Vencedores absolutos

El Foro C¨ªvico ha conseguido en once d¨ªas lo que a¨²n hace dos semanas parec¨ªa pol¨ªtica ficci¨®n en este Estado que, como pocos, ha sufrido la decadencia en que sume a las sociedades el r¨ªgido sistema del dogma marxista-leninista. Checoslovaquia tendr¨¢ un gobierno multicolor.Los hombres que se erigieron en conciencias nacionales, Alexander Dubcek, Vaclav Havel, el cardenal Frantisek Tomasek o el anciano Jiri Hajek, perseguidos y vilipendiados durante d¨¦cadas, son vencedores absolutos. Sobre la gran oleada que con su coraje desataron estos s¨ªmbolos, cabalgan aquellos que habr¨¢n de crear la nueva Checoslovaquia.

Salen ahora a la superficie los pol¨ªticos y estadistas que, una vez liquidados los vestigios de la esclerosis comunista que paraliz¨® a este pa¨ªs centroeuropeo, establecer¨¢n el marco en que este pueblo volver¨¢ a ocupar el puesto que le corresponde entre las naciones desarrolladas.

Una de las m¨¢ximas promesas en este momento de confusi¨®n, tras la ca¨ªda de los irredentos es el economista Valtr Koniarek. En los ¨²ltimos meses fue el enemigo n¨²mero uno de Miroslav Stepan, que intent¨® liquidarlo pol¨ªticamente aludiendo al compromiso de sus hijos con la oposici¨®n democr¨¢tica.

Komarek es la ant¨ªtesis de Stepan y Milos Jakes. Un hombre tolerante, de gran cultura, ha visto bajo amenaza de disoluci¨®n su Instituto de Prognosis Econ¨®mica por el simple hecho de decir la. verdad: que los ¨ªndices econ¨®micos de Checoslovaquia marchan sin pausa hacia la cat¨¢strofe de no concederse una libertad pol¨ªtica necesaria imprescindible para el desarrollo.

Koinarek logr¨® sobrevivir dentro del aparato, pero no es un colaboracionista de gentes como Jakes y Stepan. Es decente e inteligente, le califica el gran hombre honesto de la oposici¨®n, Jiri Hajek. Els un hombre que, desde la izquierda, quiere sacar a su pa¨ªs del desastre en que se ha visto sumido por la incompetencia de los normalizadores.