El guardabosques de Bratislava
Alexander Dubcek demostr¨® ayer en Praga que existe la justicia hist¨®rica
Alexander Dubcek, el l¨ªder de la primavera de Praga, protagoniz¨® ayer un retorno triunfal a la capital checoslovaca. Tras m¨¢s de dos d¨¦cadas de pr¨¢ctico arresto domiciliario, objeto de insultos y calumnias de los medios oficiales, descalificado por la c¨²pula del que fuera su partido, Dubcek demostr¨® ayer que s¨ª existe algo as¨ª como la justicia hist¨®rica.
Los normalizadores, los estalinistas, los acomodaticios y oportunistas, aquellos que mandaron a Dubcek de guardabosques cerca de Bratislava, que expulsaron del partido comunista a medio mill¨®n de militantes, a las mejores cabezas de aquella revoluci¨®n frustrada por los tanques, est¨¢n acabados. Su m¨¢ximo representante, Milos Jakes, acosado por una multitud que reci¨¦n conquistada la libertad de manifestarse aclama a Dubcek.Ha callado muchos a?os este eslovaco que el lunes pr¨®ximo cumplir¨¢ 68 a?os. Militantes de la oposici¨®n que se han expuesto m¨¢s que ¨¦l en estos a?os se lo reprochan. Es dif¨ªcil predecir cu¨¢l ser¨¢ su papel en la nueva Checoslovaquia. Su proyecto de reforma del socialismo real ha quedado superado en la pr¨¢ctica por el desmoronamiento de este sistema. En todo caso, ayer el pueblo en Praga demostr¨® que es todo un s¨ªmbolo de la soberan¨ªa popular checoslovaca.
Fue aclamado por centenares de miles de personas en la hist¨®rica plaza de San Wenceslao. Habl¨® ante la multitud durante tan s¨®lo tres minutos. "Me alegro de estar con vosotros, os quiero y lo sab¨¦is. Despu¨¦s de tanto tiempo, estoy aqu¨ª para ponerme a la cabeza del pueblo que quiere hacerse o¨ªr".
El que fuera pionero de las reformas del socialismo retorna a la vida p¨²blica cuando las ideas que ¨¦l propugn¨® se han impuesto ya en todos los pa¨ªses (cinco) que participaron en la invasi¨®n que acab¨® en aquel tr¨¢gico agosto de 1968 con su gran proyecto. Aquellos que, aupados al poder por los carros de combate extranjeros, reinstauraron un r¨¦gimen posestalinista, r¨ªgido y represivo, y marginaron a todo el equipo de reformistas en torno a Dubcek, caen ahora bajo la presi¨®n de las masas en las calles.
Dubcek naci¨® en Uhrovec, Eslovaquia, el 27 de noviembre de 1921, tres meses despu¨¦s de que sus padres regresaran de Estados Unidos, pa¨ªs al que hab¨ªan emigrado en 1911. Tras intensa actividad pol¨ªtica en Checoslovaquia, Alexander Dubcek fue nombrado primer secretario del partido comunista checoslovaco el 5 de enero de 1968, el mismo a?o en que las tropas de cinco pa¨ªses del Pacto de Varsovia invadieron el pa¨ªs para poner fin a las reformas democr¨¢ticas. ?l y otros dirigentes fueron detenidos y conducidos a Mosc¨², siendo obligados a una negociaci¨®n que concluy¨® con la firma de un documento que puso fin al proceso liberalizador del r¨¦gimen.
Destituido de su cargo, Dubcek fue durante un breve per¨ªodo presidente del Parlamento, embajador en Turqu¨ªa y, expulsado luego del partido comunista, se vi¨® obligado a trabajar como empleado de una empresa de explotaci¨®n forestal en las afueras de Bratislava. Durante casi veinte a?os ha evitado manifestarse p¨²blicamente sobre la situaci¨®n del pa¨ªs, pero desde hace dos a?os ha vuelto a reaparecer y ha concedido algunas entrevistas a medios de comunicaci¨®n occidentales. Hace un a?o recibi¨® el doctorado "honoris causa" de la universidad italiana de Bolonia y las autoridades checas le permitieron viajar a Italia, donde se entrevist¨® con el secretario general del Partido Comunista Italiano (PCI), Achille Occhetto, y con Juan Pablo Il. No fue autorizado a viajar a Espa?a el pasado verano.
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