¢ximas prioridades del Estado. Y las del PASOK han sido otras. Pero como va a haber muchos artistas en el Parlamento, trabajaremos por hacer realidad nuestro sue?o, independientemente del partido en que estemos integrados.
P. En la pasada campa?a electoral, la derecha intent¨® hacerse con la bandera de la cultura.
R. Es algo que juega con la confusi¨®n. No hay que olvidar que la m¨²sica que yo interpreto estaba prohibida en la ¨¦poca de la derecha pura y dura. En 1979, con Nueva Democracia en el poder, se prohibi¨® un concierto m¨ªo en un barrio proletario de Atenas. Y tambi¨¦n fui vetada en la televisi¨®n, me metieron en la lista negra. Creo que la sensibilidad cultural y social de la derecha es nula, aunque en Grecia los socialistas, a pesar de tenerla, no lograron hacer gran cosa, porque tuvieron otras prioridades.
Babelia
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