Alfred Grosser: "La lectura del Plan Kohl sobre la reunificaci¨®n es falsa"

El discurso ante el Bundestag del canciller Helmut Koffl ha disparado en Francia la alarma de la reunificaci¨®n. Algunos medios han reaccionado moderadamente, en contraste con la estridencia mayoritaria. Alfred Grosser, de 64 a?os, historiador especializado en Alemania y en la pol¨ªtica exterior francesa, combate la interpretaci¨®n alarmista del proyecto de Kohl sobre la existencia de un ¨²nico Estado alem¨¢n. "La lectura", dice, "hecha en t¨¦rminos de reunificaci¨®n es falsa".

Profesor del Instituto de Estudios Pol¨ªticos de Par¨ªs, Grosser est¨¢ en posesi¨®n del Premio de la Paz, el mismo'que los libreros alemanes han concedido al disidente checo Vaclav Havel. Europe¨ªsta convencido, Grosser preside Eurocreation, una agencia de j¨®venes creadores europeos en todos los campos.Pregunta. ?C¨®mo se ve desde Francia el problema de la reunificaci¨®n alemana?

Respuesta. Es preciso distinguir entre los franceses que responden en los sondeos -las respuestas de la gran masa son todas positivas, piensan que habr¨¢ una reunificaci¨®n de Alemania, no ven por qu¨¦ habr¨ªa de ser peligrosa ni por qu¨¦ se -opondr¨ªa a la unificaci¨®n de la Comunidad Europea- y las opiniones en los medios pol¨ªticos o period¨ªsticos, que son completamente diferentes. Ah¨ª hay miedos que crecen o que vuelven a aumentar y entre los que hay que establecer diferencias. En primer lugar, existe un miedo muy antiguo y completamente negativo que determin¨® ya la pol¨ªtica francesa en 1945. Es el de creer que Hitler es el fruto de la unidad alemana, es decir, que cuando hay unidad alemana, existe el riesgo de que surja un Hitler. Esta actitud es hist¨®ricamente falsa y pol¨ªticamente absurda. Los peri¨®dicos y los pol¨ªticos franceses han le¨ªdo muy mal la declaraci¨®n de Helmut Kohl.

?sta dice que durante mucho tiempo todav¨ªa habr¨¢ dos Estados alemanes y 's¨®lo al t¨¦rmino de un proceso muy largo, cuando todo habr¨¢ evolucionado mucho m¨¢s en Europa del Este, podr¨¢ considerarse la existencia de una unidad estatal alemana, que hoy es inaceptable para la Uni¨®n Sovi¨¦tica.

Por eso creo que los medios pol¨ªticos y la intelligentsia francesa est¨¢n demasiado excitados por una sola palabra -la unidad alemana-, en lugar de ver todos los problemas, muy graves y muy reales, que se plantean para todos los pa¨ªses.de la Europa del Este, incluida la RDA. Dicho esto, todo el mundo se alegra del fin del muro y del acceso a una mayor libertad de los alemanes del Este.

Problemas a la CE

P. Pero usted ha manifestado que en las respuestas favorables de los sondeos hay falta de informaci¨®n y de reflexi¨®n. ?Qu¨¦ quiere decir con ello?

R. Quiero decir que la reacci¨®n espont¨¢nea de los franceses es hoy mayoritariamente de fuerte simpat¨ªa hacia Alemania y los alemanes. Desde hace variosa?os, todos los sondeos indican que la Rep¨²blica Federal de Alemania (RFA) encabeza la escala de simpat¨ªa en Francia. A partir de esta simpat¨ªa, se dice que la reunificaci¨®n alemana no plantea demasiados problemas a la CE, y esto no es cierto.Si alguna vez Alemania estuviera plenamente reunificada, eso crear¨ªa, en una segunda fase, graves problemas a la CE debido al desequilibrio econ¨®mico. En

una primera fase, laRFA sufre la apertura. del muro -porque debe contribuir para que la econom¨ªa de la RDA no se hunda cuando la gente accede a la libertad, y paga muy caro tambi¨¦n el caso de Polonia.En una segunda fase, los recursos humanos y t¨¦cnicos de la RDA se sumar¨¢n, aunque ser¨¢n una parte para la RFA y, sobre todo, para la CE. Todo depende, pues, de si, dentro de unos a?os, cuando el problema se plantee, existe o no verdaderamente una Comunidad Europea.

