Tropas rebeldes atacan el palacio presidencial de Manila

Aviones de combate de las fuerzas a¨¦reas controladas por tropas rebeldes bombardearon durante la madrugada espa?ola el palacio de Mala ca?ang, sede del Gobierno filipino. Horas antes, un grupo de militares dirigido por un coronel y apoyado por carros de combate, ocup¨® parte de dos bases de Manila, una de ellas la a¨¦rea de Villamor, en un nuevo intento de golpe de Estado contra la presidenta Coraz¨®n Aquino, seg¨²n inform¨® el secretario de Defensa del archipi¨¦lago, Fidel Ramos. El ministro espa?ol de Asuntos Exteriores, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, transmiti¨® esta misma madrugada el apoyo de Madrid al Gobierno constitucional de Aquino.

Ramos afirm¨® que unos 200 soldados rebeldes, apoyados por dos carros de combate, hab¨ªan entrado en Villamor, donde se escucharon varias explosiones de granadas. Otras unidades rebeldes entraron en el Fuerte Bonifacio, situado al sur de Manila.La confusi¨®n reina en la capital filipina, cuyos habitantes fueron despertados en mitad de la noche por las explosiones, que se fueron extendiendo a diversos barrios residenciales. El aeropuerto internacional est¨¢ cerrado, pero se mantienen las comunicaciones telef¨®nicas, seg¨²n el embajador espa?ol, Enrique Romeu, que se encuentra en contacto permanente con Madrid.

"No podemos salir del palacio, pero las fuerzas gubernamentales est¨¢n rechazando a los rebeldes", afirm¨® Lourdes Sytangco, portavoz de la presidencia.

Aquino, en un mensaje transmitido a la poblaci¨®n por radio y televisi¨®n a las 4.40 (21.40, hora peninsular), pidi¨® apoyo para democracia y la causa de la libertad "Esta naci¨®n nunca deber¨¢ caer de nuevo en las manos de los tiranos", dijo. La presidenta inst¨® a los filipinos a mantenerse alerta "Os llamar¨¦ si hay necesidad de convocar el hist¨®rico poder popular".

Estados Unidos amenaz¨® con cortar toda su ayuda a ese pa¨ªs si triunfa el golpe.

Ramos indic¨® que tropas leales rodean las instalaciones ocupadas por los rebeldes, que dirige un coronel, primo, de Gregorio Gringo Honasan, quien encabez¨® otra revuelta militar en agosto de 1987.

Horas antes de que los amotinados iniciaran su acci¨®n, el jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito filipino, general Renato de Villa, quien inform¨® a los periodistas que hab¨ªa sido descubierta una intentona golpista para derrocar a Aquino, de 56 a?os, de un grupo de soldados renegados vinculados a Honasan. De Villa dijo que la asonada deber¨ªa tener lugar hoy, 1 de diciembre, y que hab¨ªa sido descubierta ayer por la ma?ana, cuando un grupo de soldados de elite trataron de asaltar la estaci¨®n de telecomunicaciones de Tagaytay, al sur de Manila, pero tropas leales les impidieron el paso.

Varios militares y civiles relacionados con la acci¨®n fueron detenidos entonces, pero m¨¢s tarde, una vez ocupada la base de Villamor, se iniciaba un intenso bombardeo en esa misma estaci¨®n. "Parece que muchas personas, en su mayor¨ªa civiles, han sido heridas", indic¨® la radio DZRH.

"He informado a la presidenta Aquino y le he dicho que puede tener confianza en que las fuerzas armadas de Filipinas mantendr¨¢n bajo control la situaci¨®n", afirm¨® Ramos, pero la intentona golpista fue tomando cuerpo a lo largo de la noche y lo que se anunci¨® como un golpe abortado hab¨ªa adquirido al cierre de esta edici¨®n un desarrollo imprevisible.

El arzobispo de Manda, cardenal Jaime Sin, hizo un llamamiento a las tropas, transmitido por radio, para que pongan fin a la intentona golpista y no causen un ba?o de sangre.