Beirut oeste aguarda expectante la llegada del nuevo presidente liban¨¦s, Ren¨¦ Muawad
Todo est¨¢ preparado para que el nuevo presidente de L¨ªbano, Ren¨¦ Muawad, llegue -seg¨²n se piensa, aunque no ha sido confirmado oficialmente- a un Beirut oeste que aguarda con ansiedad, aunque cada vez m¨¢s confiado, el nombramiento del nuevo Gabinete. La casa que Muawad ocupar¨¢, llamada edificio Najib Salha, est¨¢ siendo arreglada.
ENVIADA ESPECIAL,En realidad, pertenece a un supermillonario liban¨¦s llamado Rafik el Hariri, que hizo su fortuna en Arabia Saud¨ª, en donde vive, y que la ha puesto a disposici¨®n del flamante mandatario.Entretanto, en el sector este, el general Michel Aoun contin¨²a poniendo a prueba las paredes de su burbuja, cada vez m¨¢s delgadas. En pleno desmadre megalomaniaco, ayer convoc¨® a la Prensa libanesa -con gran participaci¨®n de informadores del este, que deben sus empleos al propio general- para contarle que lamenta de nuevo Io ocurrido en Bkirki con el patriarca Sfeir". Un centenar de seguidores de Aoun asaltaron en la noche del domingo la residencia del patriarca maronita y le humillaron por haber apoyado a Muawad. Seg¨²n Aoun, sin embargo, Io ocurrido ha sido excesivamente inflado por la Prensa". Olvid¨® a?adir canallesca, pero su declaraci¨®n fue acog¨ªda con escalofr¨ªos por los fot¨®grafos que deben cubrir las manifestaciones -cada vez m¨¢s mon¨®tonas, a decir verdad- que realizan sus seguidores.
La haza?a de ayer consisti¨® en querer tomar la emisora de radio libanesa, cosa que no fue posible porque los trabajadores se encerraron por dentro. No deja de ser curioso, porque la citada radio pertenece al partido Kataeb -falangista, superderecha-, aliado hasta ahora del general Aoun. Su l¨ªder, Samir Geagea, se desmarca cada vez m¨¢s de Aoun, y lo mismo hacen los medios de comunicaci¨®n que hasta ahora le han sostenido.
El propio Aoun califica sarc¨¢sticamente a la Voz de L¨ªbano como la Voz de Taif, en referencia a la ciudad saud¨ª donde se alcanz¨® el acuerdo que desemboc¨® en la elecci¨®n de Muawad, y sabe que un medio tan promaronitacomo L'Orient le Jour ha dejado de poner su nombre en grandes titulares para relegarlo a los peque?os, despu¨¦s de Muawad.
Una manifestaci¨®n ante la Embajada francesa y diversas algaradas pusieron ayer una nota de color en un Beirut este cerrado de nuevo por huelga general, aunque en esta ocasi¨®n algunos comerciantes uue est¨¢n cansados de entregarle sus beneficios a la causa de Aoun se han atevido a abrir. Mal les ha ido, porque, seg¨²n informaciones locales, algunos de ellos han recibido como castigo una buena tunda a cargo de estos robustos muchachos que se creen protagonistas de la intifada, cuando para cualquier espectador espa?ol en realidad parece que est¨¦n concentrados en la plaza de Oriente.
Aoun ha calificado p¨²blicamente a Muawad de "ex parlamentario" y sigue aferrado a su discurso acerca de la ilegalidad del presidente y del Parlamento que lo eligi¨®. Cuando una periodista del sector este, que evidentemente le admira, le pregunt¨® si no teme que puedan matarle, el general infl¨® el pecho y, mirando alrededor con fr¨ªo aplomo, que es su principal caracter¨ªstica, replic¨®, m¨¢s o menos: "?sos son los riesgos del oficio", tras lo cual recibi¨® una salva de aplausos.
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