La ubicaci¨®n del dep¨®sito de residuos radiactivos de alta actividad no se decidir¨¢ antes de 10 a?os
La selecci¨®n de la zona donde podr¨ªa establecerse el dep¨®sito permanente de residuos radiactivos de alta actividad en Espa?a no est¨¢ hecha ni lo estar¨¢ en varios a?os, aseguraron ayer t¨¦cnicos de la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa). Aurelio Ulibarri, director de ingenier¨ªa de Enresa, afirm¨® ayer, en unas jornadas t¨¦cnicas de la Asociaci¨®n Espa?ola de Cient¨ªficos (AEC), que duda sobre la conveniencia de la total transparencia informativa en el tema de los residuos radiactivos, que tantos recelos provoca, cuando el proceso de selecci¨®n puede durar 10 a?os m¨¢s.
A finales de a?o la extensi¨®n acotada de territorio que podr¨ªa albergar un dep¨®sito geol¨®gico profundo de esta clase de residuos ascender¨¢ todav¨ªa 30.000 kil¨®metros cuadrados de terrenos de granito, sal o arcilla, diseminadas por todo el territorio nacional, explic¨® ayer Ulibarri. "M¨¢s no puedo decir", asegur¨®, refiri¨¦ndose a los rumores que surgen respecto a zonas de Espa?a, "porque no hay nada m¨¢s".Ulibarri, que intervino en unas jornadas t¨¦cnicas convocadas por la Asociaci¨®n Espa?ola de Cient¨ªficos (AEC), manifest¨® sus dudas sobre la convenlencia de mantener absoluta transparencia informativa en un tema; el de los residuos radiactivos, que provoca tantos recelos, cuando el proceso de selecci¨®n puede durar 10 a?os m¨¢s: "Hay pa¨ªses que optaron por mantener el secreto pr¨¢cticamente hasta que se tom¨® la decisi¨®n", dijo Ulibarri, al tiempo que senalaba que dar informaci¨®n detallada lo ¨²nico que provoca son avalanchas de llamadas interes¨¢ndose por saber si un determinado t¨¦rmino municipal se encuentra entre los candidatos.
Pasado el a?o 2000
La misi¨®n de Enresa se limita a hacer una selecci¨®n, sobre criterios estrictamente t¨¦cnicos de los lugares aptos por su estabilidad geol¨®gica para albergar un dep¨®sito subterr¨¢neo de residuos de alta actividad, explicaron sus representantes. La decisi¨®n final la tomar¨¢ el Parlamento pasado el a?o 2000.Los residuos de baja actividad constituyen un mundo aparte frente a los de alta actividad, aunque ambos procedan de instalaciones nucleares o radiactivas. Mientras que la estabilidad y aislamiento de los primeros est¨¢ solucionada satisfactoriamente desde el punto de vista t¨¦cnico, los de alta actividad, con una vida media que puede alcanzar miles de a?os en algunos elementos, plantean problemas no resueltos. Los t¨¦cnicos estiman que encerr¨¢ndolos en bidones o vitrific¨¢ndolos se puede garantizar su aislamiento durante un periodo m¨¢ximo de 1.000 a?os. A partir de entonces s¨®lo las barreras geol¨®gicas podr¨¢n impedir su dispersi¨®n.
Las experiencias espa?olas y de otros pa¨ªses indican que el verdadero problema, sin embargo, es la aceptaci¨®n del emplazamiento por parte de la poblaci¨®n, se?al¨® en las jornadas Baldomero L¨®pez, catedr¨¢tico de Ingenier¨ªa Qu¨ªmica. "La gente esta dispuesta a vivir al lado de industrias contaminantes y peligrosas, pero oyen la palabra radiactivo o nuclear y dejan de escuchar. Es una reacci¨®n emocional", coment¨® Luz Corretjer, juez del Tribunal Europeo de Energ¨ªa Nuclear, quien se?al¨® que la industria nuclear es la m¨¢s regulada desde el punto de vista jur¨ªdico, precisamente por el temor que provoca.
Factor psicol¨®gico
El factor psicol¨®gico fue abordado tambi¨¦n por Diego Azqueta, decano de la Facultad de Econ¨®micas de la universidad de Alcal¨¢ de Henares. "La econom¨ªa deb¨ªa hacer m¨¢s de lo que hace en este terreno, pero no puede ser el ¨²nico factor".Azqueta se?al¨® que existe la paradoja de que la cantidad que un ciudadano est¨¢ dispuesto a pagar para mejorar su calidad de vida es mucho menos que la cantidad que exigir¨ªa por renunciar a lo que considera un derecho, como puede ser no tener un dep¨®sito nuclear en las cercan¨ªas de su casa. "Es de uno a 10. Es muy dif¨ªcil estudiar el tema econ¨®micamente si antes no se han definido los derechos que cada cual tiene o cree tener, y ese debate no se ha producido todav¨ªa en Espa?a". Jos¨¦ Luis Asenjo, presidente de la AEC, coment¨® finalmente: "La aceptaci¨®n ya no se va a encontrar, y el problema va a ser cada vez m¨¢s espinoso. La ¨²nica soluci¨®n es ponerle un precio".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Contaminaci¨®n suelo
- Energ¨ªa nuclear
- Contaminaci¨®n
- Energ¨ªa
- Enresa
- Cementerios nucleares
- Residuos nucleares
- Instalaciones residuos
- Residuos
- Saneamiento
- Empresas p¨²blicas
- Salud p¨²blica
- Problemas ambientales
- Pol¨ªtica sanitaria
- Sector p¨²blico
- Equipamiento urbano
- Empresas
- Sanidad
- Administraci¨®n p¨²blica
- Econom¨ªa
- Urbanismo
- Salud
- Medio ambiente