La fusi¨®n de Ceselsa e Inisel exigir¨¢ compras p¨²blicas por valor de 100.000 millones de pesetas

La nueva empresa nacional de electr¨®nica que surja de la fusi¨®n entre Ceselsa e Inisel exigir¨¢ un plan de compras p¨²blicas por importe de 100.000 millones de pesetas, seg¨²n los datos manejados en la negociaci¨®n que las dos empresas involucradas en el proyecto mantienen estos d¨ªas con el Ministerio de Industria. Tanto Ceselsa como Inisel se muestran conformes con el perfil accionarlal de la futura compa?¨ªa que ha dise?ado la Administraci¨®n, en virtud del cual ninguna de las dos empresas fusionadas tendr¨¢ mayor¨ªa de capital sobre la otra dentro de la sociedad resultante.

La fusi¨®n de Ceselsa e Inisel implicar¨ªa el desbloqueo de los contratos procedentes del Ministerio de Defensa y del Ministerio de Transportes, que llevan cerca de dos a?os paralizados El plan de viabilidad que ahora se discute tiende a la creaci¨®n de una compa?¨ªa con una cartera m¨ªnima de pedidos de 100.000 millones de pesetas en un plazo de cuatro a?os, de acuerdo con el per¨ªodo medio de ejecuci¨®n de los grandes contratos en el sector,Bajo este compromiso, Ceselsa, la empresa controlada y presidida por Jos¨¦ Antonio P¨¦rez-Nievas, ha llegado a un acuerdo de voluntades con el Instituto Nacional de Industria (INI), que ha exigido, por otro lado, la mediaci¨®n del Ministerio de Industria. La intervenci¨®n del ministro Claudio Aranzadi fue acogida satisfactoriamente por Ceselsa a mediados de septiembre, lo que permiti¨® reconducir unas negociaciones que antes del verano parec¨ªan totalmente rotas.

El proyecto sobre el que ahora se trabaja parte de la configuraci¨®n de una nueva sociedad, a la que tanto Ceselsa como Inisel han de aportar todos sus activos y en la que los dos socios industriales mantendr¨¢n una participaci¨®n cada uno del 40%, quedando el 20%. restante en manos de terceros; principalmente, entidades financieras privadas.La equidad impuesta por el ministerio ha vuelto a abrir la mesa de negociaci¨®n, pero, por contra, ha provocado una amplia serie de inc¨®gnitas sobre el futuro de la empresa conjunta que exigen un amplio per¨ªodo de negociaci¨®n. Ni Ceselsa ni Inisel se atreven todav¨ªa a lanzar las campanas al vuelo. Fuentes del INI han se?alado: "Estamos ante un proceso dif¨ªcil de negociaciones que lleva su tiempo". En relaci¨®n al desarrollo de estas negociaciones, los citados medios del holding p¨²blico mantienen que "el INI no est¨¢ dispuesto a radiar las jugadas, por lo que s¨®lo podemos decir que mantenemos conversaciones para explorar posibilidades de acuerdo".

Por su parte, Ceselsa ha hecho gala de un hermetismo similar al del, INI, asegurando que efectivamente existen negociaciones, pero recordando a la vez que "si la fusi¨®n no es bien orientada o se mantiene la paralizaci¨®n de contratos, existe el riesgo de que desaparezca el estilo empresarial de Ceselsa, consistente en obtener excelentes resultados a trav¨¦s de desarrollos tecnol¨®gicos espa?oles". Fuentes de la empresa privada consideran que el know how (tecnolog¨ªa industrial) de Ceselsa ha constituido un hito en la industria electr¨®nica de defensa y pretenden que la nueva compa?¨ªa responda a los mismos objetivos.

En medios oficiales relacionados se asegura que los responsables de la empresa privada han mostrado una actitud mucho m¨¢s abierta que hace unos meses, pero tambi¨¦n a?aden que Ceselsa ha solicitado "varias condiciones previas como garant¨ªa del proyecto".

Entre los requisitos destaca la necesidad de que la nueva compa?¨ªa se convierta en el ¨²nico interlocutor del Estado dentro del sector, lo que implica una divisi¨®n clara de funciones con el resto de las empresas de plataforma de defensa que dependen del INI; Construcciones Aeron¨¢uticas, SA (CASA), Baz¨¢n y Santa B¨¢rbara.

Otro aspecto b¨¢sico de la negociaci¨®n se centra en la gesti¨®n efectiva de la nueva sociedad, que Ceselsa considera que ha de residir en el grupo privado. El INI no ha querido pronunciarse al respecto, aunque es l¨®gico pensar que el silencio del holding p¨²blico no representa la aprobaci¨®n t¨¢cita de los planteamientos realizados por la empresa privada.

Desde el punto de vista financiero, cualquier acuerdo de integraci¨®n necesitar¨¢ de un arbitraje externo y Ceselsa ha exigido que la posible valoraci¨®n favorable a la empresa privada sea compensada por Inisel con aportaciones en efectivo. De esta forma Ceselsa trata de asegurar unos recursos financieros que permitan mantener la retribuci¨®n a sus m¨¢s de 3.000 accionistas. A diferencia de Inisel, la empresa privada cotiza en bolsa desde hace dos a?os y la fusi¨®n supondr¨¢ su transformaci¨®n en una sociedad holding, cuyo ¨²nico activo ser¨¢n las acciones equivalentes al 40% de, la futura empresa conjunta.

Oposici¨®n sindical

La operaci¨®n tropieza, por otra parte con problemas de car¨¢cter laboral, ya que la direcci¨®n de Inisel ha expuesto a los representantes de los trabajadores que, a partir de este momento, no ser¨¢n renovados los contratos temporales. El primer caso se producir¨¢ hoy mismo en la f¨¢brica de Aranjuez, cuyo comit¨¦ de empresa ha hecho p¨²blico un comunicado en el que se?ala que esta medida responde a "un plan premeditado por agentes externos a la propia empresa, para servir a intereses de una pol¨ªtica m¨¢s global, en la direcci¨®n de la posible fusi¨®n con Ceselsa y la posterior venta a una multinacional extranjera". La no renovaci¨®n de contratos puede afectar a anos 100 trabajadores temporales de Inisel.