Una rosa amarga

Sin el humor y la energ¨ªa de Bette Midler, La rosa ser¨ªa menos rosa. Cuando Aaron Russo le recomend¨® leer este gui¨®n, acept¨® y le sugiri¨® que la convirtiese en leyenda.Tan fea y temperamental como Barbara Streissand y de gesto tan sensual y, exagerado como Mae West, Bette Midler fue rescatada por Nlark Rydell de los bajos fondos, de Nueva York para que interpretara este pel¨ªcula. Era su deb¨², y los productores no aceptaban que una cantante de cabar¨¦ fuera elegida para un papel basado en la biograf¨ªa de Janis Joplin. El director gan¨® la disputa. En realidad no se trataba de la verdadera biograf¨ªa de Janis, ni Bette Midler era s¨®lo una cantante feucha de cabar¨¦ apreciada por una escasa troupe de intelectuales marginales. Midler hab¨ªacorrido todas las grandes eluda des de Am¨¦rica y pose¨ªa ese don e arrastrar multitudes de los genios como Piaf o Al Johnson

La biograf¨ªa de la malograda -cantante s¨ª era el material de partida, pero Mark Rydell se encarg¨® de cambiar el tono del gui¨®n y hacerlo extensivo a toda una generaci¨®n de personajes que vivieron hasta el l¨ªmite el lema de "drogas, sexo y rock and roll". Adem¨¢s de Janis Joplin, Jim Morrison, Jimmy Hendrix... representaban a esa generaci¨®n que a finales de los sesenta encontr¨® en el rock su forma de expresi¨®n m¨¢s sincera.Alcohol, drogas y estimulantes fueron sus verdaderos acompa?antes en ese galope solitario que les hac¨ªa concebir la vida como un campo de batalla. El les impulsaba a esa b¨²squela Alcesante del ¨¦xito hasta dar con los huesos en el escenario.

Todo esto es La rosa. En Bette Midler radica el ¨¦xito de la pel¨ªcula, que mereci¨® la nominaci¨®n al Oscar por la mejor interpretaci¨®n femenina. No estar¨¢ mejor en ninguna de sus posteriores pel¨ªculas. Todo lo exagerado de su personalidad lo volc¨® en este papel con el que se identificaba. S¨®lo exigi¨® que se incluyeran las canciones "en a man loves a woman y Stay with me, por ser las que m¨¢s la hac¨ªan sentirse ella misma. Lejos del tono documental de acontecimientos pop-rock que relatan Nashville o Woodstock, Mark Rydell renovaba el musical dram¨¢tico con las muchas cualidades de esta rosa, que resulta demasiado amarga.

La m¨ªtica indumentaria romana sustituye a la parafernalia rock en La espada del vencedor, un petlum dirigido por Terence Young (antes de encargarse de Agente 007 contra el doctor No), que excarva en los decorados de cart¨®n-piedra de los estudios de Cine-Citt¨¢ (los mismos de Quo Kadis y R¨®mulo y Remo), para construir esta artificial batalla entre romanos y albaneses.

La rosa se emite a las 23.00, y La espada del vencedor, a las 15.00.