Rodr¨ªguez de la Borbolla: "El PSOE est¨¢ encerrado en s¨ª mismo"
El presidente andaluz cree que es el momento para profundizar en los puntos de encuentro con UGT
El presidente de la Junta de Andaluc¨ªa, Jos¨¦ Rodr¨ªguez de la Borbolla, considera que su partido, el PSOE, est¨¢ encerrado en s¨ª mismo y transmite cierta sensaci¨®n de autosuficiencia. Opina que, tras los resultados de las ¨²ltimas elecciones, hace falta una pol¨ªtica de fondo dirigida a mejorar la calidad de vida en las ciudades y a satisfacer las exigencias sociales de las capas urbanas. Para el presidente andaluz ahora, una vez garantizados otros cuatro a?os de Gobierno para los socialistas, ha llegado el momento de que PSOE y UGT piensen en profundizar cu¨¢les son sus puntos de encuentro.
Pregunta. El presidente de la Comunidad de Madrid, Joaqu¨ªn Leguina, ha dicho que el 29 de octubre el contribuyente urbano ha castigado al PSOE.Respuesta. Pienso que el deterioro del voto urbano ha sido relativo. No es s¨®lo que estos votantes se hayan alejado de nosotros. Hemos sido nosotros tambi¨¦n los que nos hemos alejado de los l¨ªderes que crean opini¨®n en ese sector. Ante ello, hay que hacer dos tipos de pol¨ªtica: la de fondo, dirigida a la satisfacci¨®n de las exigencias sociales de esos sectores, y otra tendente a conectar con sus l¨ªderes de opini¨®n, tanto en las capas mediourbanas como en la de los trabajadores industriales.
P. Ustedes han perdido respecto a las elecciones de 1986 m¨¢s de 130.000 votos en Andaluc¨ªa. Y en Sevilla concretamente unos 30.000.
R. En Andaluc¨ªa el decrecimiento del voto urbano a favor del PSOE ha sido menor que en otros sitios. En general, aqu¨ª se vota a los socialistas y, por supuesto, hay cosas que suman y otras que restan. En Andaluc¨ªa ha habido m¨¢s cosas que suman. Pero es cierto que hay una capa de votantes progresistas que sucesivamente desde 1977 han ido depositando su confianza o encontrando su mediaci¨®n en distintas formaciones pol¨ªticas, ll¨¢mese antes UCD, despu¨¦s el Partido Andalucista (PA), m¨¢s tarde el PSOE, luego Izquierda Unida y ya, en las europeas, de nuevo el PA y ahora, en las generales, otra vez IU. Es un sector que no ha encontrado definitivamente su mediador pol¨ªtico.
P. ?Piensa que este electorado es recuperable para el PSOE?
R. S¨ª. Hace falta una pol¨ªtica de fondo dirigida a mejorar la calidad de vida en las ciudades y a satisfacer las exigencias de sus capas sociales. Y no s¨®lo dineraria. En el 82 el PSOE era el partido de la ilusi¨®n gen¨¦rica por el cambio y ahora somos el partido de la seguridad pr¨¢ctica, de la tranquilidad en la evoluci¨®n de la sociedad. Yo no me quedo ni con uno ni con otro. Pienso que lo que hay que recuperar es la ilusi¨®n concreta. En suma, la ilusi¨®n por el avance y por el cambio cotidiano en todas las cosas. No podemos ofrecer s¨®lo realismo y sacrificio.
P. El PSOE, no obstante, tiene asegurado en Andaluc¨ªa el voto rural. ?Qu¨¦ pasa en las ciudades que no pasa en los pueblos? ?Acaso hay un voto cautivo debido al sistema de protecci¨®n de los desempleados agr¨ªcolas?
R. No creo que haya voto cautivo. Errar¨ªamos nosotros mismos si crey¨¦semos que existe un voto del que partir. En el medio rural se ha producido, un incremento notable y visible de la calidad de vida. Eso hace que la gente se sienta identificada con quienes les dan soluciones.
