Nadia Comaneci

"He dejado atr¨¢s un confortable apartamento, un coche y una seguridad financiera, pero no hay nada que valga m¨¢s que la libertad". Con estas palabras, Nadia Comaneci, la atleta rumana estrella de oro de los Juegos Ol¨ªmpicos de 1976 en Montreal (Canad¨¢), explic¨® ayer su huida de Ruman¨ªa y su petici¨®n de asilo pol¨ªtico en Hungr¨ªa.Seg¨²n la agencia AFP, Nadia Comaneci abandon¨® ayer mismo Hungr¨ªa en direcci¨®n a un pa¨ªs de Occidente no especificado. La agencia afirm¨® que la atleta dej¨® el hotel Royal de la localidad de Szeged a bordo de un autom¨®vil norteamericano conducido por dos ciudadanos de esta misma nacionalidad. Por su parte, la agencia oficial h¨²ngara MTI inform¨® que Comaneci viaj¨® desde Szeged con direccci¨®n a Budapest. Otras informaciones apuntaban que la atleta podr¨ªa haberse dirigido a Austria.

Nadia Comaneci, que acaba de cumplir 28 a?os, cruz¨® el martes por la noche la frontera entre Ruman¨ªa y Hungr¨ªa por una localidad del sureste de su pa¨ªs, junto a otros seis atletas rumanos, seg¨²n confirm¨® ayer un portavoz del Ministerio del Interior en Budapest. En la localidad h¨²ngara de Szeged, Nadia Comaneci y sus compa?eros de fuga explicaron a la guardia fronteriza de Hungr¨ªa que su huida hab¨ªa sido Planeada desde hac¨ªa varios meses y que para atravesar la frontera hab¨ªan contado con la ayuda de un amigo rumano".

Nadia Comaneci, que a la edad de 14 a?os conmocion¨® al mundo por ser la primera atleta que consigui¨® la m¨¢xima puntuaci¨®n, un 10, en unos ejercicios gimn¨¢sticos, y que se convirti¨® en uno de los estandartes propagand¨ªsticos de la dictadura de Ceaucescu, dijo ayer que el Gobierno rumano le hab¨ªa negado en repetidas ocasiones la posibilidad de aceptar ofertas de trabajo como entrenadora en Occidente sin ninguna raz¨®n e incluso realizar viajes al extranjero. Recientemente le hab¨ªan denegado un permiso para viajar de turista a Hungr¨ªa.

Comaneci forma parte de los m¨¢s de 20.000 rumanos, la mayor parte de origen h¨²ngaro, que han huido de la dictadura de su pa¨ªs para refugiarse en Hungr¨ªa desde principios de a?o. Ruman¨ªa es el ¨²nico pa¨ªs del Este europeo impermeable, de momento, a la ola de reformas democr¨¢ticas.

La atleta rumana, que se retir¨® de la competici¨®n en 1981, revolucion¨® la gimnasia femenina al demostrar que con s¨®lo 14 a?os se pod¨ªa llegar a la perfecci¨®n. De padre mec¨¢nico y madre oficinista, Nadia Comaneci se inici¨® de muy ni?a en la gimnasia al ser descubierta con s¨®lo seis a?os por Bela Karoly, el entrenador que utiliz¨® su cuerpo para revolucionar los m¨¦todos f¨ªsicos y m¨¦dicos de la preparaci¨®n de los deportistas. Ya en 1975 fue declarada "mejor deportista del mundo" tras su actuaci¨®n en los Campeonatos de Europa, donde obtuvo cuatro medallas de oro. Sin embargo, su consagraci¨®n lleg¨® un a?o despu¨¦s en los Juegos Ol¨ªmp¨ªcos, donde se convirti¨® en la reina de Montreal, con siete dieces, tres medallas de oro, una de plata y otra de bronce.

Juez internacional en competiciones de gimnasia desde su abandono del deporte, Nadia Comaneci, la mujer colmada de honores en su pa¨ªs -estaba en posesi¨®n de la Medalla de Oro de la Hoz y el Martillo y hab¨ªa sido nombrada H¨¦roe del Trabajo Socialista-, a la que incluso se lleg¨® a relacionar sentimentalmente con el hijo del presidente rumano, Nicolae Ceaucescu, ha dejado su pa¨ªs en busca de la libertad.