Los sindicatos calculan que la inflaci¨®n aumentar¨¢ entre el 6,5% y el 7% en el a?o 1990

Sindicatos y Gobierno presentaron ayer su propia previsi¨®n de inflaci¨®n en la mesa bipartita. Mientras las centrales calcularon el incremento del IPC entre el 6,5% y el 7%, el ministro de Econom¨ªa, Carlos Solchaga, mantuvo que el porcentaje se situar¨¢ en torno al 5,5%. Estas cifras se pusieron ayer sobre la mesa para abordar la actualizaci¨®n del salarlo m¨ªnimo interprofesional (SMI) de este a?o. La concertaci¨®n ha encontrado ya tres puntos de discordia de dif¨ªcil conciliaci¨®n: la deuda social de 1989 que afecta a los empleados p¨²blicos y la cl¨¢usula que garantice la revisi¨®n de sus retribuciones y el salario social gestionado y financiado por la Administraci¨®n central. Las posturas est¨¢n m¨¢s cercanas en lo relativo a pensiones.

La concertaci¨®n abierta entre sindicatos y Gobierno comenz¨® ayer con la negociaci¨®n de la deuda social contraida con los funcionarios y pensionistas a lo largo de 1989. Con el fin de no caer en guerras de cifras, las dos partes intentaron acercar posiciones en cuanto a los criterios con los que compensar la p¨¦rdida de poder adquisitivo de estos dos colectivos sujetos a impuestos. El Gobierno tampoco quiso hablar de un salario social gestionado y financiado por la Administraci¨®n central para las personas en situaci¨®n extrema de pobreza, una de las reivindicaciones inclu¨ªdas en la Propuesta sindical prior¨ªtaria.Las ofertas presentadas en la mesa no consiguieron encontrarse en los temas que afectan a los funcionarios: ni en lo que respecta a la compensaci¨®n del desfase del IPC del a?o pasado ni a la hora de fijar una cl¨¢usula de revisi¨®n que garantice esta compensaci¨®n en el futuro. La cl¨¢usula de garant¨ªa para los empleados p¨²blicos es una asignatura pendiente de las negociaciones abiertas con el Gobierno desde 1988 y que desembocaron en la huelga general. Aunque las dos partes entienden que sus posturas est¨¢n bastante separadas, el ministro de Econom¨ªa, que estuvo presente en la reuni¨®n con sus hom¨®logos del ministerio de Trabajo y para las Administraciones P¨²blicas, coment¨® que "se nota una mayor aproximaci¨®n con un sindicato" que la que existe entre ellos mismos.

El secretario de acci¨®n sindical de UGT, Apolinar Rodr¨ªguez, rese?¨® que, en medio de las diferencia, el Ejecutivo empezaba a hablar de una revisi¨®n autom¨¢tica de m¨ªnimos para este colectivo, lo que pod¨ªa valorarse como "positivo". Su hom¨®logo en CC OO, Agust¨ªn Moreno, insisti¨® en que los sindicatos no desean que cada a?o se repita la negociaci¨®n de la deuda.

Frente a la propuesta sindical de establecer un salario social, la ministra de Asuntos Sociales, Matilde Fern¨¢ndez, declar¨® que la oferta del Gobierno es irrevocable: ampliar la actual red de servicios sociales, exclusivamente. El representante de Comisiones Obreras insisti¨®, frente a la "posici¨®n cerrada y agarrotada ,del Gobierno", la necesidad de ampliar a todo el Estado las inciativas que sobre salario social est¨¢n adoptando algunas comunidades aut¨®nomas. UGT entiende que estas rentas m¨ªnimas y la red de servicios pueden estar combinadas. La concertaci¨®n encontr¨® terreno m¨¢s abonado en lo que respecta a la actualizaci¨®n de pensiones y la cl¨¢usula de garant¨ªa para este grupo, temas que han condicionado al c¨¢lculo del salario m¨ªnimo interprofesional (SMI).

Salado m¨ªnimo

En la mesa bipartita convocada para el pr¨®ximo 17 de enero, se intentar¨¢ consensuar el incremento del SMI para 1990. Las cosas no son tan sencillas. Seg¨²n ha reconocido el ministro de Econom¨ªa, Ca?os Solchaga, "es dif¨ªcil tratar cada uno de los temas por separado", aunque los sindicatos entienden que la negociaci¨®n de los temas no se condicionan entre s¨ª.

Por el momento, el Gobierno est¨¢ dispuesto a negociar la reactualizaci¨®n del SMI entre el 5,5% (porcentaje que corresponde a su c¨¢lculo de inflaci¨®n para 1990) y el 7% de aumento al que prev¨¦ que ascender¨¢ el IPC real del a?o rasado. Los sindicatos entienden que estas cifras son insuficientes, aunque no descartan el acuerdo, seg¨²n sus previsiones, el IPC para 1990 ser¨¢ entre el 6,5% y el 7%.

Seg¨²n ha anunciado Carlos Solchaga, las pensiones m¨ªnimas de la Seguridad Social con c¨®nyuge a cargo deber¨¢n igualarse al salario m¨ªnimo "de forma inmediata", las que se encuentran por debajo deber¨¢n actualizarse y las que se sit¨²an por encima de este salario deber¨¢n tener en cuenta las desviaciones de la deuda social y acoplarlas para 1990.