Milan Kundera escribe sobre la inmortalidad

PEDRO SORELA Con la salida en Francia de La inmortalidad, la nueva novela del checo Milan Kundera, comienza uno de los primeros fen¨®menos editoriales de la d¨¦cada, con las tiradas de seis d¨ªgitos que lanzan los libros m¨¢s esperados. En Espa?a, la novela saldr¨¢ en marzo publicada por Tusquets. Como ya es costumbre en ¨¦l, Kundera, autor internacional desde La insoportable levedad del ser, no se ha prestado a colaborar con el lanzamiento de su libro -ya muy difundido entre cr¨ªticos y amigos- y se ha negado a conceder entrevistas por razones que su libro ayuda a comprender. S¨ª vale la simplificaci¨®n, la novela trata de las formas con que hoy se viste el mito de la caverna, el deseo de inmortalidad.

El nuevo libro de Kundera es de considerable complejidad pero, a la vez, lectura di¨¢fana lo que por lo dem¨¢s encaja en quien ha dicho m¨¢s de una vez: "Pretendo que mis libros sean divertidos, f¨¢ciles de leer y dif¨ªciles de comprender. Porque detesto los libros dif¨ªciles de leer y f¨¢ciles de comprender" Kundera comenz¨® a escribir su nueva novela durante una estancia de un mes en Mallorca hace dos a?os, si bien la gestaci¨®n, como siempre ocurre, fue mucho m¨¢s larga. La inmortalidad sale ahora en Francia publicada por Gallimard en una tirada de 100.000 ejemplares, y en marzo ser¨¢ publicada por Adelphi en Italia (125.000 ejemplares) y por Tusquets en Espa?a (50.000 ejemplares adem¨¢s de 35.000 en Suram¨¦rica con el sello Tusquets). La novela, de m¨¢s de 400 p¨¢ginas costar¨¢ 2.000 pesetas en Espa?a.Desde lejos

Un hombre que se llama Milan Kundera aguarda en una piscina, como todos los d¨ªas, la llegada de un amigo con el que ha quedado citado a comer. En cierto momento observa que una anciana se despide de su profesor de nataci¨®n moviendo el brazo como si se despidiera desde muy lejos, y eso desencadena una compleja y a la vez meridiana narraci¨®n en la que cada personaje encarna un mito y a la vez una historia, y ¨¦sta representa, si as¨ª se puede hablar, una de las formas con que se recubre hoy el mito de la caverna, el radical existencial del deseo de inmortalidad. El libro terminar¨¢ con la llegada para comer del amigo, Avenarius, y con una larga conversaci¨®n entre el y el personaje autor.

La composici¨®n de la novela se podr¨ªa decir, como una pieza de Bach: un asunto general, la inmortalidad, al que acompa?an otros asuntos caracter¨ªsticos de la obra de Kundera: el sexo, el azar, la muerte... En el estrato de director de orquesta se encontrar¨ªa el escritor, aunque: es probable que ¨¦l no aceptase ese puesto. En otro plano, en la realidad de la novela misma, figura una suerte de alter ego femenino que se llama Agnes, la ¨²nica persona realmente l¨²cida, que ve la inh¨®spita realidad de su entorno, el Par¨ªs contempor¨¢neo, ruidoso y feo, y poblado por una multitud progresivamente an¨®nima y uniforme.

La inmortalidad en el libro de Kundera es a la vez una idea filos¨®fica y algo cotidiano, y ¨¦ste ¨²ltimo es el aspecto que va a desarrollar. Cada personaje protagoniza una historia y a la vez encarna una forma de la inmortalidad, como por ejemplo la generalizada preocupaci¨®n por la propia imagen: ?soy yo, soy lo que piensan los dem¨¢s, o soy lo que transmiten los dem¨¢s? El marido de Agnes, la narradora, desarrolla la idea de que quienes construyen hoy la imagen son los periodistas. Ahora bien, si la imagen que ofrecen de alguien los periodistas no es exacta, el hecho de que ese alguien acepte la imagen se llama traici¨®n, traici¨®n a s¨ª mismo.

Otros personajes buscan la inmortalidad a trav¨¦s del amor, a trav¨¦s del azar -la muerte es azar- o mediante el sexo: la hermana de Agnes demuestra que est¨¢ dispuesta a llevar sus artima?as sexuales hasta la muerte; de hecho, cuanto m¨¢s riesgo existe en ella, m¨¢s fuerte es la relaci¨®n sexual. Con independencia de los abismos de su tem¨¢tica, la novela de Kunderaes f¨¢cil de leer, con niveles de lectura que ser¨ªan sus personajes.

La obra

Si en La insoportable levedad del ser hab¨ªa pesimismo, en La inmortalidad el pesimismo es generalizado y casi absoluto. Parecer¨ªa que nada ni nadie se puede escapar de sus propias trampas y, quiz¨¢, tal vez, se sugiere que si hay algo, alguien inmortal, ¨¦se no ser¨ªa el creador sino la obra de arte.