La Xunta y los partidos adoptan grandes precauciones, para evitar irregularidades electorales

La Xunta de Galicia y los principales partidos extremar¨¢n las precauciones para evitar irregudaridades en las elecciones auton¨®micas del pr¨®ximo domingo, d¨ªa 17. El Gobierno gallego ha ordenado que las actas de las mesas electorales se env¨ªen directamente a sus delegaciones provinciales sin pasar por los ayuntamientos y espera poder ofrecer los primeros resultados una hora despu¨¦s de cerrarse las urnas. Algunas fuerzas pol¨ªticas, como el Partido Popular, dispondr¨¢n de cuatro personas por cada mesa para controlar el desarrollo del escrutinio.

Los conflictos surgidos por el recuento de votos en las pasadas elecciones generales, especialmente en las circunscripciones de Murcia, Pontevedra y Melilla, han obligado a la Xunta y a los partidos mayoritarios a movilizar todos los medios a su alcance ante la jornada, del pr¨®ximo domingo. Las insinuaciones del vicepresidente del PP, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, alertando ante el peligro de un supuesto pucherazo en los comicios gallegos han sido duramente contestadas por el PSOE, partido mayoritario en el Gobierno aut¨®nomo. Sin embargo los socialistas han dispuesto un estricto control de, todas las mesas, en una comunidad donde la dispersi¨®n de los n¨²cleos de poblaci¨®n puede favorecer pr¨¢cticas para manipuilar el voto.El presidente de la Xunta, Fernando Gonz¨¢lez Laxe, asegur¨® la pasada semana, pasada m¨¢s conocerse la orden de repetir las elecciones en Pontevedra, que su Gobierno se compromet¨ªa a garantizar que no se produjesen situaciones semejantes en los comicios auton¨®micos. La Consejer¨ªa de Presidencia de la Xunta ser¨¢ la encargada de controlar el escrutinio y el desarrollo de la jornada electoral. El conselleiro Pablo Gonz¨¢lez Mari?as ha dado instrucciones para que las actas que contienen los resultados de cada mesa sean enviadas directamente a las delegaciones provinciales de Presidencia sin pasar antes por los ayuntamientos, en contra de lo que se ven¨ªa haciendo hasta ahora.

Proceso inform¨¢tico

El control del sistema inform¨¢tico que procesar¨¢ los resultados ha sido encargado a la empresa Sofernasa, que ya cuenta con la experiencia de las elecciones auton¨®micas de 1985. Los delegados gubernativos en casa mesa electoral enviar¨¢n los datos por tel¨¦fono a la sede central de la Xunta en Santiago de Compostela, donde los procesar¨¢n m¨¢s de 200 ordenadores.

Seg¨²n fuentes de la Conseller¨ªa de Presidencia, se espera que a partir de las 21.00 horas, una horas despu¨¦s de cerrarse los colegios, puedan ofrecerse los primeros resultados significativos sobre la tendencia de voto. Alrededor de las 0.30 horas del d¨ªa 18 se estar¨¢ en disposici¨®n de conocer ya los datos finales.

Por su parte, las principales fuerzas pol¨ªticas est¨¢n dispuestas tambi¨¦n a ejercer una celosa vigilancia sobre las votaciones y los escrutinios. El Partido Popular tendr¨¢ dos interventores en cada mesa y otros dos o tres apoderados para lo cual necesitar¨¢n el apoyo de unas 10.000 personas, la mayor¨ªa de ellos militantes de la organizaci¨®n. Los socialistas movilizar¨¢n a m¨¢s de 11.000 agentes electorales, una cifra que, seg¨²n su secretario de organizaci¨®n en Galicia, Jos¨¦ Nogueira, es similar a la de anteriores convocatorias.

En el CDS se han dado instrucciones para que ninguna mesa quede sin interventor, mientras que otros partidos con menos recursos deber¨¢n repartir sus efectivos aunque, como se?al¨® un portavoz del Partido Nacionalista Galego (PNG), tienen "un muy especial inter¨¦s en controlar estrictamente todo lo que suceda en los colegios". Los agentes electorales han sido advertidos tambi¨¦n sobre la proliferaci¨®n de pr¨¢cticas, como el reparto de papeletas ante las puertas de los colegios, que tradicionalmente se repiten en Galicia en cada cita con las urnas.

La posibilidad de que las elecciones arrojen un resultado muy apretado, como indican la mayor¨ªa de las encuestas, hace prever que los partidos revisar¨¢n el recuento acta por acta del mismo modo que ocurri¨® en Murcia, Pontevedra y Melilla tras los comicios del pasado 29 de octubre.

En Galicia pueden ser decisivos los abundantes votos de la emigraci¨®n. En las elecciones auton¨®micas de 1985, en las que Coalici¨®n Popular roz¨® la mayor¨ªa absoluta, ya se produjo una situaci¨®n semejante. Los populares y el Partido Socialista Galego-Esquerda Galega se disputaron hasta varios d¨ªas despu¨¦s de los comicios un esca?o en Pontevedra, que finalmente fue a parar a la formaci¨®n nacionalista tras el escrutinio de los sufragios de los residentes ausentes.