El Ejercito de Sri Lanka mata e incinera al guerrillero m¨¢s buscado
El enemigo p¨²blico n¨²mero uno del Gobierno de Sri Lanka, Rohana Wijeweera, fundador y m¨¢ximo dirigente desde 1971 de la guerrilla urbana Frente de Liberaci¨®n Popular (JVP), "result¨® muerto en un encuentro con las fuerzas de seguridad" seg¨²n la versi¨®n oficial difundida ayer en Colombo. El cad¨¢ver de Wijeveera, junto con el de uno de sus lugartenientes muerto en la misma acci¨®n, fue incinerado inmediatamente por el Ej¨¦rcito, en aplicaci¨®n de las leyes de emergencia vigentes en Sri Lanka. La noticia ha sido recibida con m¨¢s que incredulidad en esta isla del oc¨¦ano ¨ªndico.
El JVP, que se reclama marxista y nacionalista cingal¨¦s a ultranza, ha desarrollado durante los ¨²ltimos dos a?os y medio una campa?a de terror selectivo que puso contra las cuerdas primero al ex presidente Junius Jayewardene y despu¨¦s a su actua.l sucesor Ranasinghe Premadasa. Se atribuyen al Frente de Liberaci¨®n Popular no menos de 800 asesinatos en lo que va de a?o y p¨¦rdidas multimillonarias en sabotajes industriales.En su informativo nocturno, la televisi¨®n, controlada, al igual que la radio, por el Gobierno, dio la noticia que ha galvanizado a Sri Lanka en tercer o cuarto lugar, tras las habituales informaciones oficiales. La ¨²nica imagen visible del jefe del JVP (Janata Vimukti Peramuna, en cingal¨¦s) era, una foto fija en la que llevaba barba y se tocaba con boina, a la manera del Che Guevara. Wijeweera, un antiguo estudiante de Medicina en la universidad Wijeweera Lumumba de Mosc¨², pasaba por ser el hombre m¨¢s clandestino de este pa¨ªs. La versi¨®n oficial de los hechos, facilitada en solemne conferencia de prensa por los ministros de Defensa y Asuntos Exteriores, ha sido recibida con escepticismo. Seg¨²n los m¨¢ximos responsables de las fuerzas de seguridad, Wijeweera, de 47 a?os, fue detenido el pasado domingo en Kandy, antigua capital de Ceil¨¢n, y trasladado a Colombo para ser interrogado.
Colaboraci¨®n
Ya en Colombo, y siempre seg¨²n esta versi¨®n, colabor¨® con sus captores, hizo un llamamiento grabado en v¨ªdeo al cese de la violencia y se avino a mostrar al Ej¨¦rcito el cuartel general de su organizaci¨®n en la capital de Sri Lanka. Fue all¨ª, sigue el relato oficial, donde entre documentos comprometedores, armas y dinero, hizo un intento de escapatoria que fue detenido a tiros. Desaparecido el jefe guerrillero, su esposa y sus cuatro hijos se encuentran bajo m¨¢xima protecci¨®n, afirma el Gobierno.La muerte del l¨ªder del JVP es agua de mayo para el presidente Premadasa, en el poder desde diciembre pasado tras ganar unas re?idas elecciones. Sus reiteradas ofertas de negociaci¨®n al JVP para que depusiera las armas hab¨ªan ca¨ªdo siempre en el vac¨ªo, seg¨²n fuentes oficiales por la intransigencia del terrorista fallecido.
El Frente hizo su aparici¨®n espectacular en 1971, con un asalto a m¨¢s de un centenar de comisar¨ªas en el sur de Sri Lanka. Sirimavo Bandaranaike, entonces primera ministra, desencaden¨® una represi¨®n feroz que se cobr¨® m¨¢s de 10.000 vidas. El JVP se sumergi¨® entonces para aparecer recompuesto en 1987. La desaparici¨®n de Wijeweera deja al JVP sin centro de referencia y, por tanto, le hace m¨¢s vulnerable a las presiones gubernamentales y a las luchas intestinas.
Los otros dos grav¨ªsimos frentes abiertos, el econ¨®mico y la guerrilla separatista tamil, est¨¢n en una fase de coma controlado por Premadasa.
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