Juan Manuel Brito Arceo
El ¨²ltimo ¨¢rbitro 'crucificado'
Juan Manuel Brito Arceo, nacido hace 26 a?os en Santa Cruz de Tenerife, conoci¨® todo un camino de rosas en el arbitraje, con un futuro prometedor, hasta que el pasado s¨¢bado dirigi¨®, el partido Barcelona-Sevilla. Tras su actuaci¨®n en este encuentro, su vocaci¨®n se ha convertido en una senda de espinas. Los dirigentes del club azulgrana, su afici¨®n, le han crucificado al considerarle culpable de la derrota de su equipo ante el conjunto andaluz. Los propios dirigentes arbitrales se han pronunciado ya a favor de una sanci¨®n.Brito Arceo recuerda en parte a otro ¨¢rbitro, el malogrado, Guruceta Muro, muerto en accidente de tr¨¢fico hace un par de temporadas. Sus vidas arbitrales parecen paralelas, al igual, que su precocidad en conseguir sus metas. Brito Arceo, al igual, que antes Guruceta, fue el ¨¢rbitro m¨¢s joven en ascender a Primera Divisi¨®n, lo que consigui¨® a los 23 a?os. El ¨¢rbitro tinerfe?o sigue siendo el colegiado m¨¢s joven de esta categor¨ªa. Su G¨®lgota tambi¨¦n ha sido el campo del Barcelona, como lo fue para Guruceta hace una veintena de a?os.
Es uno de los pocos ¨¢rbitros de Primera Divisi¨®n con estudios superiores. No ejerce su t¨ªtulo de Econ¨®micas, aunque s¨ª le sirve para llevar la gerencia
de una empresa de venta de art¨ªculos deportivos al por mayor y de la que es copropietario junto con otros dos socios. "El arbitraje no me facilita mi trabajo, aunque ser conocido me abre algunas puertas", asegur¨® el colegiado tinerfe?o.Brito Arceo confiesa que no
tiene af¨¢n de protagonismo, aunque le gusta que hablen de ¨¦l. Lo ha conseguido sobre todo tras su paso por el Nou Camp campo que pis¨® por primera vez en su carrera. Antes del partido asegur¨® que ser¨ªa el triunfador. Despu¨¦s del encuentro se ha convertido en su pol¨¦mico protagonista y le han llegado los momentos amargos. Por su cabeza ha pasado la idea de colgar el silbato, de abandonar el arbitraje, vocaci¨®n que comenz¨® a los nueve a?os, cuando su padre le permit¨ªa acudir cada mi¨¦rcoles al Frente de Juventudes de Santa Cruz de Tenerife para dar rienda suelta. a su verdadera pasi¨®n: arbitrar. Recuerda que cobraba entonces 35 pesetas por partido.Los malos tragos han llegado para Brito Arceo. A pesar de ellos considera que merece la pena ser ¨¢rbitro, aunque a veces no encuentre una explicaci¨®n convincente. "Soy ¨¢rbitro porque he nacido con ello. Ni yo mismo me lo explico. El arbitraje es una enfermedad, pero sana", confes¨® el colegiado tinerfe?o, que tambi¨¦n protagoniz¨® un deb¨² pol¨¦mico en otra plaza grande, en el campo del Real Madrid, cuando la pasada temporada expuls¨® a Schuster por empujar a un jugador del Zaragoza. Brito Arceo hizo constar en el acta del partido que, al mostrar la tarjeta roja al jugador alem¨¢n del Madrid, ¨¦ste le replic¨®: "?Pero qu¨¦ haces, ni?o?". Schuster fue sancionado por la federaci¨®n por menosprecio al ¨¢rbitro.
El colegiado tinerfe?o, bautizado en Canarias como el pibe de Taco, ha declarado que abandonar¨ªa el arbitraje si tuviese que vivir de ¨¦l. Reconoce que ser ¨¢rbitro le diferencia del resto de los mortales. Nieto de un ¨¢rbitro de los a?os cuarenta, el ¨²nico antecedente deportivo de la familia, sigui¨® los pasos de su abuelo sin haberle visto actuar jam¨¢s. Brito Arceo estima que "hay que tener una personalidad de hierro para ser ¨¢rbitro", vocaci¨®n que considera un vicio.
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