La RFA conf¨ªa en Becker para ganar de nuevo a Suecia

La Rep¨²blica Federal de Alemania est¨¢ preparada para despedir en Stuttgart la temporada m¨¢s brillante de su historial ten¨ªstico. Tras los dobletes conseguidos por los campeones mundiales Boris Becker y Steri Graff en Wimbledon y Flushing Meadow, nadie piensa ceder la Copa Davis, ganada por vez primera el pasado a?o, en Goteborg, ante Suecia. Hoy, en la primera jornada, Beeker se enfrentar¨¢ a Stefan Edberg despu¨¦s de que Carl-Uwe Steeb lo haya hecho a Mats Wilander.

PEDRO HERN?NDEZ, ENVIADO ESPECIAL

La prevista fiesta alemana, basada en la fe ciega que los aficionados tienen en Becker, est¨¢ organizada bajo el s¨ªmbolo del lujo. Stuttgart, las capital de las cuatro ruedas, con las factor¨ªas de Mercedes y Porsche en estrecha competencia, aporta gran parte de ¨¦l y el rumano Ion Tiriac, manager de Becker y responsable de la organizaci¨®n de la final tras comprar los derechos a la federaci¨®n germana, a?ade el resto.Cuatro mil localidades especiales para vips, a 120.000 pesetas, aseguran el champa?a mientras se aplaude c¨¢lidamente la segura victoria. Tiriac es el primero en garantizarla a sus clientes, aunque, en sus sue?os, el equipo sueco debe aparecer como una pesadilla: "La RFA es la favorita porque juega en casa y la mentalidad de Boris es superior en estos compromisos". La opini¨®n de Tiriac tiene matices m¨¢s viscerales: "El tenis-porcentaje desapareci¨® con el sueco Bjorn Borg. Este deporte est¨¢ ahora dominado por animales que te matan a pelotazos. El checoslovaco Ivan Lendl y Becker son dos de ellos y los ¨²nicos que pueden aspirar a ocupar de forma estable el primer lugar mundial". Sin embargo, la Copa Davis siempre necesita un tercer punto y ya es m¨¢s problem¨¢tico hablar en t¨¦rminos tan euf¨®ricos de Steeb, el n¨²mero dos de la RFA, y de Eric Jelen.

Los suecos, habitualmente parcos en sus comentarios, viven esta final con una sensaci¨®n distinta a las anteriores. La derrota de Goteborg es una espina y tanto Edberg como Wilander esperan ansiosos la revancha. Edberg, tras batir hace dos semanas a Becker en el Masters neoyorquinto, tiene la moral muy elevada. Wilander, tras su nefasta temporada, desea desquitarse.

Una noche de amor

En 1985, en plena explosi¨®n de la beckerman¨ªa tras el inesperado primer ¨¦xito de Boris en Wimbledon, Suecia visit¨® M¨²nich en otra final de la Copa Davis. Fue tan pasional que una joven b¨¢vara lleg¨® a ofrecer, a trav¨¦s de un peri¨®dico, una noche de amor a cambio de una entrada para el Olimpia Halle. Pese a ese am biente y a que Becker no fall¨® pues gan¨® sus dos partidos indi viduales, los suecos se llevaron la victoria por 3-2 tras derrotar Edberg a Michael Westphal en el encuentro decisivo.

Jon Anders Sjoengren y el yugoslavo Nikki Pillic, capitanes respectivos de Suecia y la RFA calculan sus posibilidades con tando con los puntos de entonces. Para aqu¨¦l, Wilander y Edberg deben derrotar a Steeb y la pareja Edberg-Anders Jarryd mostrar que todav¨ªa merece un respeto pese a no competir juntos ¨²ltimamente. Para ¨¦ste, los dos de Becker son seguros y conf¨ªa en ¨¦l y Jelen para el tercero.