La RFA no es ya un Estado plenamente soberano, no m¨¢s que Espa?a o Francia, y subestimamos toda la legislaci¨®n que se ha hecho en Bruselas, es decir, hasta qu¨¦ punto todos los pa¨ªses est¨¢n interconectados econ¨®mica, social y jur¨ªdicamente en una CE no todav¨ªa perfecta, pero bastante evolucionada para que se pueda decir que la RFA es simplemente un Estado soberano.

En Francia no gusta deciresto porque entonces habr¨ªa que decir que Francia tampoco es soberana, y Francia est¨¢ muy orgullosa de su soberan¨ªa, aunque sea limitada.

P.Todo el mundo insiste en reforzar la CE. ?Esa insistencia no indica, sin embargo, una desconfianza hacia la RFA?

R. S¨ª, es verdad. No hay que decirle demasiado a Alemania: "Est¨¢ muy bien, son ustedes muy gentiles, pero s¨®lo si la CE acaba de construirse". Creo que el presidente de la Rep¨²blica, FranQois Mitterrand, est¨¢ a caballo entre dos actitudes que existen en Francia desde hace 40a?os.

Las dos defienden que hay que construir Europa con Alemania, pero unos dicen que hay que hacerlo porque la RFA es un socio normal en una Europa integrada y otros afirman: "Corno tenemos miedo de que Alemania se incline hacia el Este, hay que amarrarla lo m¨¢s s¨®lidamenteposible a Europa". Mitterrand est¨¢ a medio camino entre las dos.

P. ?Y ¨¦sj es la actitud correcta?

R. No. La actitud correcta es ¨²nicamente la primera. Toda la gente que en, Francia ha dicho: "Es horrible, la RFA va a encaminarse hacia el Este", se ve ahora en la obligaci¨®n de decir que es m¨¢s peligroso que la RDA bascule hacia el Oeste.

Lo que significa que, pase lo que pase, dir¨¢n que siempre hay un peligro desde Alemania. Y ¨¦sta es una actitud que se me hace insoportable.

P. ?Son los mismos que dicen que la ca¨ªda del muro es la muerte de la CE?

R. S¨ª. Un ejemplo: dicen que los verde¨ªalemanes son en reaffdad rojos y pardos, que est¨¢n influidos por Mosc¨², pero en el fondo son neonazis. Sin embar go, el Partido Verde afirma hoy que no es necesaria, a ning¨²nprecio, la reunificaci¨®n mania.

P. ?Por qu¨¦ esas actit

R. Hay, por una par tradici¨®n, y, por otra, exis tivamente, un problema rio de equilibrio de pote Europa. Hay que tener er que Francia equilibraba rioridad real de la econo mana por tres factores e mente: Hitler es el pas Alemania, no el de Fran sotros somos uno de lo grandes, y tenemos el a mica y Alemania no. Aho Hitler empieza a estar 1 cuatro son mucho menos nos en epocas de distensi tercer lugar, en per¨ªodos se habla sobre todo de d el arma at¨®mica no es ya diplom¨¢tica.

Demasiado r¨¢pido

P. ?Qu¨¦ opina del Plan por qu¨¦ cree que no cons sus aliados antes de expo

R. Tampoco consult¨® nistro de Asuntos Ext( Efectivamente, fue pres deprisa y corriendo, en ni¨®n demasiado r¨¢pida para tener algo que pr ante el Parlamento antes cuentro entre George Bus Jail Gorbachov. Sin du consult¨® al El¨ªseo, sobre hay dos hip¨®tesis: no con El¨ªseo porque no consult die o bien por venganza c hecho de que Mitterran( fecha de su visita a la R consultar a Kohi.

El contenido del plan aprobado tambi¨¦n por los dem¨®cratas, que est¨¢n to te en contra de la reuni en los pr¨®ximos a?os, muestra que la lectura h t¨¦rminos de reunificaci¨®n lectura falsa. Es un plan c mite hacer creer a la dere mana m¨¢s extrema, de Kohl tiene necesidad -p pr¨®ximas elecciones, que de la reunificaci¨®n, y al tiempo est¨¢ destinado a Washington, Mosc¨², et para decir: "Habr¨¢ dura cho tiempo una RDA coi beran¨ªa exterior y su so mffitar".