Rodr¨ªguez de la Borbolla: "El PSOE est¨¢ encerrado en s¨ª mismo"
P. ?Qu¨¦ opina de la subida de IU o del resurgimiento en su comunidad del PA?R. IU ha tenido en estas ¨²ltimas elecciones una posici¨®n relativa en Andaluc¨ªa, menor que la que consigui¨® en la doble convocatoria, legislativas y auton¨®micas, del 86. En las tendencias profundas del electorado y de la sociedad andaluza, IU est¨¢ m¨¢s baja que en 1986, y en el resto de Espa?a est¨¢ un punto m¨¢s alto. ?Por qu¨¦? Porque ha subido en detrimento de otra posible opci¨®n progresista: el CDS. Hay una franja de la ciudadan¨ªa que no tiene definida su opci¨®n pol¨ªtica a medio plazo. Y se trata de una, franja progresista a la que debemos dedicar atenci¨®n. En cuanto al PA, es como un guadiana que surge y desaparece. No quiero ser peyorativo, pero me parece que el PA s¨®lo tiene espacio 2n la medida en que otros nos equivoquemos.
Autosuficiencia
P. ?Con la p¨¦rdida de la mayor¨ªa absoluta se pierde tambi¨¦n la soberbia?
R. Pienso que el PSOE est¨¢ un poquito encerrado en s¨ª mismo, lo cual no es soberbia. Es tal vez una sensaci¨®n de autosuficiencia. Y eso se ha transmitido a la sociedad. Me parece que es necesario que el partido se abra un poquito m¨¢s y que est¨¦ menos seguro de s¨ª mismo. Nosotros no tenemos la verdad absoluta. La verdad es una cosa que se construye entre muchas gentes. El PSOE no puede ser el resultado de unos impulsos unidireccionales de las instancias de direcci¨®n. Las decisiones a las que llegue el partido tienen que ser el resultado de una s¨ªntesis entre mucha gente que est¨¢ en trabajos de responsabilidad y otras que est¨¢n teniendo contacto con los ciudadanos todos los d¨ªas.
P. Pero, ?no es soberbia que Felipe Gonz¨¢lez y Julio Anguita no hayan mediado a¨²n palabra?
R. Anguita es un personaje que tiende a dogmatizar y que presenta las cosas en t¨¦rminos de blanco o negro. A Anguita le faltan matices. Ahora est¨¢ en un momento positivo, que tarde o temprano tendr¨¢ que relativizar. Felipe Gonz¨¢lez es todo lo contrario a la soberbia y al desprecio. Conozco su comportamiento pol¨ªtico y nunca ha necesitado afirmarse contra nadie.
P. Dentro del PSOE, ?qu¨¦ es usted: cr¨ªtico u obediente?
R. Ni lo uno ni lo otro. Soy yo, y no me afirmo contra nadie. Comparto y apoyo un proyecto global, que es el del partido en estos momentos, y un liderazgo, el de Felipe Gonz¨¢lez. Pero tengo mis ideas y las expreso cuando lo considero necesario.
P. ?Qu¨¦ opina de Ricardo Garc¨ªa Damborenea?
R. No comparto su posici¨®n. Prefiero defender mis ideas en el seno de la mayor¨ªa. Pienso que en democracia las sectas siempre encierran y esclerotizan.
P. ?Y del atrincheramiento de Nicol¨¢s Redondo?
R. Aqu¨ª influyen varias cosas, tanto personales como pol¨ªticas. Tenemos que entrar en una etapa nueva y hay que buscar unas reglas del juego que sirvan para establecer las relaciones permanentes entre el PSOE de hoy y la UGT de hoy. Hay un problema social entre las dos organizaciones, pero tambi¨¦n se trata de un problema de la familia socialista. Creo que es el momento, una vez que el PSOE tiene garantizado otros cuatro a?os de Gobierno, de pensar en profundizar cuales son los puntos de encuentros.
Macrocifras
P. Pero habr¨¢ alg¨²n cauce.
R. No hay un s¨®lo cauce, sino varios. Primero hay que quitarle la magia a las macrocifras, no s¨®lo desde el Gobierno sino tambi¨¦n desde la UGT. Creo que hay que estar menos en las macrocifras y m¨¢s en la micropol¨ªtica, en la vida cotidiana de las gentes en las empresas y en sus aspiraciones inmediatas.
P. ?De qui¨¦n es el error del divorcio entre el PSOE y la UGT?
R. No se puede achacar a nadie. Los sindicatos, y entre ellos UGT, han centrado excesivamente su opci¨®n en su relaci¨®n con el Gobierno y, en concreto, en su relaci¨®n con los presupuestos que hace ¨¦ste. Ah¨ª se da una focalizaci¨®n tremenda, lo cual provoca que se caiga en cuestiones coyunturales. El margen de maniobra pol¨ªtico que existe en una sociedad es m¨¢s amplio que el que queda s¨®lo en los presupuestos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.